Zelensky denuncia que Moscú quiere convertir a Ucrania en un “banco de pruebas” de sus armas
KIEV.– El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, aseguró ayer que su país fue atacado por casi 500 drones la semana pasada, así como por más de 20 misiles, y alertó que Rusia está usando su país como “campo de pruebas” para sus armas.
Aunque el primer uso por parte de Rusia del misil balístico de alcance intermedio Oreshnik, caído el jueves en la ciudad de Dnipró, captó la atención mundial, Zelensky hizo hincapié en el aumento de ataques que recibe Ucrania con drones Shahed, de origen iraní.
Ayer por la noche, 50 drones de un total de 73 fueron derribados, según afirmó el presidente ucraniano. En la semana previa, Rusia había lanzado un total de 460 drones de diseño iraní al espacio aéreo de Ucrania, añadió.
“Ucrania no es un campo de pruebas de armas. Ucrania es un estado soberano e independiente. Pero Rusia sigue empeñado en matar a nuestro pueblo, sembrar el miedo y el pánico, y en intentar debilitarnos”, dijo el mandatario en un comunicado.
También ayer, los servicios secretos ucranianos (SBU) mostraron a un grupo de periodistas los fragmentos del nuevo misil balístico ruso, identificado por el presidente ruso Vladimir Putin como Oreshnik y que, según el líder del Kremlin, impactó una fábrica de armamentos en Dnipró.
Moscú indicó que el ejército ruso disparó este misil hipersónico en el centro-este de Ucrania en “respuesta” a los recientes ataques de Kiev contra Rusia con misiles estadounidenses y británicos.
El SBU ucraniano mostró fragmentos metálicos, más o menos grandes y alineados en el suelo.
Los servicios secretos no confirmaron públicamente que los fragmentos pertenezcan al Oreshnik, pero aseguraron que era “la primera vez” que las fuerzas ucranianas veían un proyectil de esas características desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.
“Es la primera vez que se encuentran restos de un misil de este tipo en territorio ucraniano”, declaró un investigador del SBU, que se identificó por razones de seguridad únicamente como Oleg.
“Este objeto no había sido documentado por los investigadores de seguridad nunca antes”, añadió, explicando que se trataba de “un misil balístico”, que correspondería al Oreshnik.
Según Putin, el misil “Oreshnik”, “de alcance medio”, puede alcanzar la velocidad Mach 10, es decir “2,5 a 3 km por segundo” (cerca de 12.350 km por hora).
El dirigente ruso ordenó el viernes iniciar la producción en serie de ese tipo de misil y aseguró que Rusia tenía una “reserva” de esos proyectiles “listos para su uso”.
Rusia bautizó el misil como Oreshnik (“avellano”) y sostiene que es imposible de interceptar con defensas aéreas. Ucrania declaró que el arma alcanzó una velocidad máxima de más de 13.000 kilómetros por hora en su camino hacia Dnipró.
Los misiles balísticos de alcance intermedio recorren hasta 5500 kilómetros.
Dos expertos estatales ucranianos ofrecieron valoraciones prudentes, limitándose a decir que el arma era balística, que volaba en trayectoria balística y que el ataque causó daños civiles.
“Se trata de conclusiones preliminares y para decir algo más concreto hace falta tiempo y un estudio minucioso de los restos del misil”, dijo Ivan, uno de los expertos.
Incentivos para reclutas
Putin, a su vez, promulgó una ley que otorga el perdón de deudas a los nuevos reclutas del ejército que se alisten para luchar en Ucrania.
La medida, cuya versión final apareció en un sitio web gubernamental el sábado, subraya la necesidad que tiene Rusia de personal militar en la guerra.
Según la agencia estatal de noticias rusa Interfax, la nueva legislación permite a aquellos que se inscriban con un contrato de un año cancelar deudas de hasta 10 millones de rublos (96.000 dólares). La ley se aplica a deudas para las cuales se emitió una orden judicial de cobro y cuyos procedimientos de ejecución habían comenzado antes del 1° de diciembre de 2024. También se aplica a los cónyuges de los nuevos reclutas.
Rusia ha intensificado el reclutamiento militar ofreciendo incentivos financieros crecientes, en algunos casos varias veces mayor al salario promedio, a aquellos dispuestos a luchar en Ucrania.
La estrategia le permitió al ejército aumentar sus filas en la zona de conflicto mientras evita otra orden de movilización. Una “movilización parcial” en septiembre de 2022 provocó un éxodo de decenas de miles de hombres rusos, que huyeron del país para evitar el alistamiento.
La intensa y prolongada guerra ha tensionado los recursos rusos. Putin en septiembre pidió al ejército aumentar sus tropas en 180.000 miembros.
Estados Unidos, Corea del Sur y Ucrania dicen que Corea del Norte envió más de 10.000 tropas a Rusia en octubre, algunas de las cuales han comenzado recientemente a participar en combates en las líneas del frente, aumentando la presión sobre el también cansado y sobrecargado ejército de Ucrania.
Agencias Reuters, AP y AFP