Xi Jinping se afianza en el poder al cierre del XX Congreso del Partido Comunista

Xi Jinping durante el Congreso del Partido Comunista en Pekín
Xi Jinping durante el Congreso del Partido Comunista en Pekín - Créditos: @Ng Han Guan

PEKÍN.- El Partido Comunista Chino (PPC) respaldó este sábado “el rol central” del presidente Xi Jinping, en el cierre de un Congreso de siete días que debe desembocar en su reelección para un tercer mandato al frente de la agrupación y del país.

En esta última sesión se aprobó el nuevo Comité Central de la formación comunista y se dio luz verde a unas enmiendas a la Constitución del partido que permitirán incrementar aún más la posición de liderazgo de Xi. Esas enmiendas a sus estatutos están destinadas a consagrar a Xi como núcleo del Partido y a su pensamiento político como su ideología de base. También se fijó la agenda para los próximos cinco años.

Los cerca de 97 millones de miembros deberán “defender el rol central del camarada Xi Jinping en el seno del Comité Central del Partido y del Partido en su conjunto”, según la resolución del Congreso.

Xi Jinping sale del recinto tras la ceremonia de cierre del Congreso del Partido Comunista en Pekín
Xi Jinping sale del recinto tras la ceremonia de cierre del Congreso del Partido Comunista en Pekín - Créditos: @Andy Wong

Desde su llegada al poder a finales de 2012, Xi ha ido acumulando poder en la segunda potencia mundial y ha fortalecido la autoridad del régimen. En un discurso previo, el líder chino había instado al Partido Comunista a “sufrir” y a “ganar” para “seguir avanzando”.

“Atrévanse a luchar, atrévanse a ganar, agachen la cabeza y trabajen duro, estén determinados a seguir avanzando”, lanzó con aire triunfal a los casi 2300 delegados reunidos en el Gran Salón del Pueblo de Pekín.

El domingo, Xi Jinping debe ser reelegido como secretario general del PCC después de la primera reunión del renovado Comité Central. Esto será el preludio de un inédito tercer mandato como presidente chino durante la reunión anual de la Asamblea Popular Nacional en marzo próximo.

El XX Congreso Nacional del Partido Comunista de China desde su creación en 1921 se llevó a cabo en un momento delicado para el gigante asiático, enfrentado a una desaceleración económica por los repetidos confinamientos anticovid y a tensiones diplomáticas con Occidente.

Cambios en la cúpula

Durante una semana, casi 2300 delegados se reunieron a puerta cerrada en Pekín para remodelar la cúpula del poder del partido, y en consecuencia del país, y decidir la orientación de las futuras políticas.

Los delegados eligieron a los cerca de 200 miembros del nuevo Comité Central, una especie de Parlamento interno del partido, cuya nueva composición fue publicada por la agencia oficial Xinhua. Entre los altos funcionarios que no continuarán en su cargo está el primer ministro Li Keqiang.

El número tres del país, Li Zhanshu, el viceprimer ministro Han Zheng, y el presidente de la Conferencia Consultiva Política del pueblo, Wang Yang, también se despiden de sus funciones. El Comité Central fue remodelado aproximadamente en un 65% con respecto al anterior de 2017.

El expresidente Hu Jintao es acompañado fuera del recinto durante el Congreso del Partido Comunista
El expresidente Hu Jintao es acompañado fuera del recinto durante el Congreso del Partido Comunista - Créditos: @NOEL CELIS

En una escena poco habitual en estos cónclaves tan coreografiados, el antiguo presidente Hu Jintao (2003-2013) salió escoltado del Gran Salón del Pueblo antes del cierre. Visiblemente en contra de su voluntad, el hombre de 79 años fue invitado por asistentes de partido a dejar su lugar en primera fila junto a Xi Jinping.

Unas horas después, la agencia oficial Xinhua indicó que Hu salió debido a un malestar físico. “Como no se sintió bien durante la sesión, su equipo, por su salud, lo acompañó a una sala contigua para descansar. Ahora se halla mucho mejor”, señaló.

Para mantenerse en el poder, Xi hizo suprimir en 2018 el límite constitucional de dos mandatos y, a sus 69 años, puede en teoría presidir el país de por vida.

“Este tercer mandato pondrá fin a tres décadas de transición del poder” en China, dijo Neil Thomas, analista de la consultora de riesgo político Eurasia Group.

Analistas y medios especulan sobre la voluntad de Xi de rebautizar su cargo a “presidente del partido”, el título que tenía el fundador de la China comunista, Mao Tse-tung (1949-1976). Xi es precisamente el líder más fuerte del país de las últimas décadas, desde el final de la era fundacional que condujo el venerado Mao.

El Congreso debe conducir a una profunda remodelación del Comité Permanente del Buró Político, un órgano actualmente de siete miembros que supone la máxima instancia del poder en China. Su composición se conocerá también el domingo.

El presidente de China, Xi Jinping (fila inferior, centro), y otros delegados, durante la ceremonia de clausura del Partido Comunista
El presidente de China, Xi Jinping (fila inferior, centro), y otros delegados, durante la ceremonia de clausura del Partido Comunista

De acuerdo con la costumbre, los integrantes del Comité Permanente se anunciarán por orden importancia, con el primer lugar reservado al secretario general.

El segundo o el tercero debería convertirse en el sucesor de Li Keqiang en marzo. Para el cargo suenan nombres como Hu Chunhua, el viceprimer ministro, o Li Qiang, jefe del partido en Shanghai, pese a la caótica gestión del largo confinamiento por un brote de Covid meses atrás.

Lejos de la diplomacia prudente de sus predecesores, Xi mantendrá la firme postura de China en la escena internacional, incluso a costa de incrementar la tensión con Estados Unidos, en particular sobre Taiwán.

En ese sentido, el Congreso acordó también “incluir en la Constitución del Partido (…) su resuelta oposición y la disuasión a los separatistas que buscan la ‘independencia de Taiwán’”.

Agencias AFP y AP