"Vivimos una normalización de la violencia": Jorge Volpi

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 3 (EL UNIVERSAL).- En Partes de guerra, la novela más reciente de Jorge Volpi, ganador de algunos de los premios más prestigiosos en lengua española: el Biblioteca Breve, el Mazatlán de Literatura, el Alfaguara, se reflexiona sobre el mal desde diversos ángulos. Lo político y lo sociológico se cruzan con la condición humana, en la voz de Lucía Spinosi, el personaje principal, una neurocientífica enfrentada a la interrogante del feminicidio que cometen un par de niños y el origen del mal en el contexto mexicano, en la frontera sur del país. Una trama donde la coyuntura actual es ineludible y se hacen presentes la migración, la guerra contra el narco y la violencia de género e intrafamiliar.

Partes de guerra se emparenta, en palabras de Volpi, con novelas como Temporada de huracanes, de Fernanda Melchor; Ceniza en la boca, de Brenda Navarro, y Tejer la oscuridad, de Emiliano Monge, y forma, en su propia trayectoria, una especie de tríptico. La acompañan Las elegidas y Una novela criminal.

"Los intereses de mi generación, de mi grupo de amigos y tal vez de la generación siguiente, eran otros a los que tenía yo en mis libros anteriores. Yo volví a México a principios de 2007, justo ahora me acabo de ir de nuevo (estoy viviendo en Madrid), pero esos nueve años coincidieron con la escalada brutal de violencia que se vincula con el crimen organizado y la acción del Estado. Es algo que no habíamos visto antes. Había muchas otras violencias soterradas en México, pero no esta explosión brutal y terrible. Lo que terminó por pasarle a mi generación fue que la violencia nos llegó encima como a toda la sociedad y un tema que quizá no era esencialmente el que podría haberme interesado, de pronto se volvió inevitable. Las cifras de violencia son las de una guerra civil no declarada", cuenta el autor de En busca de Klingsor.

El narrador que fuera director de Canal 22, del Festival Internacional Cervantino y coordinador de Difusión Cultural de la UNAM dice que en los últimos años ha escrito tres libros mexicanos. "No los pensé deliberadamente como una trilogía, son libros muy distintos: los temas son el tráfico de mujeres en Tlaxcala y el caso de Florence Cassez; ahora está Partes de guerra y la constante es la violencia en México. Hay una normalización de la violencia, si recordamos esos primeros años de la guerra contra el narcotráfico por parte del gobierno de Calderón, sí fue una especie de sorpresa y un shock traumático. Era la época cuando todos los días teníamos el recuento de muertos. Eso se prolonga un poco durante el sexenio de Peña Nieto, aunque el discurso va cambiando, pero no la realidad".

El autor que hoy tiene a su cargo la presencia de la UNAM en España dice que ahora las cifras de violencia siguen siendo altísimas y que lo impresionante es que eso no está en el centro del discurso. "Nos hemos acostumbrado de tal manera que ya casi nada sorprende y cuando sorprende son casos mediáticos muy puntuales que desatan la indignación una semana y luego también son olvidados".

En todos estos años de democracia, asegura, los regímenes en México, por lo menos, desde 2000, no han sido capaces de cambiar el sistema en casi ningún sentido. En especial, el sistema de desigualdad jurídica. "En el país no hay Estado de Derecho, no hay justicia y no hemos podido cambiarlo. No hay capacidad de acción para que se haga justicia, para que se llegue a la verdad, para que se reparen los daños y no se repitan las cosas. Lo más sorprendente es que la militarización se ha exacerbado y López Obrador prometió lo contrario. No disminuyó, sino que se extendió a áreas de la sociedad que nunca antes, desde la Revolución Mexicana, habían estado sujetas al control militar. Es la Guardia Nacional o el aeropuerto, las aduanas, el Tren Maya".

Sobre su papel frente a un escenario político y social turbulento, Volpi dice "los novelistas tratamos de hacer un ejercicio de memoria para entender un poco mejor lo que está sucediendo".