SAN CARLOS DE BARILOCHE.– En las últimas semanas, la controversia rondó a diversas empresas de turismo estudiantil que decidieron cobrar cargos que no estaban acordados en los paquetes de viajes de egresados a Bariloche. En algunos casos, los montos sorpresivos equivalían a lo que las familias ya habían pagado por la totalidad de los paquetes.

A mediados de abril, por ejemplo, los padres de estudiantes de una escuela de La Matanza rechazaron los montos elevados que Travel Rock pretendía cobrar en concepto de tasas e impuestos (tasas de embarque, cobertura integral de equipamiento, entre otros) apenas unos meses antes de programada la salida. Recurrieron a la Defensoría del Pueblo bonaerense y, luego de una audiencia con representantes de la empresa, hubo marcha atrás con los cobros hasta acordar nuevos valores.

“Le exigimos a la empresa que respete el derecho a la información y a la condición de consumidores hípervulnerables de las y los estudiantes”, explicó en ese momento la jefa del área de Consumidores de la Defensoría, Soledad Polito. En tanto, desde Travel Rock indicaron que están abiertos al diálogo y con voluntad de buscar una solución conjunta y lógica para todas las partes.

Situaciones similares se dieron en las últimas semanas en escuelas de La Plata y Escobar, así como con firmas como Baxtter. Con paquetes que habían sido definidos en unos $250.000 para viajes estudiantiles que se harán en 2024, los cargos no acordados que muchas familias denunciaron públicamente superaban los $250.000. En algunos casos, tras las gestiones ante organismos de protección de los consumidores y usuarios, se redujeron a la mitad esos gastos extra.

En diálogo con LA NACION, Gastón Burlón, presidente de la Cámara Argentina de Turismo Estudiantil (CATE), puso en contexto la problemática: “Atravesamos una situación muy compleja, a partir del 300% de inflación imprevisible que tuvo en el último año el país, y con una obligatoriedad impuesta por el Estado hacia las empresas de cobrar en cuotas fijas y en pesos. Uno debiera preguntarse cómo hacen las empresas para llevar a los chicos ocho noches a Bariloche –con aéreos, todas las comidas, discos y actividades– por lo que vale un par de zapatillas”.

Las familias de los chicos que harán este año su viaje de egresados a esta ciudad pagaron o están pagando $250.000, un valor que se fijó hace un año y medio. A raíz de la inflación actual, hay empresas que llegaron a un acuerdo con los padres, para que pongan más dinero, y otras que han decidido cobrar un plus que no estaba incluido en el contrato.

“En promedio, los plus que se están cobrando rondan los $250.000. En algunos casos equivale a lo que costaba el viaje, pero si fuera lineal, deberían ser extras de un 300%, como la inflación. Y los costos, como los pasajes aéreos, aumentaron más de un 300% en un año y medio”, suma Burlón.

Cláusula de reajuste

Asimismo, aclara que la mayoría de los contratos que se firman incluyen una cláusula, para casos como este, por ejemplo, de extrema inflación, que permiten reajustar el valor del viaje. “De todos modos, nadie está hablando de ganancias. El principal objetivo es que los chicos tengan ese viaje tan esperado que cierra etapas y sella amistades”, señala Burlón.

Y agrega: “Desde CATE, venimos trabajando en diversos documentos que hemos presentado en la Secretaría de Turismo de la Nación. Allí detallamos por qué se llegó a esta situación: legalmente las empresas fueron obligadas a vender en cuotas fijas y en pesos. Asimismo, las empresas no son generadoras de precios, son intermediarias. A todos los proveedores les han subido los costos enormemente. Y eso se traslada. El turismo estudiantil no es ajeno a lo que está pasando en el país”.

Según cuenta el presidente de CATE (nuclea a agencias y proveedores que mueven más del 85% del segmento de turismo estudiantil no solo en Bariloche, sino también en Villa Carlos Paz, Brasil y Disney), luego de dos reuniones, no han recibido aún respuestas de la Secretaría de Turismo de la Nación, que dirige Daniel Scioli.

Más allá de los precios de los paquetes –en promedio, los egresados que hagan su viaje en 2025 pagarán $1.400.000– y las cuotas extra definidas por las empresas, lo cierto es que Bariloche se mantiene como destino preferido. Se calcula que en total llegarán unos 100.000 estudiantes de todo el país en 2024.

Ante situaciones particulares, como la reciente definición de tarifas que hizo la concesionaria del centro de esquí local Catedral Alta Patagonia –el precio del pase diario quedó en unos $115.000, lo que representa un aumento de alrededor del 280% respecto del año pasado–, algunas firmas de turismo estudiantil han optado por modificar algunas actividades. En concreto, hay agencias que este invierno cambiarán el cerro Catedral por otros centros invernales de la zona, como el Bayo, en Villa La Angostura.

“Históricamente, el cerro Bayo trabaja solo con dos agencias que mueven turismo estudiantil y no va a modificar eso. Sí es cierto que muchas empresas están contactándonos para ver la posibilidad de traer estudiantes como alternativa al Catedral. Pero nuestra decisión es la de cuidar el perfil del cerro y priorizar al esquiador”, indicaron fuentes del Cerro Bayo, a 100 km de esta ciudad.

En tanto, Burlón informa que existe una “gran mesa de trabajo de proveedores y empresas para poder ajustar al máximo los costos”. Añade que, luego de la pandemia, “todos los años la inflación real fue más alta de la anunciada por el Gobierno, dato en el que se basan los proveedores y las empresas para armar los paquetes”.

En tanto, según trascendió, en el Consejo Federal de Turismo están terminando de delinear la nueva reglamentación del turismo estudiantil. “Desde la Cámara estamos a la espera de ese borrador para poder dar nuestros aportes y que salga cuanto antes. Realmente creemos que la salida está en el esfuerzo compartido”, cierra Burlón.