Versión digital: la matrícula de los profesionales de la salud ya no tendrá vencimiento
La primera medida, el mes pasado, fue pasar a la versión digital “única y obligatoria” a través del portal oficial Mi Argentina. Ahora, una nueva resolución del Ministerio de Salud publicada este miércoles en el Boletín Oficial dispone que la matrícula que habilita el ejercicio profesional deja de tener fecha de vencimiento.
“Esta normativa deroga el plazo de vigencia actual de cinco años para las matrículas otorgadas”, informaron desde esa cartera. “Establece que aquellas credenciales digitales ya emitidas, que se encuentren vencidas antes del dictado de esta medida, pasarán a estar vigentes de manera automática, lo que elimina el trámite de renovación”, acotaron. Ese paso administrativo estaba demorando unos seis meses, según se indicó.
El mes pasado, se había dispuesto que el cambio alcanzara no solo al trámite de la matrícula para profesionales recién recibidos, sino también a las renovaciones y las solicitudes de rehabilitación de esa condición legal para poder ejercer la profesión en la jurisdicción que corresponda.
Establecía, además, la reválida cada cinco años, contados desde “la emisión de la credencial digital” y con vencimiento “el día y mes de la fecha de nacimiento” de cada matriculado. La nueva resolución elimina ese requisito.
“La medida tiene como objetivo simplificar y facilitarle el trabajo a los profesionales de la salud”, acotaron desde Salud.
Con la digitalización, los datos disponibles en la Red Federal de Registros de Profesionales de la Salud (Refeps) se combinan con los del perfil digital del ciudadano en la app oficial. Las solicitudes se inician por sistema online de Trámites a Distancia (TAD).
La norma abarca a médicos, odontólogos, farmacéuticos, bioquímicos y enfermeros, entre otras profesiones con título habilitante de universidad en el país u homologado si es extranjera.
Por la pandemia de Covid-19, en 2020 se había prorrogado “de manera automática y extraordinaria” la vigencia de las credenciales, lo que no volvió a normalizarse durante el gobierno de Alberto Fernández, gestión durante la que se denunció que se habían hackeado servidores.
En una resolución de agosto del año pasado, se argumentó que aquella prórroga extraordinaria había terminado por “generar una gran cantidad de trámites de renovación” porque tenían que incluirse las credenciales con vencimientos previos y posteriores al DNU que estableció el aislamiento obligatorio por la emergencia sanitaria en marzo de hace cuatro años.
En 2022, antes de que el Ministerio de Salud publicara en el Boletín Oficial que instrumentaría la matrícula digital “como credencial profesional complementaria” a la versión impresa, las quejas por las demoras en los trámites debido a múltiples excusas en las oficinas del edificio ubicado sobre la Avenida 9 de Julio ya habían empezado a trascender a los profesionales.
El año pasado fue especialmente caótico para los que necesitaban renovar sus credenciales, pedir duplicados o solicitar la matrícula después de obtener el título profesional: con dos resoluciones ministeriales se fue extendiendo el plazo de vencimiento.