Vengo a proponer solución, dice fabricante de mochilas en audiencia

TOLUCA, Méx., octubre 18 (EL UNIVERSAL).- "Vengo a proponer una solución, no vengo a pedir nada", dijo Josue Franco, proveniente de San Vicente Chicoloapan, quien llegó como parte de la segunda tanda de ciudadanos para ingresar a la audiencia pública encabezada por la gobernadora Delfina Gómez Álvarez. Él es fabricante de mochilas y lo único que quiere es generar empleo, para ello está dispuesto a poner la materia prima y enseñar mediante talleres a los interesados en aprender un nuevo oficio.

De traje café y con ejemplares de sus mochilas, el señor llegó acompañado por una mujer y con toda la esperanza de que obtener lo que busca, que es la prestación de las instalaciones del Icati o Edayo, que son escuelas del gobierno mexiquense donde se imparten oficios a bajo costo para jóvenes y adultos, pero que en su pueblo, dijo, dejó de ser operativo, y solo imparten corte y confección, cultura de belleza o poner uñas acrílicas. "Hay mucho más que podemos hacer, aprender y creo que sí sería una forma de dar herramientas a la gente para que pueda lograr un empleo digno y un oficio qué heredar a sus hijos", dijo.

Dijo que en todo el Estado de México no hay quien se dedique a enseñar a fabricar mochilas, pese a que es un área de oportunidad para emplear a la gente y si bien hay quien aprende a realizar este tipo de trabajos de manera empírica, la realidad es que pueden especializarse a través de talleres y mejorar la calidad de los productos que ofrecen.

"Lo que yo quiero es pedirle que nos permita colaborar con ella y en lugar de que las escuelas de artes y oficios solo sirvan para otros talleres, puedan ser útiles para que nos autoempleemos y podamos hacerles competencia a los extranjeros, porque una mochila que te venden en 300 pesos, nosotros la podemos fabricar de mejor calidad en 60 pesos", comentó.

Agregó que lo que busca es la oportunidad de capacitar gente de manera gratuita y hacer mochilas, que el municipio sea un productor especializado. "Si no nos apoyamos entre nosotros, si no nos interesa, entonces a dónde vamos como comunidad. Me preguntan unas mamás que por qué llevo niños a jugar futbol, pues porque les tengo miedo, porque si no les encanto en un deporte cuando tenga 20 años van a agarrar el mal camino y ese niño de seis años, más adelante será quien me asalte si no los apoyo para hacer algo más", relató.

Por ello, se dijo dispuesto a poner los hilos, el material, la tela y solo busca a cambio el espacio dónde hacerlo, por lo que junto con 20 personas del mismo municipio que trabajan con él, con quienes podría impartir los talleres.