Patricia Bullrich acompañó una protesta de venezolanos contra la visita de Nicolás Maduro a la Argentina

“¡Genocida, fuera de Argentina!”, grita María de los Ángeles Mosquera. La mujer venezolana, de 51 años, participa en cada una de las manifestaciones contra el régimen de Nicolás Maduro desde hace 20 años. Hace seis que vive en Argentina y esa costumbre no la cambió. La acompaña su hija, Rebeca, de 15 años, con quien lidera la movilización frente al hotel Sheraton de Retiro, donde este martes se reunirán 33 presidentes latinoamericanos en el marco de la cumbre regional de la Celac.

Al igual que María de los Ángeles y Rebeca, un centenar de venezolanos, cubanos, argentinos y nicaraguenses protestaron sobre la avenida San Martín, en el centro porteño, para repudiar invitación de Nicolás Maduro, Daniel Ortega y Miguel Díaz Canel al encuentro de jefes de Estado de la región.

“Esto es fatal. No puede ser que a un genocida se lo reciba en un país demócrata. Precisamente los jóvenes fueron las primeras víctimas de este régimen. Todas las protestas pacíficas que hacíamos terminaban con balas”, señaló otro de los emigrados venezolanos, que con 80 años a cuestas se vistió con su gorro tricolor, se puso su escarapela y flameó la bandera de Venezuela.

Cerca de las 16 comenzaron a llegar referentes, políticos, exresidentes y activistas -en su mayoría venezolanos- con el fin de repudiar la llegada de los mandatarios, a quienes acusaron de “dictadores y genocidas”. El exdiputado nacional venezolano Richard Blanco, quien debió exiliarse tras sufrir persecuciones desde 2009, también fue parte de la movilización.

Patricia Bullrich acompañó la protesta e insistió en detener a Maduro

La presidenta del Pro, Patricia Bullrich, acompañó la protesta. “Vengo por los venezolanos que están en Argentina y otras partes del mundo, ya que debieron huir de una dictadura y no queremos que la Argentina reciba dictadores . Hemos planteado todas las opciones legales como para que Maduro sea detenido por la universalidad de los Derechos Humanos y también por las causas que tiene por narcotráfico”, expresó en diálogo con LA NACION.

“Vengo a acompañar a la comunidad venezolana que está muy herida porque el país que los ha refugiado reciba a Maduro. Es importante que la gente sepa hasta donde llega esta dictadura: a sacarle las bancas a los que piensan distinto, no dan elecciones o son amañadas”, agregó la referente de Juntos por el Cambio.

Luego de una corta caminata junto al exlegislador venezolano y los emigrados que le agradecían, Bullrich tomó un megáfono y dedicó unas palabras a los manifestantes. “Estoy absolutamente convencida que los pedidos que hemos hecho contra Nicolás Maduro, que a nivel judicial fue a pedir a los tribunales que haya una detención, una indagatoria para que el caso que ya está en la Corte Penal Internacional tenga todos los testimonios y esa causa avance”, dijo.

Finalmente, la exministra de Seguridad le exigió a la Justicia que “se haga realidad el hecho de que los dictadores no puedan pisar suelos democráticos” y recordó las causas vigentes que también enfrentan Daniel Ortega y Miguel DíazCanel.

Tras leer un comunicado que expresaba el rechazo de la comunidad venezolana a su presidente y recordar que Maduro tiene pedido de captura internacional -la DEA ofrece 15 millones de dólares de recompensa-, Blanco advirtió: “Le decimos a estos 33 representantes [de la Celac] que Maduro viene a tratar de desestabilizar la democracia en los países. Es un asesino y un delincuente”.

Tras una suerte de rueda de prensa, de la cual también participó la defensora de los derechos humanos venezolanos en Argentina, Elisa Trotta, los manifestantes invadieron la avenida para mostrar sus carteles a los automovilistas que pasaban por allí. “Fuera, maduro”, “Maduro. Asesino de estudiantes y niños” y “Ladrón, fuera de mi país”, eran algunas de las frases que se podían leer.

Alberto Fernández defendió la llegada de Nicolás Maduro a la Argentina

Pese a las denuncias en su contra por violaciones a los derechos humanos y las protestas de la oposición, el presidente Alberto Fernández defendió la llegada al país de su par venezolano. “Está más que invitado”, dijo el mandatario argentino en una entrevista con Folha de Sao Pablo, en la que defendió su gestión, habló de los “tiempos convulsionados” que vive la región y anticipó que “las verdaderas consecuencias negativas de la guerra en Ucrania se comenzarán a ver ahora”.

“Venezuela es parte de la Celac y Maduro está más que invitado”, respondió Fernández ante la pregunta por la llegada del líder del régimen bolivariano al país, para participar de la cumbre regional. “La posición de la Argentina en relación a Venezuela es que, por medio del Grupo de Contacto, estimular los diálogos que se realizan en México. Creemos que eso puede dar buenos resultados. La idea es que venezolanos decidan las cosas entre venezolanos, no con nosotros”, agregó el Presidente.