Uno lo ve afuera y él se cree que es Max Scherzer. Lanzador de los Marlins suma su primera victoria

Después de la vorágine de cambios que transformó el rostro de los Marlins, Peter Bendix dejó entrever que los peloteros aún dentro del equipo de Grandes Ligas estarían en una especie de audición que tendría algún valor rumbo a la primavera y la próxima temporada.

Valente Bellozo ha tomado nota y está tratando de impresionar al máximo a quienes toman decisiones en Miami para que al menos lo tengan en cuenta en el futuro, como bien lo hizo en el triunfo 6-4 de los peces sobre los Rojos de Cincinnati delante de 8,657 aficionados en el loanDepot park.

“Lo importante es lanzar aquí y ahora, y no pensar tanto en el futuro’’, expresó Bellozo, quien aseguró la primera victoria en su carreras de Grandes Ligas. “Lo importante es tener la confianza para salir y hacer el trabajo, confiar también en que el equipo hará el resto y ayudará a la victoria’’.

En su ayuda llegaron los bates de Derek Hill, quien pegó un grand slam en la primera entrada, y Jake Burger, autor de dos bambinazos solitarios en ese mismo episodio y luego en el tercero, mejorando mucho luego de una primera mitad de escasa producción.

El mexicano no solo contuvo a una ofensiva que había masacrado a su club en los dos juegos previos de manera colectiva, sino que se apuntó la difícil tarea de contener a un Elly de la Cruz desbordado por completo al punto de haber conectado tres jonrones, cuatro dobles, dos imparables con cinco remolcadas en esos dos encuentros previos.

Cuando el manager Skip Schumaker saco a Bellozo del montículo luego de 5.2 capítulos de actuación, el azteca aceptó con cierta molestia, pues su meta era llegar por primera vez a seis tramos en Grandes Ligas, pero en el dugout le esperaban con abrazos y saludos.

“No tiene mucha velocidad, pero su arsenal es muy bueno’’, indicó el piloto.

“Sus pitcheos secundarios son buenos. La meta de un lanzador es hacer fallar a los bateadores y los está haciendo fallar en buen porcentaje. Uno lo ve afuera y él se cree que es Max Scherzer. Eso es algo muy bueno para un lanzador joven, que sale a atacar’’.

Solo cinco imparables permitió Bellozo, quien regaló dos boletos y ponchó a cuatro hombres ante una alineación que pisó la goma 10 veces el lunes y ocho el martes, aupados por un De la Cruz que se encuentra a solo dos bases robadas de integrar el club 20/60.

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Apasionado en cada lanzamiento, Bellozo vive un momento destacado, pues en su apertura previa en Atlanta laboró cinco entradas con dos carreras en su cuenta y dos hits, de modo que no será pasado por alto cuando se reincorporen Sandy Alcántara y Eury Pérez.

Con Bellozo fuera del montículo, TJ Friedl sacó una bola del parque en la séptima ante los envíos de Andrew Nardi con los ángulos congestionados para recortar la diferencia a solo dos rayitas, pero afortunadamente los visitantes no pudieron hacer más y el mexicano se marchó con la sonrisa y la victoria.