Vanito Brown, un poco paria y profundamente cubano

Quien los ve en el dúo Arrímate, piensa que Vanito Brown y Niuver nacieron para cantar juntos. Es mucha la química que tienen los artistas cubanos, cuyos caminos y trayectoria artística parecen tan diferentes.

Los comienzos de Vanito fueron en el rock, mientras que Niuver tocaba el laúd desde muy joven. Cuando les tocó salir de Cuba, Vanito se fue a España e integró Habana Abierta, uno de los grupos más influyentes de la música cubana. Niuver se fue a Francia, a un pueblo en la frontera con Alemana, y allí se dio cuenta de que el laúd, la trova y el filín no era lo que el mundo esperaba cuando escuchaba hablar de música cubana.

En el 2015, cuando Vanito estaba lanzando su primer disco en solitario, Norte Sur Este y Aquel, en Miami, donde vive hace ochos años, Niuver estaba haciendo una gira con Ricardo Arjona por 29 países.

Pero en el 2011 ya París los había unido para luego grabar Arrímate, compuesto por Vanito y producido por Yadam González, quien también produjo Patria y Vida.

Arrímate es el primer tema del nuevo disco de Vanito, que irá lanzando en el transcurso de dos años.

Este sábado 15 de octubre Vanito estará en concierto en The Creative Yard, un espacio mágico de Miami en el que comparten artistas de diferentes disciplinas. La invitada es Niuver.

Vanito contestó estas preguntas sobre su infancia en Cuba, su carrera profesional, sus intereses y su vida como padre de dos hijos, de 26 y 4 años.

¿Qué va a pasar en The Creative Yard?

Es el primer concierto que daré después del lanzamiento de Arrímate, la vamos a tocar en vivo con Niuver y la banda por primera vez desde su publicación hace unos días. Además de eso mucha música repleta de sabor y energía como siempre que nos juntamos a tocar en Miami.

De niño cantaste en Caritas, y los que son de esa generación saben el peso que tiene ese programa de la televisión cubana en la memoria. ¿Qué más no sabemos de tu infancia y adolescencia?

Que lo primero que quise ser fue payaso o algo así. La primera y única vez que fui a un circo vi un montón de gente partirse de la risa a la vez, felicísima, y yo el que más. O que un día me atropelló un taxi, o que me salvé, de milagro, de dos neumonías y un dengue hemorrágico. Pero todo eso es menos interesante y menos feliz que la música que me trae y me lleva desde los tiempos de Caritas.

Si Serrat proclama ‘Nací en el Mediterráneo’, ¿cómo diría tu letra?

Esa es una de mis favoritas, y todo Serrat. La mía diría “y qué le voy a hacer si yo/ nací en Palma Soriano”, y ojalá me quede aunque sea la mitad de buena y bonita que Mediterráneo de Serrat.

Creciste en Cuba, viviste en España y ahora Miami es tu casa, ¿cómo han influido los tres en ti como artista?

Cada uno de esos lugares me ha puesto a prueba y eso termina curtiéndote. La vida, y por supuesto la música, es lo que más amo hacer y es lo que me ha trasladado hasta arraigar en más de dos países. Tanto movimiento me ha dotado de sentido de la perspectiva, me llevo dentro lo que ofrece y me sirve de cada lugar, me constituyen casi por igual.

Un buen piropo que he recibido sobre mi música es que “es atemporal” y yo añadiría que un poco paria también, pero profundamente cubana, que ha sido otro de los piropos que he recibido.

En ‘Arrímate’, le dices a la chica, Apúntame a matar’. A los 55 años, ¿cómo ves el amor?

“Bésame a matar … y apunta al corazón”. A mi edad dejo más que las cosas que no puedo controlar vayan a su bola. El amor tiene vida propia y es frágil y poderoso en la misma medida.

Creo ahora mismo que el amor es un todo en el que levitan en diversos primeros planos, los hijos, la familia, los amigos, los colegas, el trabajo, la música, la vida y todo lo que te hace sentir vivo. La armonía no necesariamente concordante pero sublime de todo eso.

Tienes una química especial con Niuver, ¿cómo surge esta colaboración y quién escogió a quién? ¿Está París en los planes?

En España yo había escuchado alguna canción suya. Poco después estando en París fui a verla cantar y me gusto aún más. Nos presentaron, conectamos, me invitó y terminamos descargándonos a guitarras rodeados de amigos allí mismo, creo recordar que hasta el cierre del local ya después de su actuación.

Deseé poder hacer algo como Arrímate con ella alguna vez y el destino nos puso en Miami con Yadam González, que nos propone colaborar.

Niuver, Yadam y yo tenemos en común Cuba, la música, ser emigrantes compositores, soñadores, padres y lo bailado después de media vida en Europa.

Haber sido parte de Habana Abierta, ¿pesa en tu carrera o es algo que atesoras?

Atesoro la suerte y el orgullo de haber sido parte de Habana Abierta. Es muy reconfortante e inspirador saber que a miles de personas le tocaste el alma alguna vez con algo que sacaste de lo mejor y más hondo de ti. Por supuesto, pesa y muy a favor de mi carrera.

Si tuvieras el poder para traer a la vida a un músico cubano que ya no esté, ¿con quién te gustaría hacer un dúo?

Más bien haría un coro con unos cuantos, y estarían desde Bola de Nieve hasta mi amigo Manolo Camejo, que nos dejó el año pasado.

¿Cómo eres cuando te pones el sombrero de padre?

Mis hijos son mis comandantes en jefes. Yo a sus órdenes y a la altura como puedo mientras aprendo de ellos.

Vanito Brown en concierto, sábado 15 de octubre en The Creative Yard, 2182 NW 26 Ave, Miami, las puertas abren a las 9 p.m.