¿Cómo utilizan los aguascalentenses el 911?

En Aguascalientes, se estima que 6 de cada 10 llamadas que se registran en el número de emergencias resultan ser falsas, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). La misma fuente detalla que los incidentes más reportados a través de esta línea son los relacionados con la violencia familiar y con la presencia de personas extrañas en las colonias.

Según el Censo Nacional de Seguridad Pública Estatal, durante el 2022, Aguascalientes sumó 930,612 llamadas de emergencia en la línea 911, de las cuales, 594,733 resultaron improcedentes, debido a que eran falsas o porque no se brindó más información sobre la emergencia.

También se recibieron 20,721 llamadas en el Sistema 089, que sirve para hacer denuncias anónimas. Sin embargo, 19,649 de estas llamadas resultaron ser falsas o improcedentes por lo que solo 999 llamados pudieron ser atendidos por las corporaciones de seguridad.

Principales emergencias

El Censo Nacional de Seguridad Pública Estatal muestra que, de las llamadas procedentes en el 911 de Aguascalientes, casi 46 mil estuvieron relacionadas con el reporte de actos relacionados con la vida y la integridad personal, posicionándose como la emergencia principal en este sistema.

También se sumaron 40,935 llamadas por disturbios y alteración del orden público; 32 mil llamadas por solicitudes clínicas; 31,976 incidentes relacionados con la familia; 25,937 por actos relacionados con las vías de comunicación o vialidad, y 24,089 llamadas por incidentes contra el patrimonio.

Si se detalla la información por cada delito o escenario denunciado, se especifica que más de 41 mil llamadas se relacionaron con la presencia de personas sospechosas o agresivas en las colonias, mientras que 17,726 señalaron presuntos hechos de violencia familiar, y 13,220 más, con hechos de violencia de pareja.

También destacan los reportes por el consumo de alcohol o drogas en la vía pública, las fugas y derrames de sustancias químicas, incendios, robos domiciliarios, la alteración del orden público y el ruido excesivo.