Una clínica de EEUU ofrece por primera vez transplantes de útero para mujeres con problemas de fertilidad

Mientras los transplantes de cabeza generan titulares estrambóticos y miles de noticias en Internet, hay otros tipos de operación que nunca se habían dado hasta ahora y que se están empezando a realizar que, de verdad, van a cambiar la vida de millones de personas. Uno de ellos es el transplante de útero, una intervención que va a hacer que muchas mujeres que no han podido tener hijos cumplan su sueño.

El hospital Cleveland Clinic, situado en la ciudad del mismo nombre, en Estados Unidos, ha anunciado que desde este pasado martes, en sus instalaciones se va a levar a cabo un tratamiento que solo ha sido probado en fase experimental en Suecia, con muy positivos resultados.



El centro solicita voluntarias que se sometan a la operación, en la que su útero va a ser extirpado y sustituido por el de una donante. Aquellas pacientes que hayan nacido sin útero o que lo hayan perdido por algún tipo de enfermedad también podrán apuntarse al programa.

Los órganos transplantados pertenecen a mujeres fallecidas en su edad reproductiva, y serán temporales: cuando las receptoras se hayan quedado embarazadas y hayan tenido a su tan deseado hijo, los úteros deberán ser extirpados. Según informa The New York Times, solo en algunos casos se permitirá a las pacientes tener otro hijo, y dependiendo del estado general del órgano.

Hasta la fecha, se han producido 9 nacimientos utilizando esta técnica en Suecia”, explica un portavoz de la Cleveland Clinic en el periódico estadounidense. Sin embargo, los intentos llevados a cabo en Arabia Saudi y Turquía han fracasado, por un mismo problema: el cuerpo de las mujeres rechazaba el útero una vez estaban embarazadas. Por eso, esta técnica ha sido calificada por los obstetras del centro de Cleveland como “Muy experimental”.

La Cleveland Clinic asegura contar con un grupo de mujeres de entre 21 y 39 años dispuestas a seguir el tratamiento, que incluye la extracción de óvulos, su fecundación in vitro, la operación de transplante de útero, y la posterior colocación de los óvulos fecundados en el nuevo órgano. Tras pasar em embarazo, las mujeres deberán tener un parto por cesárea.

Los responsables del centro en el que se llevarán a cabo los transplantes aseguran que al menos hasta dentro de un año no podrán evaluar los resultados de las intervenciones.