En la UBA: acortarán los tiempos de cursado de dos carreras económicas clave
A partir del año próximo, los estudiantes de las licenciaturas en economía y en administración de la Universidad de Buenos Aires (UBA), contarían con nuevos planes de estudios que permitirían reducir los tiempos de cursada en hasta un año y recibir una mejor preparación para la inserción laboral.
“Los nuevos planes contemplarán una flexibilización de las cursadas, que le abre la posibilidad a los alumnos de recibirse en menor tiempo y se implementarán nuevas orientaciones para que el estudiante pueda insertarse de una forma más rápida y sencilla en el mercado laboral”, dijo Ricardo Pahlen, profesor emérito y decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA.
En el caso de la licenciatura en Economía, cuyo tiempo promedio de cursada actual es de cinco años y medio, pasaría a cuatro años y medio. Sebastián Katz, director de la carrera, explicó que esto será posible porque se trasladaron contenidos esenciales a las materias del Ciclo Básico Común (CBC) y, al mismo tiempo, se unificaron materias que hoy tienen menor carga horaria.
Con respecto a los contenidos, desde la UBA dijeron que los cambios curriculares pondrán el foco en conocimientos específicos desde el primer año de estudio, generando una carrera mucho más “personalizada” según el perfil de graduado al que aspire cada estudiante.
A su vez, habrá una simplificación del esquema de materias correlativas y nuevas asignaturas optativas basadas en el manejo de grandes volúmenes de datos, inteligencia artificial (IA), machine learning —aprendizaje automático, una rama de la IA—, y contratos inteligentes, entre otras. Para esto, se incorporarán herramientas de informática y softwares para el tratamiento de datos como Python, R y Stata. La reforma también incluye un rediseño del tronco contable con mayor énfasis en la lectura de balances y la interpretación de información contable, además de una menor carga de registración contable.
Por su parte, la nueva licenciatura en administración también reducirá su tiempo de cursada en aproximadamente un año. Pasará de un promedio de entre cinco y cinco años y medios a uno de entre cuatro y cuatro y medio.
Además, contará con nuevas materias que, según explicaron desde la carrera, responden a las necesidades de la sociedad y el mercado y atienden las recomendaciones de diversos organismos internacionales como la Organización Naciones Unidas (ONU), la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), entre otras.
“Se trata de propuesta superadora de la carrera anterior en términos de su excelencia académica y sus criterios de empleabilidad de los y las futuros administradores”, dijo Fernando Moroni, director del departamento económico de Administración.
En este caso, la cursada se llevará adelante a través de tres ciclos: general, profesional y profesional orientado. En este último, la novedad estará en una mayor oferta de orientaciones (empresas y emprendedores, gestión pública y sectores estratégicos y desarrollo sostenible) y competencias transversales (digitales y de gestión).
El dilema de las tesis
Desde hace un tiempo, la elaboración de tesis como requisito de graduación es un punto de discusión en distintos ambientes del nivel universitario. Y esta reforma ataca directamente a este punto.
A partir de la entrada en vigor del nuevo plan, en la licenciatura en economía, la tesis será obligatoria solo para los estudiantes que escojan la orientación en Análisis e Investigación Económica. En las otras dos disponibles, Empresarial y Gobierno y Políticas Públicas, los alumnos deberán elaborar trabajos supervisados en materias específicas en las orientaciones. “Antes todos los economistas tenían que hacer una tesis obligatoria, pero nos parece que eso es más apropiado para aquellos que tienen un perfil más académico y de investigación. En las otras orientaciones, cuando hagan materias específicas se les va a demandar más horas de práctica asociada a sus perfiles específicos”, dijo Katz.
En lo que respecta a Administración, la actualización contempla que, hacia el final de la carrera, los estudiantes puedan elegir entre realizar un plan de negocios, más profesional, o una tesis de grado, más académica.
“Una reforma muy importante”
El avance en la actualización de ambos planes de estudio se votó de forma positiva en la sesión del Consejo Directivo de la facultad llevada a cabo ayer. Si bien aún resta la aprobación final en el Consejo Superior de la universidad, desde las carreras se mostraron “optimistas” respecto de la aprobación final.
“Somos optimistas porque la reforma goza de un amplio consenso entre docentes, estudiantes y todos aquellos que conocen de cerca la realidad de la carrera”, dijo Katz.
Y agregó: “La última reforma integral del plan fue hecha en 1997. Es decir, es una demanda pendiente desde hace mucho tiempo y surge de las grandes transformaciones que ha habido en este tiempo en el mundo académico, la práctica profesional y el mercado de trabajo. Creemos que es una reforma muy importante porque, al introducir orientaciones, actualizar contenidos mínimos, crear nuevas materias e incrementar las materias específicas, permite acomodar mucho mejor la oferta a los diferentes perfiles de economistas egresados de la UBA”.
Por su parte, Moroni también destacó la importancia de la reforma —que se aprobaría durante noviembre— ya que implica cambios estructurales. “Era imposible mantener un plan de estudios que hacía tiempo no se actualizaba porque hacía impensable la formación de profesionales acordes con la sociedad y el mercado actual. Por lo tanto logramos ecualizar necesidades, demandas e intereses en un trabajo de gran alcance y profundidad, del que participaron activamente los claustros de estudiantes, graduados y profesores”.
Al igual que el plan de Economía, la última reforma estructural del plan de Administración —más allá de una actualización realizada en 2015— sucedió en 1997.