¿Puede haber un tsunami en Mar del Plata? Los expertos dan la respuesta

Las posibilidades de que ocurra este desastre natural sobre las cosas marplatenses fueron analizadas por científicos del Conicet

En los últimos días se dio a conocer un informe de geólogos del Conicet que aseguraban que se podría producir un tsunami en Tierra del Fuego y Santa Cruz. Ante esta perspectiva, surgió entre los científicos marplatenses la pregunta acerca de si es posible que en Mar del Plata pueda producirse este mismo fenómeno sísmico.

En Mar del Plata las olas son siempre de mayor tamaño a las que bañan las costas de la ciudades balnearias que la rodean, como Villa Gesell o Necochea. Este hecho la convierte en la ciudad preferida de los surfistas. El tamaño mayor de sus olas se debe a que la plataforma continental es más angosta, con menos fricción y cada ola mantiene mayor energía. Pero, ¿esto puede ocasionar que las playas de la feliz padezcan en el futuro el catastrófico efecto de un tsunami?

El Centro Científico Tecnológico de Mar del Plata publicó un informe en la página de Conicet Mar del Plata en el que explica las posibilidades ciertas o no de que la perla del Atlántico pueda sufrir un tsunami.

El informe explica que en Argentina, las provincias de San Juan, Mendoza y Tierra del Fuego son las zonas más propensas a sufrir terremotos, por su cercanía a fallas tectónicas. En los últimos días se conoció una "alerta sobre posibilidad de tsunamis" en la provincia fueguina, cruzada por la falla de Magallanes. Esta información surge de un trabajo realizado por Jorge Rabassa, investigador superior del Centro Austral de Investigaciones Científicas (Cadic-Conicet).

¿Podría sufrir un tsunami la ciudad de Mar del Plata?

En el Centro Científico Tecnológico marplatense explicaron que cuando dos placas tectónicas se encuentran se genera una fricción entre ellas. Si la fricción se libera bruscamente se producen ondas sísmicas a través de la corteza terrestre, lo que genera terremotos. Y los terremotos que suceden en zonas costeras pueden ocasionar maremotos o tsunamis.

Pero en el caso de Mar del Plata, aparentemente habría que quedarse tranquilos. Federico Isla, investigador superior del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras del Conicet y la Universidad Nacional de Mar del Plata dice que la probabilidad de que exista un tsunami en las cosas marplatenses es "baja y no se podría predecir". En el caso de que sucediera, la magnitud sería mucho menor a los tsunamis que ocurrieron en la costa del Pacífico sudamericano.

Isla agregó que en las costas bonaerenses suceden otros fenómenos "que generan mayor preocupación que los tsunamis, como las sudestadas". Este es un fenómeno meteorológico de mucho mayor frecuencia, causa daño más usualmente y sí existen elementos que permiten anticipar su llegada, como medidas para disminuir sus efectos.

Una ola gigante

El informe del Conicet agrega que existen registros en Mar del Plata de la existencia de una ola gigante que conmocionó a los bañistas un 21 de enero de 1954. En pocos minutos el agua subió un nivel de más de un metro, a causa de tres olas consecutivas que cubrieron por completo el Muelle de Pescadores y barrieron con todos los veraneantes que se bañaban o asoleaban en la playa.

En 1954 una ola gigante cubrió todo el Muelle de Pescadores y barrió con todos los bañistas

Once personas debieron recibir asistencia por asfixia y hubo más de un centenar atendidos por diversas contusiones. Afortunadamente, la ola gigante no dejó víctimas fatales y pronto la situación volvió a la normalidad.

Según Isla, lo que pudo ocurrir en aquella particular ocasión de hace más de 60 años fue que las olas pudieron haber sido provocadas por erupciones volcánicas submarinas o por el deslizamiento al fondo de grandes masas de tierra, que podría haber ocurrido en la Isla Bouvet, en el Atlántico Sur.

Según fotografías aéreas esta área cambió de forma por actividad volcánica, en una fecha cercana a este oleaje inusual. El fenómeno coincidió con el único ataque de un tiburón de envergadura en la playa de Miramar, a 45 kilómetros de Mar del Plata.

Existen diversas hipótesis para explicar el fenómeno sucedido hace más de 60 años. Según el investigador marplatense, las olas pudieron haber sido provocadas por erupciones volcánicas submarinas o por el deslizamiento al fondo de grandes masas de Tierra, que podría haber ocurrido en la isla Bouvet, en el Atlántico Sur.

Según fotografías aéreas esta área cambió de forma por actividad volcánica, en una fecha cercana a este oleaje inusual. Ese fenómeno coincidió con el único ataque de un tiburón de envergadura en la playa de Miramar, a 43 kilómetros de Mar del Plata.

Según otros investigadores el fenómeno se debió a cambios en la presión atmosférica, que generaron una actividad marina inusual.

Ambas explicaciones lo convierten en un evento aislado y con poca probabilidad de repetirse, y lejos de fallas tectónicas. Mar del Plata parece a salvo de estos eventos, al menos con la frecuencia que ocurren en otros océanos.