Los trazos de Alex Carrillo alzan el vuelo en las redes

La historia de este ilustrador mexicano, originario de Saltillo, da cuenta de cómo las plataformas digitales han logrado allanar el camino de los jóvenes creadores.

ALEX CARRILLO tiene 22 años. Aún no termina la carrera, pero ya tiene un best seller en Amazon. ¿Cómo lo hizo? Buscó alternativas de autopublicación para editar su primer libro de dibujos para colorear y logró uno de sus principales objetivos como joven ilustrador: darse a conocer.

Si Alex hubiera seguido el camino tradicional de las editoriales, su propuesta aún estaría en lista de espera para revisión. No solo porque ese es el camino convencional, sino porque también se atravesó el confinamiento social que obligó al cierre de oficinas y al trabajo remoto de muchas empresas, incluidas las editoriales.

Antes de que estuvieran disponibles en México, Carrillo ya seguía el funcionamiento de plataformas de autopublicación como CreateSpace, que operaba en Estados Unidos. También hay otras como IngramSpark, que están dirigidas a autores y editores independientes que buscan publicar libros impresos o electrónicos, garantizando la distribución de la obra. Incluso Barnes & Nobles ya cuenta con un servicio similar.

Así que cuando Amazon adquirió Kindle y CreateSpace se transformó en Kindle Direct Publishing, Alex ya estaba familiarizado con esta opción para difundir su libro. El proceso de registro le tomó menos de dos horas. Se guio por un video de YouTube y, vía chat, consultó los tipos de papel que podía utilizar. Esperó tres días para que su propuesta fuera aprobada y, previo a un proceso de corrección de estilo, donde le indicaron si existía algún error o “typo” que debiera modificar, su libro Faces. A coloring book ya estaba en estantes virtuales de Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, Francia, España, Italia, Holanda, Japón, Brasil, Australia, India, Alemania y México.

También lee: Música y cine: mujeres en las industrias creativas

“En mi caso fue un proyecto de cuarentena. No tenía un presupuesto. Así que Amazon me dio la oportunidad de estar en diferentes países, sin tener que pagar un peso. Sabía de personas que les costó mucho dinero la autopublicación. Cuando, en mi caso, lo más pesado fueron las desveladas para trabajar en sacar la propuesta”, comenta en entrevista con Newsweek México.

Faces… se imprime bajo demanda. Esto significa que no existe un almacén de libros apilados en espera de que el comprador llame. Una vez que se realiza la compra en línea, se manda la orden a la imprenta más cercana al domicilio de envío. De octubre a la fecha, Alex ha logrado colocar centenas de libros.

Las regalías, sin embargo, no se asignan directamente al autor. Kindle propone un precio mínimo de venta y ese monto se reparte en 80 por ciento para la editorial y 20 por ciento para el creador. Faces… se puede comprar por 13 dólares (270 pesos mexicanos) a través de Amazon México. En Estados Unidos, país donde se realiza la impresión, el costo es menor (7 dólares).

A un año y medio de terminar su carrera, Alex tiene como meta dirigir un cortometraje animado. Es un ilustrador apasionado por el arte que aún estudia Animación Digital en el Instituto Tecnológico de Monterrey Campus Monterrey, pero ya lleva varios logros profesionales, como haber recibido una invitación de Scribe México para diseñar una portada de libretas con motivo del Día de San Valentín.

Una de sus ilustraciones se exhibe de manera virtual en el Museo Familiar de Walt Disney, en San Francisco. Foto: Especial

KOBE BRYANT, UNA INSPIRACIÓN

Uno de los dibujos que catapultó sus redes sociales, donde comparte muchas de sus ilustraciones, fue uno de Kobe Bryant, el exbasquetbolista estadounidense y leyenda de Los Ángeles Lakers que murió, en un accidente aéreo, en enero de 2020. Alex ilustró al deportista y combinó algunos elementos de la marca de ropa Drew de Justin Biaber.

“Lo hice porque Kobe Bryant fue una gran inspiración para mí con su cortometraje animado Querido basquetbol, que fue su carta de despedida para el basquetbol y que creo que fue una de mis motivaciones para seguir estudiando animación. Cuando Kobe Bryant murió quise brindarle un tributo”, cuenta.

El dibujo llegó a más de 800 personas en Instagram, y logró que su cuenta en Twitter alcanzara los 41,000 seguidores. Captó la atención de personalidades como Justin Bieber, quien era amigo del basquetbolista, por lo que ahora Alex puede presumir de que ese cantante canadiense de música pop lo sigue en redes sociales.

Alex subraya que, durante la pandemia, las redes sociales y las nuevas plataformas se han convertido en herramientas de difusión del trabajo de jóvenes creadores. Incluso TikTok se ha convertido en un espacio para que los bailarines muestren su trabajo, dice.

Vía redes sociales, a Alex lo contactó la escritora estadounidense Lakia T. Hickman para que él realizara las ilustraciones del cuento ABCs of Self-Confidence: To Help Promote Positive Self-Esteem, un cuento infantil enfocado en niños afroamericanos. Estas oportunidades le han permitido confirmar que “sí se puede vivir del arte” cuando se trabaja de manera disciplinada.

No te pierdas: Hay que romper con el tabú de las lesiones vocales: Javier Camarena

“Veíamos ilustraciones en las cuevas. La ilustración comenzó en las rocas, migró al papel y evolucionó al formato digital. Ahora incluso ya podemos hablar de ilustración en realidad virtual. Es una disciplina que ha dado pie a otras como la escultura, la arquitectura, la animación. El arte es una manera de resolver un problema. En el baile lo hacemos por medio de ritmos y movimientos. En la ilustración lo hacemos con líneas y trazos para plasmar una idea gráficamente”, dice.

Actualmente, una de sus ilustraciones se exhibe de manera virtual en el Museo Familiar de Walt Disney, en San Francisco. Cuando esa institución debió cerrar sus puertas por el confinamiento social lanzó una convocatoria para que niños y jóvenes artistas, así como creadores consolidados, participaran en su convocatoria “It’s a Small World” para celebrar los 55 años de esa canción. Alex envió un dibujo representando 55 culturas y la obra fue elegida para participar en la muestra virtual www.waltdisney.org/virtual-experiences.

“Llegar a Disney a una corta edad es muy importante, porque quizá puedes pensar que no es posible si es que tienes que seguir el estereotipo de que primero tienes que graduarte o piensas que los logros solo se pueden limitar a México o a Saltillo, que es la ciudad en donde vivo. Así que llegar a un museo que tiene impacto en todo el mundo es muestra de que sí se puede lograr algo cuando se trabaja duro”, cuenta Alex.

Ese impulso por salirse de los estereotipos se refleja en Faces…, el libro donde buscaba ilustrar la diversidad y la multiculturalidad. Con sus trazos presenta distintas maneras de ser, pensar, vestir, sin cuestionamientos. N