Manifestación en Boston contra discurso del odio evita el caos de Charlottesville
Por Scott Malone y Nate Raymond BOSTON (Reuters) - Decenas de miles de personas salieron a las calles de Boston el sábado para protestar contra una manifestación por "la libertad de expresión" en que participaron oradores de extrema derecha, una semana después de que una mujer murió en una marcha de supremacistas blancos en Virginia. Los organizadores de la manifestación invitaron a varios oradores de extrema derecha, que quedaron confinados a un pequeño espacio habilitado por la policía en el histórico parque Boston Common para mantener separados a ambos grupos. La ciudad evitó escenas como los enfrentamientos callejeros del fin de semana pasado en Charlottesville, Virginia, donde murió una mujer. La policía estimó que hasta 40.000 personas salieron a la calle alrededor del parque más antiguo del país. Las autoridades estuvieron una semana planificando la seguridad para el evento, para el que movilizaron a 500 policías, incluyendo a muchos en bicicletas, y pusieron barricadas y grandes cambiones blancos de basura en calles a lo largo del parque para evitar ataques con automóviles como los registrados en Charlottesville y Europa. La manifestación de los de ultraderecha nunca superó más de unas pocas docenas de personas y no se pudo oír lo que decían los oradores debido a los gritos de los contramanifestantes y al fuerte cordón de seguridad entre ambos grupos. El mitin se terminó cerca de una hora antes de lo previsto. Manifestantes contra el discurso del odio rodearon a personas que habían asistido al mitin de los derechistas, gritando "vergüenza" y "váyanse a casa", y lanzándoles ocasionalmente botellas de plástico. La policía escoltó a varios participantes entre las multitudes, a veces forcejeando con manifestantes que intentaban detenerlos. Veintisiete personas fueron arrestadas, mayormente por enfrentamientos en que algunos manifestantes arrojaron piedras y botellas con orina contra policías vestidos en tenida antimotines, dijo a periodistas el comisionado de la policía William Evans. (Reporte adicional de Gina Cherelus en Nueva York y Lisa Maria Garcia en Dallas. Editado en español por Janisse Huambachano/Patricio Abusleme)