SAN CARLOS DE BARILOCHE.- Tras permanecer una semana internada en terapia intensiva, murió hoy la turista japonesa de 57 años que sufrió un accidente cerebrovascular mientras practicaba esquí en el cerro Catedral.

El jueves de la semana pasada, la mujer tuvo que ser rescatada tras desvanecerse en la montaña. Integraba un grupo que había subido al Catedral a practicar esquí de travesía, aunque ese día ese centro deportivo estaba cerrado por malas condiciones climáticas: había fuertes vientos y falta de visibilidad.

La turista, oriunda de Japón, integraba un grupo de nueve personas que llegaron a esta ciudad para practicar esquí de travesía. El grupo estaba acompañado por dos guías de montaña profesionales de Japón, uno de ellos de la Unión Internacional de Asociaciones de Guías de Montaña (Uiagm), la máxima categoría internacional. En Bariloche, contrataron los servicios de dos guías de alta montaña locales, Jeremías Varela y Agustín Karriere, también de la Uiagm.

Hace una semana, durante la subida, la mujer cayó desmayada en una pista superior de la montaña. Debió ser rescatada, intubada y trasladada a un centro médico para su asistencia. Permaneció internada en estado grave hasta hoy, cuando sufrió un paro cardíaco irreversible.

Controversia

El incidente en el cerro Catedral había generado polémica, ya que ese día el centro de esquí se encontraba cerrado al público. Desde Catedral Alta Patagonia (Capsa), empresa concesionaria del centro invernal, habían advertido: “Este grupo ascendió de manera independiente, pese a que el sector superior de la montaña estaba cerrado desde el mediodía, por condiciones adversas. Había mucho viento y muy poca visibilidad”.

Agregaron que el equipo de patrulla debió subir en condiciones de alto riesgo: “Tuvieron que ascender para dar socorro, movilizando los medios de elevación y las máquinas pisapistas, con todo lo que eso implica. Con todos los riesgos que había”.

En tanto, tras conocerse el hecho, desde la Asociación Argentina de Guías de Montaña (AAGM) difundieron la versión de los guías que acompañaban a la esquiadora japonesa. “El jueves 26 de septiembre teníamos previsto realizar la travesía hacia el refugio Emilio Frey, por la zona alta de la montaña, pero debido a las adversas condiciones meteorológicas, esto fue descartado. No compramos los pases de esquí, pues la montaña no estaba operativa en su totalidad”, contaron Varela y Karriere.

Como todos tenían “experiencia en montaña y equipos de esquí de travesía”, acordaron realizar una excursión hacia el refugio Lynch, “para no perder el día”. Los guías locales agregaron: “Ingresamos al área concesionada por el sector sur, donde están los molinetes de salida, pidiendo para ello permiso al personal que estaba en el lugar, informando que solo haríamos una excursión recreativa por el día. Lo mismo se informó a un patrullero a quien cruzamos en el camino”.

Como había “muy poca cantidad de público esquiador”, el grupo ascendió por las pistas de esquí hasta el refugio Lynch, adonde llegaron alrededor de las 13. Allí hicieron una parada de hidratación, merendaron y luego emprendieron el descenso. “Comenzamos a esquiar y, luego de unos 50 metros de bajada por la pista Lynch, la señora le dice al guía japonés Koji que le duele mucho la cabeza. De pronto se desvanece, siendo asistida. Respira, tiene pulso, pero no responde. Teniendo en cuenta que había comenzado a nevar, se la desciende hasta la confitería de Punta Nevada. También se llama a la patrulla de Capsa”, indicaron los guías Varela y Karriere.

Cuando la patrulla llegó al lugar donde se encontraba el grupo, se decidió evacuar a la turista por medio del Cable Carril, para llevarla al centro médico en la base del cerro. La mujer fue atendida y trasladada en ambulancia al Sanatorio San Carlos, donde se comprobó que sufrió un accidente cerebrovascular.

Durante la semana en que estuvo internada en la unidad de terapia intensiva, la turista fue visitada por su hermano, que viajó desde Japón y pudo acompañarla en sus últimos días.