“Tráiganlos a casa ya”. Harán un monumento para exigir la liberación de los secuestrados por Hamas
“Tráiganlos a casa ya” será el pedido central que resonará en la Plazoleta Sholem Aleijem, ubicada en la intersección de las calles Lavalle, Gascón y la avenida Córdoba, en el barrio porteño de Almagro. Este monumento, impulsado por la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) y el Club Náutico Hacoaj, rinde homenaje a las 21 víctimas argentinas asesinadas durante el ataque terrorista de Hamas el 7 de octubre de 2023 en Israel, y exige la liberación de los cinco argentinos que aún permanecen en cautiverio.
Este proyecto recibió la aprobación inicial en la Legislatura el 11 de julio y, en la reciente audiencia pública, vecinos, autoridades y legisladores manifestaron su apoyo a la iniciativa. La legisladora Pilar Ramírez, impulsora del proyecto y presidenta del bloque de La Libertad Avanza, lo calificó como “un grito de justicia en medio de la pasividad de gran parte de la clase política argentina”, en declaraciones a LA NACION. Ramírez enfatizó que su partido condena el terrorismo de manera firme y categórica, siguiendo la línea del presidente Javier Milei, y afirmó que “no hay justificación ni neutralidad posible ante la violencia y la barbarie que representan grupos como Hamas”.
El ataque del 7 de octubre de 2023 dejó una marca imborrable en la Argentina, afectando profundamente a la comunidad judía y al país en general. Vecinos de Almagro mostraron su apoyo al proyecto, destacando la importancia de este espacio en el barrio. Federico González, residente del barrio, expresó a LA NACION: “Este monumento nos recuerda que no podemos olvidar a los que aún no han regresado. Es nuestra responsabilidad como sociedad seguir exigiendo justicia”. Por su parte, Marta Stein, vecina cercana a la plazoleta, comentó: “Es un homenaje necesario. Las víctimas y sus familias merecen un lugar donde podamos recordar y exigir que los secuestrados vuelvan a casa”.
El monumento será financiado y mantenido por la DAIA y el Club Náutico Hacoaj, en coordinación con las autoridades del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Pilar Ramírez también señaló que este proyecto tiene una importancia particular para Buenos Aires, una ciudad que es hogar de una gran parte de la comunidad judía. “Este monumento refuerza nuestro compromiso con los valores de libertad y justicia que aspiramos a defender en nuestra ciudad”, afirmó Ramírez a LA NACION. Enfatizó que, en un entorno de seguridad y respeto, este tipo de iniciativas son fundamentales para mantener viva la memoria y los principios que sostienen la convivencia pacífica en Buenos Aires.
Durante la audiencia pública, celebrada en la Legislatura porteña, varios vecinos manifestaron sus deseos de que el monumento se convierta en un espacio de reflexión y encuentro. Carlos Varela, otro residente de la zona, afirmó a este medio: “Este lugar será un recordatorio constante de la lucha por la libertad y los derechos humanos”.
El ataque dejó 21 argentinos entre las víctimas mortales y a 7 personas que aún permanecen secuestradas. Desde entonces, la comunidad judía y las familias afectadas han movilizado a gran parte de la sociedad para visibilizar la situación de los secuestrados. En este contexto, la DAIA ha encabezado diversas campañas de concientización, con el objetivo de generar apoyo internacional para la liberación de las personas que siguen en cautiverio.
El monumento “Tráiganlos a casa ya”, inspirado en las placas conmemorativas que los familiares de los secuestrados utilizaron para recaudar fondos y crear conciencia sobre su situación, será un símbolo de solidaridad internacional y un recordatorio para las víctimas del terrorismo. La ubicación elegida, la Plazoleta Sholem Aleijem, a pocos metros de la calle Palestina, refuerza el simbolismo del monumento y su vínculo con la comunidad judía y la memoria histórica.
Ramírez señaló también que se están planificando medidas para asegurar que el monumento mantenga su relevancia a largo plazo, con la organización de eventos conmemorativos anuales y actividades educativas. “Queremos que este lugar se mantenga vivo, no solo como un espacio físico, sino como un punto central de memoria y lucha por la justicia de las víctimas del terrorismo”, explicó la legisladora a LA NACION. Estas actividades estarán orientadas a concientizar a las futuras generaciones sobre la importancia de este símbolo y el legado que representa. “Nuestra postura es firme: condenamos el terrorismo en todas sus formas, y con este monumento reafirmamos nuestro compromiso con la libertad y la justicia”, concluyó Ramírez.
La próxima etapa del proyecto será su sanción final en la Legislatura porteña, tras lo cual comenzará el proceso de instalación del monumento. La obra, financiada y mantenida por la DAIA y el Club Náutico Hacoaj, asegurará que el mensaje de justicia y libertad perdure a lo largo del tiempo.
El impacto de este monumento se espera que no solo se limite a la comunidad judía, sino que también se amplíe al compromiso de la sociedad argentina con los valores de la libertad, la justicia y el respeto por la vida humana. “Este monumento debe ser un recordatorio constante de que los argentinos no vamos a ser indiferentes ante el terror”, afirmó Ramírez a LA NACION. “Trabajaremos incansablemente para que la frase “Tráiganlos a casa ya” deje de ser un reclamo y se convierta en una realidad”.