Tijuana, la cuna de la aviación en México

Tijuana, la cuna de la aviación en México
Tijuana, la cuna de la aviación en México

En el marco de los eventos del World Design Capital San Diego / Tijuana 2024 que se está llevando acabo en estos momentos entre estas dos ciudades vecinas, el Colegio de la Frontera Norte, por medio de la Dra. Araceli Almaraz, inscribió un par de eventos muy significativos para la ciudad.

El primero de ellos es la inauguración de la Exposición sobre la Historia de la Aviación en Tijuana, la cual se exhibe en los pasillos centrales del Aeropuerto Internacional de Tijuana, cuyo nombre oficial es “Gral. Abelardo L. Rodríguez”, en forma de reconocimiento por el gran impulso que le dio a la industria de la aviación nacional. Esta exposición es muy importante ya que le recalca a todos los pasajeros, que Tijuana es la cuna de la aviación en México.

Dicha exposición consta de información y fotografías en las que se aprecia que el primer lugar donde se construyeron los primeros aviones en todo México fue precisamente en nuestra ciudad, esto fue gracias a la visión del General Abelardo L. Rodríguez, quien estableció una fábrica de aviones, donde se construyeron tres modelos: Baja California I, en 1927 y el Baja California II y Baja California III en 1928. La empresa “Compañía Aérea de Construcción y Transporte, S.A.” inició con tres socios, el Gral. Abelardo L. Rodríguez, en ese entonces Gobernador del Distrito Norte de la Baja California, el Capitán Piloto Aviador Luis Farell y el Ingeniero José Flavio Rivera.

El taller de fabricación se instaló en un galerón ubicado en la avenida Madero, esquina con la Avenida México, que es la continuación de la Calle Primera, por el rumbo de lo que hoy es la Zona Norte. La fabricación de esos tres aviones nos dio honores y reconocimiento nacional y extranjero. En ese entonces a Tijuana se le conocía como Zaragoza, nombre que llevo la ciudad por un corto tiempo.

Seguramente se instaló en Tijuana porque en San Diego, California, operaba la fábrica de aviones Ryan, por tanto se tenía acceso a los motores, materiales, herramientas y a los ingenieros que construyeron el “Spirit of St. Louis”, famosa aeronave que realizó el primer vuelo sin escalas de New York a París, el 20 de mayo de 1927, lo que fue toda una hazaña para la época. Dicho monoplano fue tripulado por el piloto Charles Lindbergh, por lo que en su honor, el Aeropuerto Internacional de San Diego, California, lleva su nombre. De hecho, una réplica del avión está suspendida en el área de llegadas de los pasajeros.

Un motor similar al del mencionado aeroplano se le colocó al Baja California II, por lo que el teniente coronel Roberto Fierro, jefe de la Fuerza Aérea Mexicana, precisamente el 30 de mayo de 1928 realizó un vuelo ininterrumpido desde Mexicali, en dirección al campo de aviación de los llanos de Balbuena, en el entonces Distrito Federal. El vuelo más largo realizado en la historia de nuestro país por un aeroplano construido en México, con capital y manos mexicanas.

Este primer vuelo contó con el apoyo total del General Abelardo L. Rodríguez, quien tenía un interés particular en presenciar su llegada a la Laguna Salada, procedente de Tijuana, pero sobre todo el despegue, por lo que se instalaron tiendas de campaña del ejército y se ofreció una cena en el sitio, el piloto Roberto Fierro fue recibido con una pequeña orquesta.

La aeronave partió de la capital de Baja California a las 2:06 a.m., contando con la participación de los mexicalenses que en esa época poseían vehículos, ya que con sus luces ayudaron a simular la pista de despegue. El vuelo sin escalas duró 14 horas con 55 minutos, aterrizando en el Distrito Federal a las 4:50 p.m., donde fue recibido con trompetas y percusiones de tambores, y por una multitud eufórica por el hecho que acababan de presenciar.

El recibimiento del P.A. Roberto Fierro Villalobos lo encabezo el mismo presidente de México, Plutarco Elías Calles, el secretario de Guerra y Marina, Gral. Joaquín Amaro, el director de Aeronáutica Militar, Ing. Juan Guillermo Villasana y otros funcionarios.

Se puede decir que para Tijuana la aviación no era ajena, ya que el Complejo Turístico Agua Caliente con su famoso casino contó con una pista de aterrizaje para que las luminarias de Hollywood, entre otras personalidades, llegaran a nuestra ciudad. Esa pista estaba donde hoy es el Blvd. Gustavo Salinas, de ahí que la vialidad sea una larga recta y que la colonia lleve por nombre Aviación, además de que las calles tengan el nombre de reconocidos pilotos mexicanos.

Me extendí un poco con el tema de la aviación, porque lo considero muy importante, pero regresando al primer párrafo de este artículo, les comento que el segundo evento que se inauguró en el aeropuerto de nuestra ciudad fue el señalamiento alusivo a la carretera federal México 1, toda vez que se ha convertido en un icono más de Tijuana y punto obligado para que se tomen la foto los visitantes a nuestra ciudad, que por cierto, este 11 de julio cumple 135 años.

Autor del libro “Welcome to Tijuana”.
www.welcometotijuana.info

VIDEO: Develación Réplica Mx1 Aeropuerto

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