De un teatro portátil a la terraza de Luis Barragán, en Mextrópoli

CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 23 (EL UNIVERSAL).- Este viernes se inauguró la 10 edición de Mextrópoli, un festival de arquitectura que no sólo es para arquitectos, pues invita al público a reflexionar la forma en la que se habita la ciudad.

Distintos puntos de la Ciudad de México —como el Palacio de Bellas Artes, el Colegio de San Ildefonso y el Museo de la Ciudad de México— son el escenario del festival que ofrece conferencias con arquitectos con trayectorias destacables (entre ellos, los ganadores del Premio Pritzker Kazuyo Sejima, Wang Shu y Lu Wenyu), exposiciones, cine y rutas para apreciar la arquitectura de la ciudad.

Las 11 instalaciones arquitectónicas que convierten a la Alameda Central en un museo interactivo al aire libre son uno de los atractivos principales del festival. Entre estas se encuentra Teatro dimensión, un teatro portátil —con su escenario, butacas, telón y amplificador de sonido— que se adapta a cualquier espacio público; fue diseñado por estudiantes del Instituto Superior de Arquitectura y Diseño (ISAD), de Chihuaha.

También destaca Fuera de Lugar, de los arquitectos Álvaro Martín Morales Reyes, Manuel Alejandro Alemán Rocha y Rubén Aldair Bermúdez Martínez. Se trata del pabellón ganador del Concurso Arquine No.25 | Pabellón MEXTRÓPOLI 2023 que recrea la terraza de la Casa Luis Barragán en la Plaza Manuel Tolsá, frente al Munal.

De Venecia a la CDMX

Este sábado a las 12 horas, en Radio Nopal (C. José Rosas Moreno 123, San Rafael), se llevará a cabo una mesa de diálogo sobre la participación de México en la Bienal de Arquitectura de Venecia.

En ella participarán los arquitectos de la oficina APRDELESP, Guillermo González y Rodrigo Escandón, autores del pabellón que este 2023 representa a México en la Bienal de Arquitectura en Venecia.

El pabellón que diseñaron —en colaboración de un equipo entre los que se encuentra la museógrafa Mariana Botey, el sociólogo Sergio Galaz y el investigador Antonio Turok— se titula Infraestructura utópica: La cancha de basquetbol campesina. El proyecto es el resultado de una investigación de cómo los habitantes de comunidades indígenas se han apropiado de las canchas de basquetbol, un invento estadounidense, que se ubican en las escuelas rurales.

"El tema de la bienal eran los laboratorios del futuro y la descolonización. Entonces planteábamos estas canchas de basquetbol campesinas como un laboratorio y espacio clave para entender los procesos y lugares donde sucede la descolonización. Nos interesan los usos no prescritos que han tenido las canchas, como un espacio de asambleas donde ejercen la democracia, pero también hacen carnavales y que es algo que filmó Turok en un documental, o la recreación del juego de pelota en estas canchas", explica Escandón.

Aunque el pabellón está en Venecia, cuenta con una sede en México, ubicada en Radio Nopal. Ahí se estableció la estación de radio El Colibrí del lado izquierdo y el Cineclub Bizalú, donde se transmiten programas y se proyectan películas sobre la investigación que acompaña el proyecto.