Sueño con ser la próxima estrella de los pesos pesados. Cubano se hace llamar Fear, pero quiere sembrar el terror

El peso completo está dando sus mejores momentos en Arabia Saudí, pero eso no significa que en otros lugares del mundo estén surgiendo las estrellas del mañana.

Orlando es uno de esos sitios. Dainier “Fear’’ Peró puede ser uno de los que en un futuro remueva las dunas del desierto.

El invicto cubano (6-0, 4 KO) se prepara para hacerse sentir cuando regrese al cuadrilátero este viernes para enfrentar al mexicano José Mario Tamez (4-3, 1 KO) en un combate programado a seis rounds y que será transmitido en vivo por DAZN desde el Hotel Caribe Royale.

“Sueño con convertirme en la próxima estrella de los pesos pesados y cada combate me acerca un poco más a ese objetivo’’, declaró Peró.

“Estoy concentrado, hambriento y listo para demostrar mis habilidades en el ring. Este es mi momento, me mantengo ocupado y no dejaré que nada se interponga en mi camino’’.

Ganador del título en el Mundial Juvenil en el 2016, la Copa Teófilo Stevenson 2018 y el campeonato nacional de Cuba en el 2018 y el 2019, Peró era uno de los mejores amateurs de su generación al punto de representar a su país en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Al igual que su hermano mayor Lenier, Peró escaló hasta lo más alto del pugilismo antillano y en la cita estival de la capital japonesa -a pesar de contar con solo 23 años- cayó en la batalla por la medalla de bronce por decisión dividida contra el estadounidense Richard Tórrez Jr., uno de los más prominentes prospectos de Top Rank.

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Originario de Camagüey, Cuba, Peró ahora vive en Las Vegas donde entrena con el profesor Bob Santos, quien fue premiado como Entrenador del Año 2023 de la revista The Ring y no escatima elogios para su pupilo, que forma parte de la promotora BoxLab de Amaury Piedra.

“En mis más de 30 años en el boxeo profesional Dainier Peró es uno de los púgiles con más talento que he conocido’’, apuntó recientemente Santos.

“Va a ser un factor importante en la división de peso pesado en los próximos años y estoy deseando que llegue el momento de ayudarle a llegar a la cima’’.

Con apenas 24 años, Peró aún tiene un tiempo más que suficiente para madurar y unirse a su propio hermano y otras figuras como Frank Sánchez y Luis Ortiz en la búsqueda de una faja mundial, que todavía le sigue quedando pendiente al boxeo cubano.

Por el momento, Peró está decidido a consolidar su estatus como la próxima sensación del peso pesado y su objetivo principal es mantenerse ocupado y ascender en la clasificación de los pesos pesados, para lo cual ha estado trabajando a marchas forzadas.

“He tenido un gran campo de entrenamiento antes de este combate. Me he exigido al máximo, rodeado de un equipo que cree en mí y me empuja a ser el mejor. Confío en mis habilidades y estoy ansioso por ofrecer un espectáculo a los aficionados’’.