Dicen que soy el mejor pitcher de los Marlins, pero no es así. Solo quiero ayudar y ganar, afirma novato de Miami

Cuando Trevor Rogers parecía a punto de regresar, Eury Pérez era el principal candidato para retornar a las Menores. Después de una actuación como la del martes en la noche, esa idea no tiene ningún sentido, porque el novato dominicano reforzó un hecho innegable: es el mejor lanzador de los Marlins.

Los peces cayeron por blanqueada de 2-0 ante los Azulejos delante de 9,809 aficionados y vieron rota una cadena de siete victorias en el loanDepot park, pero el lanzador dominicano no tuvo nada que ver en la derrota, sino que acrecentó la medida de su talento al imponer una marca personal con nueve ponches sin permitir boletos.

“Esta fue la mejor salida de su carrera’‘, expresó el manager Skip Schumacher. “La forma en que utilizó todos sus lanzamientos, cómo trabajó en ciertas situaciones, cómo se mostró ante una alineación muy profunda. El hecho de que solo tiene 20 años es algo realmente impresionante’‘.

Quién lo que pase en el futuro, pero hasta el momento Pérez ha cumplido la promesa que existía de él cuando se le mencionaba en el sistema de granja de los peces y todos hablaban de “ese chico espigado que luce más un jugador de la NBA que un prospecto de Grandes Ligas’‘.

Ahora va quedando más claro que nunca el enorme talento del quisqueyano, quien contuvo a los Azulejos -con una potente alineación de arriba a abajo- en apenas tres hits sin anotaciones durante seis entradas y mejoró su promedio de carreras limpias a un excelente 1.54.

Pérez, que venía de lanzar seis entradas inmaculadas en Seattle, repitió la dosis de secuencias indescifrables para unos canadienses que acumularon 19 entradas consecutivas sin pisar la goma en un período que comenzó en su último juego en Texas, continuó con una blanqueada el lunes en el inicio de la serie en Miami y finalizó cuando facturaron par de rayitas en la octava de este encuentro.

Mucho se podría hablar de lo que ha significado Pérez para los Marlins en un inicio de contienda sin Johnny Cueto ni Rogers, y con un Sandy Alcántara que todavía no encuentra su mejor versión, pero baste decir que ha mantenido a seis de sus ocho equipos enfrentados en dos o menos carreras y no ha cedido más de tres carreras en ninguna de sus salidas.

“Eso dicen por ahí [que es el mejor pitcher de Miami en el 2023], pero yo no lo siento así’‘, apuntó el dominicano. “Mi meta es salir a ser uno más en el equipo, ayudar a ganar en lo posible, pero no siento que soy mejor que ninguno de los que me rodea’‘.

Como si fuera poco, Pérez es el cuarto lanzador más joven (20 años, 60 días) en registrar una efectividad inferior a 2,00 en sus primeras ocho salidas desde que el promedio de carreras limpias (ERA) se aceptó como una estadística oficial de las Grandes Ligas en 1913.

Solo cuando partió Pérez fue que la ofensiva de los Azulejos pudo despertar del letargo con sencillos remolcadores de George Springer y Ernie Clement en la octava ante los envíos de Tanner Scott, quien apenas pudo sacar dos outs, pero fuera de eso el bullpen también realizó una digna faena.

Además de resaltar la labor de Pérez, lo mismo podría decirse de Yusei Kikuchy, quien en seis episodios de labor solo admitió dos imparables y fijó el tono del juego para que los relevistas de Toronto mantuvieran los ceros de manera implacable.