Sobrevivió al 9/11 y 17 años después ha muerto en un cruento atentado terrorista en Nairobi

La vida del estadounidense Jason Spindler estuvo marcada por rudas dicotomías. Sobrevivió a la violencia más extrema y se dedicó luego a impulsar proyectos de apoyo a los desfavorecidos. Y años después, durante su trabajo de ayuda al desarrollo murió abatido en otro momento de cruenta devastación.

Spindler sobrevivió al peor atentado terrorista en la historia de Estados Unidos, el del 11 de septiembre de 2001, pero falleció el pasado 15 de enero en el ataque sufrido en el hotel Dusit de Nairobi, Kenia, en donde cuatro sujetos irrumpieron armados hasta los dientes y desataron muerte y dolor. En total, 14 personas fueron allí asesinadas.

La familia de Spindler ha confirmado que Jason fue una de esas 14 víctimas, abatidas en un atentado reivindicado por el grupo terrorista Al-Shabaab, que años atrás expresó su lealtad a Al Qaeda, organización terrorista responsable de los ataques del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.

Chris Schroeder, quien mantuvo amistad con Schindler, lo recuerda como “uno de esos raros hombres que fue querido por prácticamente todos a los que tocó en Kenia y alrededor del mundo… escogió una vida de esperanza e inclusión. Doy gracias por haberlo conocido y aprendido de él”, según reportó la televisora CBS.

En 2001, Spindler –fallecido a los 41 años de edad– fue egresado de la Universidad de Texas en Austin y trabajaba como analista en la oficina de la firma Salomon Brothers en el Edificio 7 del World Trade Center de Nueva York. Cuando el 11 de septiembre de 2001 dos aviones se estrellaron contra las Torres Gemelas, el colindante Edificio 7 también quedó devastado. Spindler logró ese día escapar con vida y en cierto modo esa experiencia terrible lo marcó.

Según narra el periódico Daily Mail, tras sobrevivir al 9/11 Spindler se unió al Cuerpo de Paz de Estados Unidos, una entidad formada por voluntarios coordinada por el gobierno que se dedica a proveer asistencia socioeconómica y técnica en países y poblaciones en desarrollo. En 2005 viajó a Perú como voluntario en esa organización, en 2006 se graduó en derecho en la Universidad de Nueva York y en 2007 fundó su compañía.

Antes de su muerte, era el presidente de la empresa I-DEV International, con sede justamente en Nairobi y se dedicada a impulsar el desarrollo de pequeños negocios en mercados emergentes. Su trabajo recibió apoyo financiero de entidades como la Bill and Melinda Gates Foundation y la Clinton Foundation, informó el portal The Daily Beast.

Spindler se encontraba el pasado martes en el café del hotel Dusit de Nairobi, al parecer tomando un almuerzo (el Daily Mail indica que ese día era su cumpleaños), cuando los terroristas irrumpieron en el lugar, mataron a 14 personas e hirieron a unas 30 antes de ser abatidos por las fuerzas de seguridad. Cientos de personas debieron ser evacuadas del lugar y, se afirma, aún habría decenas de desaparecidos.

Aunque los detalles del atentado terrorista y de la muerte de Splinder no han sido revelados, su hermano Jonathan Spindler, indicó el Daily Mail, confirmó la muerte de su familiar. “Jason fue un sobreviviente del 11 de septiembre. Estoy seguro de que él los mandó al infierno [en alusión a la reacción que él habría tenido al enfrentar a los terroristas]”, comentó Jonathan Splinder.

El Departamento de Estado confirmó el deceso y expresó su pesar a la familia. La muerte de Spindler y de las otras víctimas del atentado en Nairobi fue el resultado de una violencia repudiable.

“Él estaba tratando de crear un cambio positivo en los mercados emergentes del tercer mundo”, contó a NBC Sarah Spindler, madre de Jason. “Es tan triste que un joven tan brillante haya sido abatido por el terrorismo”, añadió ella.

Sigue a Jesús Del Toro en Twitter: @JesusDelToro