El sismo en Turquía es “el peor desastre natural en un siglo” en Europa, dice la OMS

Residentes locales queman libros para mantener el calor entre los escombros en Hatay, Turquía
Residentes locales queman libros para mantener el calor entre los escombros en Hatay, Turquía - Créditos: @BULENT KILIC

ANTIOQUIA, Turquía.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó este martes que el terremoto de la semana pasada en el sur de Turquía y la vecina Siria fue el “peor desastre natural” en 100 años en Europa, con un balance provisorio de muertos que supera los 35.000.

“Somos testigos del peor desastre natural en la región Europa de la OMS en un siglo y aún estamos midiendo su amplitud”, dijo Hans Kluge, director de la organización para la región (que abarca a 53 países, entre ellos Turquía y países de Asia Central), en una conferencia de prensa.

“Su verdadero costo aún no se conoce, y recuperarse y curarse llevará mucho tiempo y esfuerzo”, señaló, y dijo que el balance de 31.974 muertos en Turquía y 3688 en Siria “probablemente aumentará aún más”.

Residentes de Hatay, Turquía, cargan un cuerpo entre los escombros
Residentes de Hatay, Turquía, cargan un cuerpo entre los escombros - Créditos: @BULENT KILIC

Más de una semana después del sismo de magnitud 7,8, las esperanzas de encontrar personas con vida bajo los escombros se desvanecen, por lo que la atención se centra ahora en proporcionar alimentos y refugio a los damnificados. Según la OMS, cerca de 26 millones de personas necesitan asistencia humanitaria.

Las autoridades informaron sin embargo de otros nueve rescates, entre ellos un hombre de 65 años y una niña rescatados entre los escombros de un edificio en la ciudad de Antioquia, en el sur de Turquía, 208 horas después del sismo. Los equipos de emergencia esperaban sacar con vida a otros miembros de la familia.

A los rescates les sigue la dura realidad de sobrevivir en ciudades convertidas en ruinas en plena helada invernal. En Kahramanmaras, enormes multitudes dependían de un único retrete aún en funcionamiento en una mezquita. “Camino cinco kilómetros todos los días para venir aquí”, señaló Erdal Lale, de 44 años.

En la devastada ciudad de Antakya, los equipos de limpieza seguían retirando los escombros e instalando aseos básicos. La red telefónica empezaba a volver a funcionar en algunas partes de la ciudad. “Envíen todo lo que puedan porque aquí hay millones de personas y todas necesitan alimentarse”, suplicó esta semana el ministro del Interior, Suleyman Soylu.

Pacientes afectados por el sismo son atendidos a bordo del barco de guerra turco Bayraktar
Pacientes afectados por el sismo son atendidos a bordo del barco de guerra turco Bayraktar - Créditos: @Francisco Seco

La catástrofe también tiene consecuencias psicológicas entre la población. Serkan Tatoglu logró salvar a sus cuatro hijos del violento sismo que destruyó su casa en el sureste de Turquía. La familia está ahora segura, pero su hija de seis años no para de preguntarle: “Papá, ¿vamos a morir?”, contó el hombre de 41 años.

El costo económico de la catástrofe podría ascender a más de 84.000 millones de dólares, solo en Turquía, de los que más de 70.000 millones corresponderían a vivienda, estimó la federación de empresas Turkonfed.

Zonas rebeldes

Por otro lado, un nuevo convoy de ayuda entró en las zonas rebeldes del norte de Siria, ocho días después del terremoto, pero activistas y equipos de emergencia en la zona critican la lenta respuesta de la ONU en esas áreas, en contraste con los aviones cargados que llegan a los aeropuertos controlados por el gobierno.

Según el ministerio de Transporte sirio, hasta ahora aterrizaron en Siria 62 aviones con ayuda y se esperan más en los próximos días, sobre todo de Arabia Saudita. Este martes un avión saudita con ayuda para las víctimas del terremoto aterrizó en Aleppo, en el norte del país y bajo control del gobierno.

Un hombre es rescatado entre los escombros en Hatay, tras permanecer 210 horas semi sepultado en las ruinas
Un hombre es rescatado entre los escombros en Hatay, tras permanecer 210 horas semi sepultado en las ruinas - Créditos: @BULENT KILIC

El nuevo convoy, compuesto por 11 camiones a cargo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), es el primero desde 2020 en entrar en las zonas rebeldes del norte a través del paso fronterizo de Bab al-Salama con Turquía. La ONU había enviado camiones a través de otro cruce, Bab al-Hawa. Desde esta semana puede utilizar el de Bab al-Salama y un tercer paso, en al-Raee, por un período inicial de tres meses.

La ONU admitió deficiencias en su respuesta inicial al terremoto en la región noroccidental, fuertemente afectada, donde unos cuatro millones de personas ya precisaban ayuda antes del temblor y ahora las necesidades aumentaron significativamente.

La preocupación crece en ambos lados de la frontera por los damnificados, sobre todo por los niños, entre los cuales más de siete millones habrían sido afectados, dijo el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), que expresó su temor de que hayan muerto “muchos miles” más.

Trabajadores de un negocio de diseño interior recuperan ítems que no fueron afectados por el sismo, en Antakya, Turquía
Trabajadores de un negocio de diseño interior recuperan ítems que no fueron afectados por el sismo, en Antakya, Turquía - Créditos: @Bernat Armangue

“Está claro que los números seguirán creciendo”, dijo James Elder, vocero de Unicef. “Familias con niños están durmiendo en las calles, centros comerciales, escuelas, mezquitas, estaciones de ómnibus y bajo los puentes, y permanecen con sus hijos a la intemperie por miedo a volver a casa y no poder evaluar el daño estructural y el impacto potencial de las réplicas sobre sus hogares”, agregó.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, hizo un llamamiento a donaciones de casi 400 millones de dólares para hacer frente durante “tres meses” a las “necesidades inmensas” de las poblaciones afectadas en Siria. “Todos sabemos que la ayuda que salva vidas no entra en la velocidad y escala necesarias”, afirmó.

Agencias AFP, Reuters y DPA