Sharunas Bartas se asoma con "dolor" a la historia reciente de Lituania

San Sebastián (España), 22 sep (EFE).- El cineasta lituano Sharunas Bartas, habitual de los festivales europeos, ha dividido a la crítica en el Festival de San Sebastián (España) con "In the dusk", una historia de pérdida de la inocencia, traición y violencia durante la ocupación soviética de Lituania en 1948.

Unté, un chico de 19 años que ha perdido sus padres biológicos y crece en casa de su padrastro, está en la edad de hacerse muchas preguntas. Su ardor juvenil le lleva a unirse al movimiento partisano que resiste en los bosques.

Bartas rinde homenaje a ese ejército lituano independiente que se formó cuando el presidente del país escapó a Occidente al término de la Segunda Guerra Mundial. "Es la historia de mi país, me siento muy conectado a ella, nací casi cuando mataron al último partisano y mis abuelos me contaron muchos relatos sobre ellos", ha explicado en rueda de prensa el director de "Frost" o "Peace to us in our dreams".

"Quizá lo sentía demasiado próximo como para haberlo abordado antes, supongo que me daba miedo, es algo muy doloroso para mí", ha añadido el cineasta, que hasta ahora se había centrado principalmente en historias más contemporáneas.

Pero el homenaje de Bartas está lejos de retratar héroes. "No creo que el falso patriotismo ayude a comprender la Historia, había una guerra, Lituania había sido ocupada sucesivamente por alemanes y rusos, sufrían torturas, no había comida", describe para explicar esa ausencia de heroísmo.

Con todo, la película ofrece un testimonio de la brutal represión soviética sobrevenida al finalizar la contienda mundial. Miles de personas fueron enviadas a Siberia, asesinadas, torturadas y encarceladas.

El número total de detenidos se acerca a los 300.000; 156.000 fueron apresados y unos 40.000 fueron deportados a Siberia, mientras que alrededor de 23.000 reclusos fueron fusilados en campos soviéticos y 28.000 prisioneros fueron asesinados en el exilio, según las notas de producción del filme.

Al mismo tiempo que erradicaba la resistencia, el ejército soviético confiscó sus propiedades para nacionalizarlas.

El relato combina la trama histórica con la íntima de sus principales protagonistas y gana fuerza cuando se centra en éstos últimos: la relación entre el padrastro y el hijo, y del primero con su mujer.

Aunque Bartas nació en 1964, en la rueda de prensa ha explicado que el ambiente prácticamente no cambió durante varias décadas hasta que el país alcanzó su independencia en 1990 y ha mencionado que un familiar cercano suyo fue asesinado en los mismos bosques que retrata la película a los 17 años.

Sólo un 30% de los actores del filme son profesionales, según ha dicho la directora de cásting Alina Lukosevic y destaca también la fotografía de Eitvydas Doskus, con muchas opciones de triunfar en el palmarés.

(c) Agencia EFE