Septiembre, mes del cáncer hematológico
CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 9 (EL UNIVERSAL).- Septiembre ha sido designado como el Mes de la Concientización sobre el Cáncer de la Sangre, una campaña global que busca aumentar el conocimiento y fomentar la educación acerca de esta enfermedad.
El cáncer de la sangre, que incluye leucemias, linfomas y mielomas, afecta a miles de personas cada año. La importancia de un diagnóstico temprano es crucial para mejorar las tasas de supervivencia, por lo que es esencial que la población esté bien informada sobre los síntomas, opciones de tratamiento y recursos disponibles para pacientes y familiares.
A menudo, los signos de advertencia del cáncer de la sangre son desconocidos o se confunden con enfermedades menos graves, lo que puede retrasar tanto el diagnóstico como el tratamiento. Por esta razón, la educación y la información juegan un papel clave en la lucha contra esta enfermedad.
En una reciente entrevista con EL UNIVERSAL, el médico hematólogo Sergio Tena destacó la relevancia de identificar los síntomas de manera temprana para obtener un diagnóstico oportuno y mejorar los resultados en los pacientes.
Explicó que, aunque existen más de cuarenta tipos de cáncer de la sangre, se pueden agrupar principalmente en tres categorías: leucemia, mieloma y linfoma.
Entre los síntomas comunes a estos tipos de cáncer se encuentran alteraciones en las células de la médula ósea. La deficiencia de células rojas puede provocar síntomas como fatiga, palpitaciones y palidez. La falta de plaquetas puede llevar a sangrados espontáneos, como hemorragias en encías o moretones sin causa aparente. Otros síntomas generales incluyen fiebre sin causa infecciosa aparente y pérdida de peso no intencionada.
La detección temprana tiene un impacto significativo en la supervivencia de los pacientes con cáncer de sangre. Al igual que otros tipos de cáncer, algunos de estos se clasifican en diferentes estadios; por lo que diagnosticar el linfoma y el mieloma en etapas tempranas permite utilizar tratamientos potencialmente curativos.
"Hay algunos tipos de cáncer de la sangre que sí los catalogamos por diferentes estadios; así como otros tipos de cáncer, como el de mama, pulmón, cutáneo, etcétera, donde decimos etapa 1, etapa 2, etapa 3, que mientras más temprano se diagnostique, por ejemplo, el linfoma y el mieloma, es el tratamiento que vamos a utilizar".
Aunado a ello subrayó que, en el caso del linfoma y el mieloma, la identificación temprana permite aplicar tratamientos más efectivos y curativos. En contraste, los diagnósticos tardíos suelen centrarse en la reducción de síntomas o en la prolongación de la vida sin buscar una cura completa.
Para la leucemia, que no se clasifica en etapas como otros cánceres, un diagnóstico oportuno permite una mejor tolerancia a tratamientos como la quimioterapia.
Respecto a los factores genéticos, el doctor explicó que, aunque existe una relación entre antecedentes familiares y el riesgo de cáncer hematológico, no hay genes específicos que transmitan directamente el riesgo de desarrollar estos tipos de cáncer.
La presencia de ciertos genes, como el BCR-ABL para un tipo de leucemia, puede predisponer a la enfermedad, pero generalmente se requiere una combinación de mutaciones genéticas y otros factores, como el tabaquismo o tratamientos previos, para que se desarrolle el cáncer.
"No podemos decir que es 100% relacionado genéticamente, porque se tienen que acumular diferentes cosas. No hay como una sola causa, sino tiene que ser la mutación genética más. A lo mejor que es un paciente fumador, entonces tuvo daño en el ADN (...) sí es importante poner atención especial a los pacientes que tienen familiares directos con una enfermedad así, sin embargo, no por el hecho de que haya tenido un padre, un abuelo con leucemia, lo vaya a desarrollar la persona".
En cuanto a opciones de tratamiento y avances recientes, el Dr. Tena mencionó que desde 2017 se han aprobado más de veinte nuevos fármacos para tratar leucemias en México, Europa y Estados Unidos.
Antes de esta fecha, las opciones eran limitadas. Los avances recientes incluyen fármacos dirigidos a mutaciones específicas y una mayor personalización del tratamiento, marcando una diferencia significativa en la era de la medicina personalizada.
"De siete años para acá, han mejorado muchísimo. Tenemos fármacos que van directamente sobre una mutación, tenemos fármacos que se utilizan en casos muy especiales, y pues cada vez tenemos un arsenal terapéutico más adecuado para personalizar incluso el tratamiento. Decimos que vivimos en la era de la medicina personalizada y antes en leucemia no lo teníamos, pero ahora sí".
Finalmente, el Dr. Tena hizo un llamado a las instituciones para que se enfoquen en la concientización sobre el cáncer de la sangre, pues a menudo, la información se centra en enfermedades como la diabetes, el cáncer de mama y el cáncer de próstata, mientras que el cáncer de la sangre recibe menos atención.