Una semana tras la victoria de Wilders, comienzan las negociaciones para el Gobierno neerlandés

FOTO DE ARCHIVO: El político neerlandés de extrema derecha y líder del partido PVV, Geert Wilders

Por Bart Meijer

ÁMSTERDAM, 28 nov (Reuters) - El martes, casi una semana después de la inesperada victoria electoral del populista y antiislamista Geert Wilders, se iniciaron las negociaciones para formar un nuevo Gobierno en los Países Bajos.

El nombramiento de Ronald Plasterk, exministro del Partido Laborista, como "explorador de posibilidades" —persona encargada de tantear a los demás partidos— se produjo tras una caótica semana en la que el partido conservador VVD del primer ministro saliente, Mark Rutte, descartó unirse a un gobierno liderado por Wilders, lo que redujo las opciones del ganador de las elecciones.

El PVV de Wilders fue el claro vencedor de las elecciones del 22 de noviembre, pero, con solo el 24% de los votos, necesita el apoyo de partidos más moderados para formar gobierno. El primer elegido de Wilders como explorador tuvo que dimitir antes de su primera reunión tras conocerse que estaba luchando contra una acusación de fraude.

Plasterk fue ministro de Interior y Educación de los laboristas entre 2007 y 2017, pero en los últimos años se ha convertido en uno de los críticos más feroces del partido como columnista del periódico de derechas Telegraaf.

En su columna más reciente, publicada un día después de la votación de la semana pasada, dijo que la formación de un gobierno debería ser relativamente fácil, ya que los votantes habían dejado claro que querían un Gobierno de derechas que incluyera al Partido de la Libertad (PVV) de Wilders, al VVD y al nuevo partido de centro NSC.

Sin embargo, la formación de un Gobierno en el fracturado panorama político neerlandés suele llevar meses, y de momento no hay indicios de que esta vez vaya a ser diferente.

La nueva líder del VVD, Dilan Yesilogz, ha dicho que su partido apoyaría las medidas propuestas por un Gobierno de derechas, pero que no se uniría a un gabinete liderado por Wilders.

El líder del NSC, Pieter Omtzigt, subrayó durante la campaña que la cooperación sería difícil, ya que, en su opinión, las posturas extremas de Wilders, incluida la prohibición total de las mezquitas y el Corán en los Países Bajos, violarían las protecciones constitucionales neerlandesas sobre la libertad religiosa.

Tras su victoria electoral, Wilders afirmó que aspiraría a ser un primer ministro "para todos" en los Países Bajos, y que su Gobierno no tomaría ninguna medida que pudiera considerarse inconstitucional.

La combinación laborista-verde-izquierdista, que quedó segunda en las elecciones, ha descartado cualquier tipo de colaboración con Wilders.

Se espera que Plasterk presente sus conclusiones el 5 de diciembre, tras lo cual los partidos que se considera que forman la coalición más viable empezarán a negociar un acuerdo de Gobierno.

(Información de Bart Meijer; editado por Frances Kerry; editado en español por Javi West Larrañaga)