Sanna Marin, la ex primera ministra y líder del Partido Socialdemócrata de Finlandia (SDP) hasta el mes pasado, dedicará parte de su tiempo en el futuro a brindar conferencias a nivel internacional.

Marin ya figura como conferencista en las listas de la exclusiva agencia estadounidense Harry Walker, que conecta y prepara a ponentes de primer nivel para eventos internacionales.

Harry Walker representa, entre otros, al expresidente de Estados Unidos Barack Obama y su esposa, Michelle; al expresidente Bill Clinton; a la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, al exprimer ministro británico Boris Johnson; entre una larga lista de celebridades, deportistas y otras grandes personalidades.

Marin, de 37 años, se especializa en temas de geopolítica, autonomía estratégica, cambio climático y liderazgo femenino, según su biografía en el sitio web de la agencia.

En mayo, Marin apareció como conferencista principal en la ceremonia de graduación de la Universidad de Nueva York, institución que le concedió el título doctorado honoris causa en ese mismo acto, ante decenas de miles de oyentes en el emblemático estadio de los Yankees.

En esa ocasión, se dirigió a los graduados y les contó cómo y por qué se convirtió en la primera ministra más joven del mundo con 34 años.

“De joven no pensaba ser política ni primer ministra”, manifestó la funcionaria frente a la audiencia. “Al final lo hice porque quería cambiar las cosas, cambiar el mundo. Y porque me di cuenta de que también era mi responsabilidad, no la de otros”, añadió.

En junio se estrenó en HBO Max un documental sobre Marin y otras cuatro ministras finlandesas titulado Viisi valittua (Las cinco primeras), que relata la experiencia de estas funcionarias mujeres mientras atraviesan una serie de grandes convulsiones políticas.

Sin embargo, las conferencias serán una actividad secundaria, ya que Marin continúa sus labores como miembro del Parlamento. La exprimera ministra dijo en junio al diario Helsingin Sanomat que quiere seguir trabajando “en las mismas cosas”.

“Quiero luchar contra el cambio climático, asegurarme de que se respeten los derechos humanos, actuar en defensa de los valores democráticos en los que personalmente creo. Quiero seguir trabajando en los mismos temas: derechos humanos, igualdad, democracia, cambio climático y pérdida de la naturaleza”, aseguró en ese momento.

Renuncia y divorcio

Tras la contundente derrota de su partido en las elecciones de abril, que terminó en tercer lugar, anunció en Instagram que no renovaría su liderazgo en el SDP.

“Estoy agradecida por el tiempo que he servido como presidente del partido y primera ministra (...) pero es el momento de hacer espacio para un nuevo líder y nuevas fuerzas”, escribió entonces.

En su mensaje de despedida, destacó las enormes dificultades a las que se enfrentó su gobierno en sus años de gestión, que incluyeron la pandemia y la guerra en Ucrania. “Hemos sobrevivido a una de las grandes crisis que nos han puesto a prueba. No ha sido una temporada fácil para el gobierno. Ha costado mucho, a veces demasiado, pero el sentimiento principal es la gratitud”, señaló.

“Seguiré con mi trabajo de diputada”, añadió Marin, durante cuya gestión Finlandia se unió a la OTAN después de años de un política exterior neutral.

Un mes más tarde del anuncio de la renuncia, comunicó en redes sociales el divorcio de su marido después de 19 años juntos. “Hemos solicitado el divorcio juntos. Estamos agradecidos por 19 años juntos y por nuestra querida hija. Seguimos siendo mejores amigos, cercanos el uno al otro y padres cariñosos. Seguiremos pasando tiempo juntos como familia y el uno con el otro”, escribió en un historia.

La pareja había mostrado señales de crisis en agosto del año pasado cuando se filtró un video de Marin bailando muy cercana a un popular cantante.

El controvertido video se sumó a otros anteriores que mostraban a la primera ministra de fiesta con amigos en la residencia oficial. Incluso se especuló que había consumido cocaína por lo que tuvo que someterse a un test de detección de drogas, que salió negativo.

En su último tuit, del 11 de julio, se refirió al reciente escándalo que involucró a la actual viceprimera ministra finlandesa, líder del ultraderechista Partido de los Finlandeses (PS), quien fue señalada recientemente por antiguos mensajes que llamaban a “escupir a mendigos y golpear a niños negros”.

“El SDP dijo antes de las elecciones que no se uniría al gobierno con PS, porque nuestra comprensión de las personas, los valores y los objetivos están demasiado separadas. Esto estaba mal visto. Quizá ahora haya más comprensión. Nada de lo que ha surgido del partido en las últimas semanas ha sido nuevo o sorprendente”, expresó Marin en Twitter.

“El gobierno debe renunciar directa e inequívocamente al racismo, al discurso del odio y a la violencia. Toda persona es valiosa y la dignidad humana es indivisible. Toda persona tiene derecho a vivir en seguridad, independientemente de su origen”, añadió.

Sanna Marin ha hecho de la inclusión y de la diversidad uno de los principales ejes de su gestión.