Síntesis astrológica de María Corina Machado, líder de la oposición venezolana | Opinión

La oposición democrática en Venezuela enfrenta desafíos específicos. En este contexto político, María Corina Machado, una mujer con voluntad de acero, reciente ganadora de las primarias opositoras en Venezuela.

María Corina Machado nació el 7 de octubre de 1967 en Caracas, Venezuela. Su signo zodiacal es Libra, la armonía y el equilibrio son sus notas clave y con diplomacia y conciencia hace todo lo posible para evitar el conflicto.

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La justicia y la igualdad, tanto en tu vida personal, como en el mundo, son importantes para ella. Si lucha por algo es porque siente que es injusto; el equilibrio es importante para ella. Cree en la moderación en todas las cosas, sin ser extremista. El Sol de María Corina está en sextil a el planeta Marte, por eso ella es una líder inspiradora de un equipo o de un esfuerzo grupal porque su dinamismo evoca lo mismo en los demás. El Sol se opone a Saturno indicando que asumió grandes responsabilidades a una edad temprana, y la posibilidad de que haya enfrentado muchas adversidades en la vida, algo que por supuesto la ha hecho fuerte y decidida.

Mercurio en el signo de Escorpión, le ofrece una buena concentración mental y la capacidad de sumergirse por completo en su trabajo. En un aspecto dócil a Venus, le provee tacto y encanto personal, algo que puede servirle en cualquier trabajo con personas o a nivel individual.

Venus está en el signo de Virgo, quizás sea tímida a la hora de expresar sus emociones, pero en conjunción a Júpiter garantizado que tiene un gran corazón, es amable y caritativa.

Con Marte en Sagitario esta es la persona que siempre está investigando nuevos potenciales. Ella apunta alto y no se contenta con una existencia tranquila, es decir le gusta tomar riesgos. Es flexible y se recupera de las decepciones con rapidez. Su entusiasmo y confianza son contagiosos y le permiten obtener el apoyo que necesita para sus proyectos. Marte le hace un aspecto difícil al planeta Plutón.

Ella tiene una voluntad poderosa y cuando quiere algo, lo persigue implacablemente hasta que lo consigue, sin importar lo duro que deba trabajar para ello. Tiene enormes reservas de energía, y es capaz de un esfuerzo extraordinario y de grandes logros si utiliza sus energías para propósitos constructivos.

María Corina ha estado liderando la carrera primaria durante meses, a pesar de que el gobierno formuló un decreto administrativo que le prohibía postularse para un cargo. Los afiliados a Maduro han caricaturizado y menospreciado las primarias durante todo el año, y tanto el gobierno como sus enemigos han utilizado el debate para obtener favores como parte de un convenio designado a finalizar la crisis.

Maduro ha reforzado sus esfuerzos para limitar las libertades democráticas antes de las elecciones del 2024, y esto engloba someter a políticos, defensores de los derechos humanos y opositores a arrestos, intimidaciones, y prácticas penales abusivas.

María Corina Machado, la líder electa de la oposición venezolana que está tratando de destituir al presidente Nicolás Maduro, quien tiene antecedentes de agitar al partido gobernante a pesar de las implicaciones legales, es un símbolo de la corriente feminista acuariana de estos tiempos. Urano, el planeta regente de Acuario, simboliza la libertad.

Machado desafiará a Maduro en las elecciones del próximo año, pero los resultados son impredecibles. Ella tenía prohibido postularse para cargos públicos y poco después de que confirmara en junio que se postularía a la presidencia, Maduro extendió la prohibición hasta el año 2030. Esa exclusión fue uno de los temas en los convenios entre la oposición y el régimen de Maduro. Sus agresiones al gobierno han sido su sello personal desde las administraciones de Hugo Chávez, y siempre ha refutó sentarse en una mesa de negociación con Chávez o Maduro. Machado se opone bravamente al sector reservado de la oposición, al que culpa de hacerle el juego al régimen.

La candidatura de María Corina transita por un camino incierto, pero definitivamente tiene el apoyo de todos los venezolanos. Este camino hacia las elecciones presidenciales depende totalmente del apoyo popular, de la unión no siempre desacreditada de los partidos de oposición y de la presión que Estados Unidos pueda ejercer sobre Venezuela.

Lo peor de todo este escenario político es que tiene que lidiar con Maduro, quien es visto como un dictador y está acusado de tener vínculos con el narcotráfico, y que para mantenerse en el poder será capaz de cualquier cosa. Ella debe cuidarse mucho.