El mayor rival de Boca en la Sudamericana: las ausencias y el calendario

Ahora que ya sabe que jugará el repechaje de la Copa Sudamericana contra Independiente del Valle para intentar meterse en los octavos de final, Boca se enfoca en todo lo que rodea a esos dos encuentros. Porque más allá de la picazón que le genera a todo el mundo azul y oro volver a cruzarse con el equipo que le generó la frustración de eliminarlo en las semifinales de la Libertadores 2016, en la actualidad las preocupaciones pasan por otro costado.

La agenda de competiciones está demasiado cargada. Son pocos los casilleros libres y como esos dos partidos se disputarán en las dos semanas que hay entre el final de la Copa América y el inicio de los Juegos Olímpicos, se le presenta un panorama complejo al Xeneize para saber qué jugadores tendrá el técnico Diego Martínez a disposición.

El medio campo aparece como la zona más diezmada en lo referido a los habituales titulares. A las ausencias de Cristian Medina, Ezequiel Fernández y Kevin Zenón (los tres formarán parte del seleccionado olímpico que conduce Javier Mascherano y para esos días ya estarán enfocados en el debut de la competencia, frente a Marruecos, el 23 de julio, por el Grupo B) se le suma la fecha de suspensión que debe cumplir Guillermo “Pol” Fernández, que vio la tarjeta amarilla en la goleada frente a Nacional Potosí y llegó al límite de amonestaciones.

Martínez deberá reacomodar las piezas, más allá de los posibles refuerzos que lleguen de aquí hasta entonces. Eso sin contar con posibles desvinculaciones. Con los integrantes del plantel actual, podría suponerse que los ausentes serán reemplazados por Jabes Saralegui (una debilidad del entrenador desde que asumió en enero), Jorman Campuzano, Vicente Taborda y Juan Ramírez.

Aunque tanto el colombiano como el exjugador de Argentinos ya saben que no son tenidos en cuenta por el DT y la idea es que emigren en este mercado de pases. Por eso, esos lugares podrían ocuparlos el joven Mauricio Benítez (categoría 2004) y quizá Frank Fabra por delante de Lautaro Blanco, sobre el andarivel izquierdo.

Pero Martínez no sólo se ve obligado a analizar las pocas cartas disponibles en el medio campo. Sucede que la presencia de Luis Advíncula en los cruces con Independiente del Valle está atada del camino que haga Perú en la Copa América. Integrante del Grupo A junto con la Argentina (se enfrentan en Miami, el 29 de junio), Chile y Canadá, cada paso que dé el conjunto dirigido por Jorge Fossati en la competencia complicará más las chances de que el Rayo llegue en tiempo y forma al repechaje. Si Advíncula no está disponible, será reemplazado por Marcelo Saracchi, Nicolás Figal o Lautaro Di Lollo.

Pero no todas son malas noticias. Lejos de los planes de Marcelo Bielsa, los uruguayos Edinson Cavani y Miguel Merentiel estarán descansados y al máximo nivel desde lo físico. Además, algo que ilusiona: por cómo quedó conformada la llave del torneo, daría la sensación de que si Boca pasa a los ecuatorianos (terceros del Grupo F de la Libertadores, detrás de Palmeiras y San Lorenzo) tendría rivales más accesibles que los que les hubiera tocado si ganaba el Grupo D. De hecho, en octavos aguarda Cruzeiro, lejos de ser uno de los equipos poderosos de la competición.

Aunque se insiste: las posibles compras y ventas pueden alterar el escenario. Lo único cierto es que el partido de ida se disputará en la semana del 14 de julio, en Ecuador, aunque todavía no está confirmada la fecha exacta, ni la sede ni el horario. En tanto, una semana más tarde todo se definirá en la Bombonera.