Van a reabrir y restaurar el bar notable de San Telmo donde se reencontraron Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato

Eran las seis y media de la tarde y la lluvia caía en la ciudad de Buenos Aires. La Plaza Dorrego estaba desierta. Las pocas personas que pasaban caminando iban cabizbajas, protegidas de la lluvia con sus pilotos y sus paraguas. Sin embargo, algo llamaba la atención en la esquina de Humberto Primo y Defensa: el mítico bar Plaza Dorrego, reconocido principalmente por haber albergado un encuentro entre los escritores Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato en la década del 70, recibía gente luego de haber permanecido cerrado durante tres años y medio.

Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato se reencontraron en este bar luego de 20 años de distanciamiento
Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato se reencontraron en este bar luego de 20 años de distanciamiento - Créditos: @Hernan Zenteno

Dentro de ese establecimiento que fue declarado Bar Notable en el 2004 y Sitio de Interés Cultural en 2011 por la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires, y que permaneció con las luces apagadas durante mucho tiempo, las risas, las charlas, los saludos, las anécdotas y los recuerdos le volvían a dar vida.

La preapertura del Bar Dorrego, que cerrará luego para su restauración
La preapertura del Bar Dorrego, que cerrará luego para su restauración - Créditos: @Hernan Zenteno

Sentados en las pequeñas y antiguas mesas de madera, sobre el piso de damero con mosaicos calcáreos blancos y negros, los fieles clientes del bar recordaban viejos tiempos en los que las horas se pasaban volando a plena charla. “Si las paredes del bar hablaran, no le darían los años para contar las infinitas charlas que tuvimos con mis amigos sentados en aquella ventana que da a la Plaza”, dijo Rodolfo, un señor de 80 años que estaba rodeado de amigos, mientras señalaba un ventanal que todavía lleva la marquesina intacta.

La esquina de Humberto Primo y Defensa
La esquina de Humberto Primo y Defensa - Créditos: @Hernan Zenteno

Acodado en la barra, que originalmente había sido de estaño, estaba Horacio Julio Spinetto, arquitecto, historiador de la ciudad de Buenos Aires y miembro de la Comisión Cafés notables. “En 2020 este local cerró y hubo un intento de reapertura como cooperativa por parte del personal de meseros. No funcionó. Hasta que un grupo de personas tomó la iniciativa de reabrirlo con algunas modificaciones como la ampliación de la cocina, prácticamente inexistente antes, pero manteniendo las características que lo convirtieron en un café notable y esencial en la ciudad de Buenos Aires”, dijo.

“Yo vengo de toda la vida al bar, desde la adolescencia, es una alegría que se vuelva a abrir”, contó Ana, una señora de 70 años que disfrutaba del lugar como si fuera la primera vez.

El Bar Dorrego será parte del circuito de la noche de los bares notables
El Bar Dorrego será parte del circuito de la noche de los bares notables - Créditos: @Hernan Zenteno

Aunque el bar permaneció cerrado durante mucho tiempo, las vivencias de los años quedaron marcadas en cada rincón del inmueble construido entre 1880 y 1881: en la boiserie que cubre ciertas partes de las paredes del local, en las mesas y en las sillas se pueden ver grabados los nombres de los clientes y personajes que frecuentaban el bar. También hay leyendas escritas con llaves o navajas.

La noche de los bares notables

La primera reapertura del bar se hizo además con la excusa de anunciar que hoy se celebra la segunda edición de La Noche de los Bares Notables y que el Bar Plaza Dorrego será parte.

Los aperitivos listos para ser servidos
Los aperitivos listos para ser servidos - Créditos: @Hernan Zenteno

La propuesta tiene como foco principal disfrutar de lo mejor de la gastronomía y la cultura en estos sitios emblemáticos, referentes ineludibles de la historia de los barrios porteños. El evento comenzará a las 17 y finalizará a la medianoche. Habrá alrededor de 14 circuitos barriales en los cuales habrá más de 150 actividades exclusivas que tendrán lugar tanto dentro de los bares, como itinerantes en las calles y en los escenarios que serán emplazados en la zona.

El icónico piso de damero
El icónico piso de damero - Créditos: @Hernan Zenteno

Bar Plaza Dorrego, por ejemplo, volverá a recibir al público con una muestra de obras de arte. Eso sí: una vez que finalice este evento, se abocarán a la recuperación del lugar. La puesta en valor llevaría un año al menos y recién ahí volverán a abrir.

Pablo Durán, quien lidera el proyecto junto a Daniel Prieto y los dueños de una importante empresa de café, que prefieren no ser nombrados, detalló entusiasmado: “El año pasado se pudo adquirir, así que ahora vamos a empezar a recuperarlo y ponerle valor, arreglarlo”.

Calculan que la puesta en valor llevará un año al menos
Calculan que la puesta en valor llevará un año al menos - Créditos: @Hernan Zenteno

También destacó que la idea es comenzar con los arreglos en los próximos meses, conservando toda la identidad y el inmobiliario que está adentro intacto. “Calculo que recién el año que viene se podrá abrir porque es un trabajo que tiene mucha restauración, una gran recuperación. Hay que hacer obra y es difícil calcular los tiempos, pero estimo que para los primeros meses del año que viene abriremos”, adelantó en diálogo con LA NACION.

“Yo ya recuperé otros cafés notables cerrados o a punto de hacerlo, pero este es un desafío especial… la sensación que tengo es un gran placer en lo personal. Yo empecé de chico en la gastronomía, trabajaba de mozo en San Telmo frente al parque Lezama y en esa época este bar estaba en su apogeo, era ‘el bar de San Telmo’. Tenía 20 años e iba a tomar algo con mi novia, quien hoy es mi esposa; pero después empezó su lenta decadencia hasta que se cerró”, recordó con nostalgia.

Pablo Durán es el dueño y planea abrirlo definitivamente después de la restauración
Pablo Durán es el dueño y planea abrirlo definitivamente después de la restauración - Créditos: @Hernan Zenteno

“El haber podido adquirirlo y ahora empezar la hermosa tarea de recuperarlo, ponerlo en valor y que vuelva a ser lo que fue es una gran felicidad para mí y para todo el barrio, más los miles de turistas que van a la plaza y no entienden por qué está cerrado”, expresó con emoción.

Un encuentro histórico

En sus comienzos, como tantos otros bares notables, fue un despacho de bebidas y almacén de ramos generales llamado ‘El Imperial’, del cual aún se conserva la máquina de café y algunos cajones donde se guardaban productos de venta al peso. Más tarde, el bar se llamó San Pedro Telmo.

En 1975, gracias a la intermediación del escritor y periodista Orlando Barone, se reunieron en este lugar Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato, luego de 20 años de distanciamiento. Una de las fotografías que registran este momento histórico se ha convertido en un ícono del bar y de la literatura argentina.

La noche de San Telmo recupera uno de sus íconos
La noche de San Telmo recupera uno de sus íconos - Créditos: @Hernan Zenteno

Pero esos no fueron los únicos reconocidos escritores que pasaron por las mesas del bar, sino que Isidoro Blaisten y Abelardo Arias también visitaban regularmente el establecimiento. En la planta alta del edificio se encuentra el taller del prestigioso orfebre argentino Juan Carlos Pallarols, autor de célebres piezas de arte, entre ellas cálices papales y bastones de mando de muchos presidentes argentinos.

En la restauración, se mantendrá mucho de la estructura histórica
En la restauración, se mantendrá mucho de la estructura histórica - Créditos: @Hernan Zenteno

El bar notable también fue seleccionado como escenario para filmar escenas de varias películas, como Almafuerte, que relata la vida del poeta argentino Pedro Bonifacio Palacios, y La Peste, una coproducción argentina-francesa y británica dirigida por Luis Puenzo.

Hoy, la famosa esquina de Humberto I° y Defensa vuelve, para después guardarse de nuevo y volver definitivamente al ruedo. Y renovado.