Helados y cremas solares disparan su venta: así afronta el calor un país no habituado a él

Que Reino Unido no está preparado como país a nivel de infraestructuras para una ola de calor que haga subir los termómetros por encima de los 40 grados como está ocurriendo es algo que ya explicaba esta misma semana en Yahoo Javier Taeño. De ahí que en los últimos días se estén sucediendo noticias sobre problemas derivados de las altas temperaturas, pero también sobre cómo hacen frente al calor los británicos. En este sentido, la BBC publicaba este martes el aumento de la compra de helados y cremas de protección solares.

Más helados y cremas para protegerse del sol en la cesta de la compra de los británicos ante la ola de calor. (Foto: AP Photo/Frank Augstein)
Más helados y cremas para protegerse del sol en la cesta de la compra de los británicos ante la ola de calor. (Foto: AP Photo/Frank Augstein)

Citando datos de Kantar, las ventas de cremas de protección solar han aumentado un 66%. Y en esas cuatro semanas de las que hablan estos registros, sabiendo ya lo que se avecinaba por los avisos y las alertas emitidos al respecto, también se han comprado más helados, un 14% más. Los datos recogidos, apunta la BBC, son hasta el 10 de julio. Habrá que esperar aún para conocer cómo se han comportado los británicos en su cesta de la compra con la ola ya presente en su día a día y no como un fenómeno que estaba por suceder.

La previsión que hace Kantar en este sentido es que se gastarán millones de libras en artículos para combatir el calor como ventiladores, piscinas hinchables y botellas de agua. Porque los datos que manejan hasta el momento son los de los más previsores, los que estuvieron atentos y se aprovisionaron ante el pronóstico de la Oficina Meteorológica de que se superarían los 40 grados en algunos lugares.

Para hacerse una idea de lo que puede ocurrir se remontan a julio de 2019, donde una ola de calor similar recorrió el territorio británico. Entonces, sus ciudadanos se gastaron casi 11 millones de libras solo en ventiladores, piscinas infantiles y botellas de agua reutilizables.

Fraser McKevitt, jefe de conocimiento minorista y del consumidor de Kantar, asegura que esperan “ver números similares, si no incluso mayores, esta vez”. Superiores, en parte, porque el coste de esos artículos, como el de casi todo, ha aumentado.

Con las casas más acondicionadas para soportar el frío que el calor –menos del 5% de la población tiene aire acondicionado, apuntaba Taeño–, escaparse a la playa parece ser la opción más socorrida para algunos. Y eso ha provocado un aumento de las multas y avisos a quienes, ante la masiva afluencia a las playas de las costa de Dorset, decidieron aparcar sin respetar la señalización ni los lugares habilitados para ello.

El Consejo de Bournemouth, Christchurch y Poole (BCP) ha confirmado, según la BBC, que tuvieron que llevarse nueve vehículos y las autoridades hicieron entrega de más de 1.500 avisos por estacionamiento solo el pasado fin de semana. Derivado de esta avalancha de bañistas y del poco civismo de algunos, Bournemouth también se ha encontrado con un extra de basura acumulada. El consejo del BCP en este sentido es contundente. “Nuestro mensaje es simple, si la gente encuentra un contenedor lleno, busque otro o lleve la basura a casa y deje solo huellas”, han sentenciado en redes sociales.

Y mientras los medios se llenan de consejos sobre cómo combatir el calor y qué precauciones deben tomarse, en The Guardian han publicado un artículo titulado ‘Lo que el Reino Unido puede aprender del sur de España sobre cómo manejar el calor’. En él hablan del uso de las persianas y los toldos, de la presencia del aire acondicionado en las casas, de los patios y fuentes de agua, de las casas encaladas del sur, de los horarios… Pero también concluyen que no todo lo que sirve para España puede ser aplicado en Reino Unido y que, por otra parte, España tampoco está preparada para el aumento de temperaturas que vaticina el cambio climático.

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