La reforma legislativa de la ciudadanía vuelve al centro del debate político en Italia

La concesión de la ciudadanía a los hijos nacidos en Italia de personas que emigraron al país ha sido durante mucho tiempo objeto de debate político. El vice primer ministro italiano y líder de Forza Italia, Antonio Tajani, ha exigido recientemente una revisión de la ley actual, que data de 1992 y que dificulta la consecución de este proceso.

Tajani ha respaldado la posibilidad de conceder la ciudadanía a quienes completen diez años de educación obligatoria en Italia. A pesar de ser un aliado cercano de la ultraderechista Meloni, la medida de Forza Italia no ha sido bien recibida por sus socios de coalición.

"Me siento como un extranjero en mi país natal"

Amin Nour nació en Somalia y llegó a Italia cuando tenía 4 años. Después de vivir y estudiar en el país durante más de 30 años, no se le considera ciudadano italiano. Hoy es uno de los promotores de la propuesta de reforma.

"Siempre he trabajado legalmente, he pagado impuestos. Me siento como un extranjero en mi país natal. Solo me queda el color de mi piel de África, porque nunca he regresado a Somalia. Es como si te amputaran un miembro: estás limitado en todo lo que haces. Ser italiano es algo de lo que estar orgulloso. Entrené karate durante muchos años y era muy bueno, pero no podía participar en competiciones internacionales como mis compañeros atletas", dice Nour, fundador de ‘Nibi, Neri Italiani Black Italians’.

La ley está "obsoleta" y "necesita actualizarse", según Save the Children

Save the Children lleva años realizando un trabajo de base para ayudar con la integración de los niños nacidos en Italia de padres extranjeros. Raffaella Milano, que coordina los programas de la organización en el país, dice que "en Italia la ley está obsoleta", dado que fue concebida hace más de 30 años "para una nación formada por personas que emigraban" con la intención de "proteger a los hijos de los italianos que trabajaban en el extranjero". Pero el país ha cambiado tanto, dice, "que la ley necesita actualizarse".

El partido ultraderechista Liga, de Matteo Salvini, está en contra de la reforma. Rossano Sasso, diputado de la formación, alega que "dos de cada tres partidos le dicen a Forza Italia que no se trata de un tema compartido".

"Podemos hablar de ello, lo llevamos discutiendo desde el verano, pero dudo que se vaya a discutir en el Parlamento. Seguro que esto ocurrirá entre los partidos de la oposición, pero no entre los partidos que forman la mayoría en el Parlamento", añade. Aún así, se prevé que el debate continúe en los próximos meses. Antonio Tajani y su partido están decididos a llevar la propuesta al Parlamento.