La recaudación de fondos para el policía que disparó a un adolescente refleja divisiones en Francia

FOTO DE ARCHIVO. Flores en la plaza Nelson Mandela, donde Nahel, un adolescente de 17 años fue asesinado por un policía francés durante un control de tráfico, en Nanterre, Francia

Por Elizabeth Pineau

PARÍS, 4 jul (Reuters) - Una campaña de micromecenazgo para recaudar fondos para la familia del policía que mató a tiros al adolescente Nahel M. en Francia alcanzó el martes los 1,4 millones de euros (1,5 millones de dólares), superando las donaciones a la familia de la víctima y provocando la ira de parte de la sociedad francesa.

La iniciativa de recaudación de fondos fue lanzada en la plataforma estadounidense GoFundMe por el mediático ultraderechista francés Jean Messiha, quien apoyó la candidatura presidencial de Eric Zemmour en 2022, y ha recibido más de 72.000 donaciones privadas.

Políticos de izquierdas han tachado de vergonzosa la recaudación de fondos, mientras que la extrema derecha ha defendido a un cuerpo de policía que, aseguran, es blanco diario de la violencia en los suburbios de bajos ingresos que rodean las ciudades francesas. Es un debate que refleja las profundas fracturas que atraviesan la sociedad francesa.

"Este policía es víctima de una caza de brujas nacional y es una vergüenza", tuiteó Messiha poco después de lanzar la campaña. "El esfuerzo de recaudación de fondos (...) es el símbolo de una Francia que dice no (a) esta traición".

El agente de policía ha sido acusado de homicidio voluntario y puesto en prisión preventiva.

El líder del Partido Socialista, Olivier Faure, instó a GoFundMe a cerrar la campaña. "Están perpetuando una brecha ya enorme al apoyar a un agente de policía investigado por homicidio voluntario. Ciérrenla", escribió en redes sociales.

La recaudación de fondos para la familia de Nahel ascendía a 352.000 euros.

El ministro de Justicia, Éric Dupond-Moretti, dijo a la radio France Inter que todo el mundo debería poder donar a un micromecenazgo, pero añadió: "No creo que (lo de Messiha) vaya en la dirección del apaciguamiento".

RESENTIMIENTO POLICIAL

El tiroteo del 27 de junio contra Nahel, un joven de 17 años de ascendencia argelino-marroquí, desató una ola de disturbios en todo el país que conmocionó a Francia por su violencia antes de que la policía reprimiera a los alborotadores, lo que dio lugar a una relativa calma durante las dos últimas noches.

La policía detuvo a 72 personas durante la noche, según el Ministerio del Interior.

La muerte puso de manifiesto un profundo resentimiento contra las fuerzas del orden en los suburbios pobres y multirraciales de las principales ciudades francesas —conocidos como "banlieues"—, donde las comunidades musulmanas de ascendencia norteafricana, en particular, acusan desde hace tiempo a la policía de utilizar perfiles raciales y tácticas violentas.

Lo que empezó como una revuelta en los rascacielos de las "banlieues" se transformó en una oleada de odio y rabia contra el Estado y en violencia oportunista en pueblos y ciudades.

Los alborotadores han incendiado más de 5.000 automóviles, saqueado centros comerciales y atacado ayuntamientos, escuelas y propiedades estatales consideradas símbolos del país.

Los disturbios, sin embargo, no han provocado el tipo de examen de conciencia del Gobierno sobre el racismo que siguió a la agitación por incidentes similares en otros países occidentales, como las protestas de Black Lives Matter en Estados Unidos o los disturbios raciales en ocasiones en Reino Unido.

En su lugar, el Gobierno francés apunta a la falta de privilegios en los barrios urbanos de bajos ingresos y a la delincuencia juvenil, un reflejo de la creencia del Estado de que los ciudadanos están unidos bajo una única identidad francesa, independientemente de su raza o etnia.

El presidente francés, Emmanuel Macron, recibía el martes a más de 200 alcaldes en el Palacio del Elíseo para escuchar sus relatos sobre los disturbios.

(1 dólar estadounidense = 0,9173 euros)

(Información de Elizabeth Pineau; escrito por Richard Lough; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)