Los rebeldes avanzan en Alepo, reunión en Washington sobre Siria

Los rebeldes sirios que combaten al régimen de Bashar al Asad fortalecieron sus posiciones en el combate por el control del aeropuerto militar de Meneg, en la provincia de Alepo (norte), informó este lunes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). (AFP/Archivo | Aamir Qureshi)

Los rebeldes sirios tomaron parcialmente un aeropuerto militar en la provincia de Alepo, donde el ejército prepara un gran asalto, mientras que Washington se dispone a examinar "todas las opciones posibles" para ayudar a la oposición que pierde terreno ante el régimen. El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, aplazó un viaje previsto esta semana a Oriente Próximo para participar en estas reuniones sobre Siria en la Casa Blanca. El presidente Barack Obama ha pedido a su "equipo de seguridad nacional", que incluye a Kerry, que "examine todas las opciones posibles que permitan cumplir nuestros objetivos para ayudar a la oposición siria", explicó a la AFP la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. El presidente Obama lleva varios meses bajo presión para que arme a la rebelión siria. Hasta ahora se ha limitado a una ayuda económica de 250 millones de dólares. En el terreno, los rebeldes tomaron el edificio del radar en el aeropuerto de Mennegh, donde desde el domingo se registran violentos combates, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), que aseguró que el ejército bombardeó el perímetro de este aeropuerto situado en la provincia de Alepo. Esta ofensiva rebelde parece destinada a neutralizar el fuego aéreo, principal arma del régimen, al día siguiente de que el ejército anunciarse que está preparado para lanzar una gran ofensiva para recuperar el control de la provincia de Alepo (norte). "Es probable que la batalla de Alepo empiece en las próximas horas o en los próximos días", declaró un responsable de los servicios sirios de seguridad a la AFP el domingo, cuatro días después de la conquista de Quseir (centro-oeste) por el ejército con el apoyo del Hezbolá libanés. Un ministro israelí estimó el lunes que el presidente sirio Bashar al Asad podría ganar la guerra gracias al Hezbolá y su aliado iraní. "Si la oposición no avanza y el régimen logra sobrevivir y obtiene apoyo muy fuerte (...) de Irán y del Hezbolá (...) podría al final sobrevivir", declaró a la prensa el ministro israelí de Relaciones Internacionales y de Información, Yuval Steinitz. En Líbano, país desgarrado por la intervención del Hezbolá al lado del régimen, estalló una bomba cerca del principal paso fronterizo con Siria. La explosión estaba dirigida contra dos vehículos que iban a Siria, y que prosiguieron camino pese a la misma, dijo una fuente de la seguridad que no reportó víctimas ni precisó quiénes eran los ocupantes de los vehículos. Esta explosión se produce en un contexto de creciente tensión en Líbano, al día siguiente de las manifestaciones contra la intervención del Hezbolá en Siria. El presidente libanés, Michel Sleimane, pidió al Hezbolá y a la embajada de Irán en Beirut que cooperen en la investigación sobre la muerte, el domingo, de un hombre que se manifestaba contra el poderoso movimiento chiita. Por su parte, las monarquías petroleras del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) anunciaron el lunes que impondrán sanciones contra los intereses financieros y comerciales de los "los miembros" del Hezbolá chiita libanés. Arabia Saudí, que apoya a los rebeldes sirios, también denunció la intervención del Hezbolá en Siria. Del lado de los rebeldes, la ejecución de un adolescente ante sus padres el domingo en Alepo por combatientes que le acusaron de blasfemar, recibió la condena de la Coalición de la Oposición Siria, que aseguró que "todo el que cometa un crimen de guerra será juzgado independientemente del campo al que pertenezca". Yihadistas belgas que combaten el régimen sirio están acusados de haber perpetrado crímenes de guerra, según la prensa de Bélgica, que informa de que un joven combatiente de esta nacionalidad perdió la vida en Siria y su hermano detenido a su regreso a Bélgica. Desde hace varios meses, las autoridades belgas están preocupadas por que decenas de jóvenes musulmanes están yendo a Siria, donde la mayoría se une a milicias islamistas independientes del Ejército Sirio Libre (ASL). Los rebeldes sirios que combaten al régimen de Bashar al Asad fortalecieron sus posiciones en el combate por el control del aeropuerto militar de Meneg, en la provincia de Alepo (norte), informó este lunes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).