Realeza británica envía saludo de cumpleaños a Archie, el hijo de Meghan y Enrique

Imagen de archivo. El príncipe Enrique, su esposa Meghan y su hijo Archie, en Ciudad del Cabo

LONDRES (Reuters) - El príncipe Enrique de Gran Bretaña y su esposa Meghan celebraron el jueves el segundo cumpleaños de su hijo Archie pidiendo al público que realice una donación para ayudar a proveer vacunas de COVID-19 a los más vulnerables del mundo.

La pareja, que ahora vive en California después de mudarse de Gran Bretaña y renunciar a sus deberes reales el año pasado, dijo que no podía pensar "en una forma más relevante de honrar el cumpleaños de nuestro hijo" que donando 5 dólares.

"Nos ha conmovido profundamente en los últimos dos años sentir la calidez y el apoyo a nuestra familia para celebrar el cumpleaños de Archie", escribieron Enrique y Meghan en su página web, diciendo que el 80% de las 1.000 millones de vacunas de COVID administradas hasta ahora fueron en los países ricos.

La realeza británica suele celebrar los cumpleaños difundiendo nuevas fotos y el año pasado la pareja lanzó un video en el que Meghan le leía un cuento a Archie, el séptimo en la línea de sucesión al trono británico.

Sin embargo, este año se saltearon la tradición, como hicieron con muchas costumbres reales desde que buscaron una nueva vida, con independencia financiera, en Estados Unidos, aunque otros miembros de la familia enviaron mensajes de cumpleaños tradicionales en Twitter.

"Le deseamos a Archie Mountbatten-Windsor un muy feliz segundo cumpleaños hoy", dijo un mensaje publicado en la cuenta de Twitter de la reina Isabel, con felicitaciones similares del abuelo de Archie, el príncipe Carlos -heredero al trono-, y de sus tíos, el príncipe Guillermo y su esposa Catalina.

Archie se convirtió en un punto focal del deterioro de la relación entre Enrique, el nieto de la reina de 95 años, y el resto de la familia después de renunciar a sus tareas reales.

Durante una entrevista con Oprah Winfrey en marzo, Meghan, de 39 años, cuya madre es negra y su padre es blanco, dijo que un miembro de la realeza no identificado había preguntado cuán oscura sería la piel de Archie antes de su nacimiento.

La acusación llevó a Guillermo a negar que los Windsor fueran racistas y a la reina a emitir un comunicado diciendo que los temas planteados sobre la raza eran preocupantes, pero que "algunos recuerdos pueden variar".

(Reporte de Michael Holden; editado en español por Lucila Sigal)