Ociel nos mostró que nosotres podemos abrir todas las puertas: Colectivos recuerdan legado de le magistrade

undefined
undefined

La visibilidad de le magistrade Jesús Ociel Baena como persona no binarie no solamente acercó temas político-electorales a la comunidad LGBTQ+, su legado también ayudó a empoderar a juventudes que se sintieron representadas en un contexto de violencia y discriminación contra esta población en México.

Activistas de la comunidad LGBTQ+ destacan y agradecen el trabajo que le magistrade hizo en la defensa de los derechos humanos en México y en América Latina, pues Ociel Baena fue la primera persona abiertamente no binarie en asumir un cargo dentro de la Judicatura Federal en la región.

“Cuando se hable de Ociel se tiene que decir que fue influencia; comenzó a hablar y a decir aquí estamos la comunidad no binarie, y a nivel personal, como abogade, yo sé que el derecho siempre ha sido muy estricto y nos ha negado a nosotras las personas trans, a las personas no binaries, y Ociel al final mostró que no es que no se pueda sino que las instituciones son quienes no abren las puertas y por eso somos nosotres quienes tenemos que abrirlas”, dice Leo Morán, integrante de la colectiva Hola Amigue. 

En entrevista para Animal Político, Leo, quien también estudió Derecho, agradece la participación y la lucha que emprendió le magistrade por visibilizar a las personas no binaries.

“Como persona trans no binarie cuando tienes tantas personas cercanas sientes que le puede pasar a cualquiera porque es una realidad que vivimos todos los días. Cuando entendí que se referían a le magistrade y vi la cobertura de los medios de comunicación, me invadió la rabia de ver cómo se le malgenerizó y cómo la indignación era por el lenguaje y no por el hecho de haber perdido una vida”, relata al compartir cómo se enteró del asesinato de Ociel Baena.

Lee: Ciudadanía recuerda a magistrade Ociel Baena y exige que su muerte se investigue como crimen de odio

magistrade ociel baena legado activistas disidencias
Jesús Ociel Baena Saucedo y Dorian Daniel Nieves Herrera recibieron un homenaje en la sede del Tribunal Electoral del Estado | Foto: Cuartoscuro

Tomamos la esperanza para convertirla en rabia 

Para Oslavia Linares, mujer trans quien forma parte de la organización Transcontingenta, una de las convocantes a la protesta que se llevó a cabo en la Ciudad de México, quedarse de brazos cruzados tras la muerte de le magistrade no es una opción. 

La decepción, el desasosiego y hasta el desamparo que le invadió el cuerpo cuando supo de su muerte, los convirtió en un grito de protesta, por Ociel, por la comunidad, por ella misma. 

“Si esto le pasó a une persona tan visible como elle, significa que nos puede pasar a cualquiera”, dice en entrevista. 

Por eso, señala, hay que seguir luchando. Tomar la esperanza que les arrebataron al tener a une representante de la comunidad y convertirlo en rabia, la rabia necesaria para no dejar que se caiga en la impunidad. 

“Se necesita gritar que no nos vamos a quedar quietes ante esta clase de tragedia, no es aceptable no hacer nada, todes nos  sentimos convocades en todo el país porque lo sentimos como un momento de rabia, compasión pero también de vulnerabilidad compartida; no les vamos a dejar asesinar a alguien y decir que fue un crimen pasional y dar el carpetazo. Si lo dejamos así, si no nos manifestamos ni denunciamos, les damos en bandeja de plata que nos quiten los derechos que hemos ganado literal con sangre y sudor”, sostiene. 

Oslavia afirma que será la rabia y la resistencia lo que conservará el legado de le magistrade

“Con elle veíamos que podemos llegar y debemos llegar a esos espacios que antes pensábamos que eran imposibles, elle era une gran impulsore, eso es lo que vamos a defender”, comenta. 

Le magistrade Ociel Baena estuvo por nosotres, ahora vamos nosotres por elle 

Alex Orué, subgerente del Programa Global de It Gets Better, integrante del Colectivo por la Protección de Todas las Familias en Yucatán y activista no-binarie, tiene muy clara la exigencia a las autoridades tras la muerte de le magistrade: se tiene que investigar con perspectiva de género, de derechos humanos y como crimen de odio

“Le magistrade denunció amenazas en su contra, tenía escolta porque se temía por su seguridad y dicen que fue un crimen pasional. Eso es mentira y así como elle defendió a la comunidad, nosotres haremos lo mismo por elle”, afirma Alex. 

magistrade ociel baena legado activistas disidencias
Cientos de personas se concentraron frente al Palacio de Gobierno para exigir justicia por el asesinato de Jesús Ociel Baena Saucedo en Aguascalientes | Foto: Cuartoscuro

En su rabia, tristeza e incluso desde su estado de shock, le activista agradece que Ociel haya puesto a la comunidad en la conversación pero sobre todo, que estuviera dispueste a aprender para mejorar. 

“Fue alguien que pisó muchos callos de la intolerancia, de la ultraderecha; colocó de una forma muy humana y a través de su historia su vivencia lo que significa ser una persona no binarie, era alguien que pese a que teníamos diferencias de opiniones, siempre se mostró abierte a dialogar y a  escuchar, porque sabía que esta lucha no es individual, es por un bien colectivo”, concluyó.

“Somos el tsunami que dejó”

Para Náme Villa del Ángel, de la Asamblea Ecologista Popular, la muerte de le magistrade fue sentir que ser elle misme era motivo para estar en peligro.

“Mataron a quien mi papá me enviaba sus noticias para mostrarme que a personas como yo les puede ir bien”, compartió en sus redes sociales.

Náme leyó la noticia una y otra vez. No lo podía creer. No podía quitarse la sensación de sentirse menos segure saliendo a la calle, como si todo el entorno se le tornara más peligroso.

“Me di cuenta que por existir, por ser quien soy ya estoy en peligro; solamente por eso sentí miedo, porque a nuestra población, en este país, no se nos acepta, no se nos quiere, somos burla y estamos en peligro”, destaca en entrevista.

Y es que su miedo no podía parar. Apenas se dio a conocer la noticia y sus mensajes en redes sociales le decían que ese mismo destino le esperaba a elle y a personas que fueran igual, a personas que no fueran “la norma social”.

“Había gente en mis mensajes alegrándose, diciendo que ojalá me pase lo mismo y hacen sentir que debemos huir, de salvarnos, como decir: si no corremos va a ir empeorando esto”, relata.

Pero no corre, Náme decide quedarse, enfrentar, luchar, decir aquí estoy, aquí estamos. Por le magistrade, por mí, por todes.

“Aquí la lucha es desde la disidencia que se construye desde todas las emociones incluyendo la rabia y es eso lo que nos va a permitir tener una vida digna y feliz; y no saben que el espíritu de Ociel se ha expendido como un tsunami que llegó a todo el país. Y aquí nos vamos a defender”, prometió.