Protestas en Cuba: Joe Biden respaldó “el clamor por la libertad” y envió una advertencia al régimen

Biden se refirió a las protestas en Cuba tras una histórica jornada
Biden se refirió a las protestas en Cuba tras una histórica jornada

WASHINGTON.- En su primer mensaje sobre las fuertes protestas en Cuba, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que las manifestaciones eran un “clamor por la libertad”, y envió una advertencia al régimen de Miguel Díaz-Canel al exigirle que se abstenga de usar la violencia, respete el derecho de los los cubanos a salir a las calles y responda a las necesidades de la gente en medio de un brutal salto en los contagios de coronavirus.

“El pueblo cubano está exigiendo su libertad de un régimen autoritario. No creo que hayamos visto algo así en mucho tiempo, o jamás”, dijo Biden en una declaración a la prensa en la Casa Blanca. “Llamamos al gobierno a abstenerse de la violencia en sus intentos de silenciar la voz del pueblo de Cuba”, afirmó.

Unas horas antes, Biden había ofrecido su primera muestra de apoyo a las protestas en la isla al llamarlas en un comunicado un “clamor por la libertad”, y un pedido de alivio “de las décadas de represión y sufrimiento económico a las que ha sido sometido por el régimen autoritario de Cuba”.

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“El pueblo cubano está haciendo valer con valentía los derechos fundamentales y universales”, continuó el mandatario en su mensaje escrito. “Esos derechos, incluido el derecho a la protesta pacífica y el derecho a determinar libremente su propio futuro, deben ser respetados. Estados Unidos hace un llamado al régimen cubano para que escuche a su pueblo y atienda sus necesidades en este momento vital en lugar de enriquecerse”, cerró.

Los mensajes de Biden ofrecieron un fuerte respaldo a la ola de protestas que despuntó en la isla contra el gobierno de Díaz-Canel el fin de semana por la falta de medicamentos y alimentos en la isla en medio de la pandemia del coronavirus. Ayer, el gobierno de Estados Unidos había ofrecido tempranas señales de apoyo a través de Julie Chung, la subsecretaria Interina del Departamento del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, la diplomática de mayor rango para la región del gobierno de Biden, y el asesor de Seguridad Nacional de Biden, Jake Sullivan.

Ahora los mensajes de Biden dejan en claro que la Casa Blanca le asigna una alta importancia a las protestas, y el mandatario decidió ofrecer su respaldo personal a los manifestantes ante la creciente tensión en Cuba y la posibilidad de que se produzcan más hecho de violencia ante el llamado de Díaz-Canel convocó a enfrentar las protestas. A Biden se sumaron figuras demócratas y republicanas del Congreso.

La ola de protestas también provocó llamados a Estados Unidos a levantar el embargo que le ha impuesto a la isla. El propio Díaz-Canel tildó a las restricciones impuestas por Washington durante la Guerra Fría como “una política de asfixia económica para provocar estallidos sociales” y les achacó por las penurias en el país. El líder cubano también acusó a Estados Unidos de orquestar las manifestaciones.

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La vocera presidencial, Jen Psaki, respondió desde el atril de la Casa Blanca al afirmar que las protestas eran espontáneas y una muestra del “agotamiento” del pueblo cubano con el régimen, y que nada indicaba que hubieran sido planificadas por un gobierno extranjero. Psaki dijo que el embargo vigente tiene varias “excepciones”, incluidos productos agrícolas y ayuda humanitaria. La vocera remarcó además que Cuba está fuera del mecanismo Covax de las Naciones Unidas, algo que restringe sus posibilidades de acceder a vacunas extranjeras. Cuba desarrolló dos vacunas, Abdala y Soberana. Casi el 27% de los habitantes de la isla han recibido una dosis de una vacuna, según Our World In Data.

“Queríamos confiar únicamente en nuestras propias capacidades para vacunar a nuestra población, no en las decisiones de otras personas”, dijo a la revista Nature el director-general Instituto Finlay de Vacunas, Vicente Vérez Bencomo.

El gobierno de Biden mantiene una relación dura y tensa con Cuba. El mandatario fue uno de los protagonistas del descongelamiento de Barack Obama a la isla en 2016, que flexibilizó el embargo, pero ahora su prioridad está en América Central y su administración ha enviado señales de endurecimiento a La Habana. El último informe sobre la trata de personas del Departamento de Estado criticó las misiones médica de Cuba al exterior por la pandemia al afirmar que había “fuertes indicios de trabajo forzoso”. Biden también mantuvo a Cuba en la lista de países que amparan el terrorismo Irán, Corea del Norte, Siria y Venezuela, una decisión que desató la furia del gobierno de Díaz-Canel.

La Casa Blanca ha dicho que un giro en la política hacia Cuba no está entre las prioridades y que la relación se regirá por dos principios, el apoyo a la democracia y los derechos humanos, con un foco en el empoderamiento del pueblo cubano para determinar su propio futuro, y una filosofía de que los estadounidenses, en especial los cubano-norteamericanos, son los mejores embajadores de la libertad y la prosperidad. Hoy, Psaki volvió a reiterar esa posición.

La reacción de la CIDH

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos dijo anoche que tomó conocimiento de las multitudinarias protestas en Cuba “por la escasez de alimentos y medicinas, y la falta de garantías a la libertad de expresión y participación plural sobre asuntos de interés público”.

La Comisión dijo que recibió reportes sobre uso de la fuerza, detenciones, agresiones a manifestantes y a periodistas, además de cortes de la señal de Interne. “La CIDH llama al Estado de Cuba a cumplir con sus obligaciones de Derechos Humanos, en particular el derecho a la protesta; además, la reiterada recomendación de apertura democrática de la isla y el deber de compatibilizar la institucionalidad con los estándares interamericanos”, dijo la organización.

El secretario General de la OEA, Luis Almagro, también respaldó las protestas. “Reconocemos el legítimo reclamo de la sociedad cubana por medicinas, alimentos y libertades fundamentales. Condenamos al régimen dictatorial cubano por llamar a civiles a reprimir y a la confrontación contra quienes ejercen sus derechos de protesta”, dijo Almagro en Twitter.