Protesta policial: los intendentes apuntan a Sergio Berni por el conflicto

Los policías hicieron visible su protesta en Puente 12, donde está ubicado el comando diario del ministro Sergio Berni
Fuente: LA NACION - Crédito: Ignacio Sánchez

Con las sirenas a pleno de sus patrulleros cruzados en el asfalto de avenidas y calles céntricas, los efectivos de la policía bonaerense hicieron sentir su reclamo en el conurbano. Mientras la agenda de seguridad está a tope desde hace varias semanas, los intendentes optan mayoritariamente por el silencio, pero con cautela varios tienen reproches para la conducción política de la fuerza y cargan sobre los hombros de Sergio Berni, ministro de Seguridad del gobernador Axel Kicillof, buena parte de la responsabilidad por el estallido de las protestas policiales, que consideran justificadas por los bajos salarios y las malas condiciones de trabajo.

"El reclamo es justo. Es por salarios, condiciones laborales y una línea más clara de conducción desde lo político", define en diálogo con LA NACION un intendente peronista al que, del otro lado de la línea telefónica, se lo nota decepcionado por la situación. "Es un desastre, no te puede pasar esto, es inédito. El viernes fue el anuncio [del plan de seguridad para el conurbano que lanzó el presidente Alberto Fernández] y ahora tenés una protesta. La policía no tiene conducción; mucho show y poca conducción. A Berni no le gusta la bonaerense", añadió el jefe comunal.

Los intendentes están preocupados por el conflicto policial que se observa en la calle de todos sus distritos
Fuente: LA NACION - Crédito: Mauro V. Rizzi

Para el mandatario local, la situación debería haberse sofocado antes de llegar a la protesta. "¿Nadie se la vio venir? Si me pasara a mí, le diría al secretario de Seguridad: 'Te vas'", afirma, tajante.

Un argumento similar sobre las fallas de conducción política planteó un intendente que integra las filas de Juntos por el Cambio. "Los policías no sienten que se los tenga en cuenta. No alcanza con el Berni guapo que va a los programas de televisión. La policía necesita una palmada", aseguró.

Berni rechazó la renuncia del jefe policial y crece la tensión en la protesta

Ese intendente comentó que en su distrito "ayer [por anteayer] muchos policías no salieron, pasaron la noche tocando las bocinas de los móviles", y agregó que debieron cubrir ese déficit de patrullaje con móviles municipales.

"El tema de la seguridad no está en la agenda del gobierno bonaerense. Es como que hay una figurita llamadora que habla, pero la Provincia no tiene en el tope de su agenda este tema", completó el jefe comunal al plantear sus dudas sobre Berni y la administración de Kicillof.

"Reconocemos el esfuerzo que hace la policía y la legitimidad del reclamo. Esperamos que el conflicto se encauce en el diálogo", afirmó un jefe comunal peronista que también vio alguna réplica de las protestas en su distrito y que coincide en parte en la mirada sobre el manejo político de la fuerza.

"Es algo más profundo que lo salarial, tiene que ver con las condiciones en las que prestan servicio: patrulleros destartalados, falta de elementos de seguridad, de barbijos. Y un trato medio militar de Sergio Berni, que ya le había traído problemas con Prefectura y Gendarmería anteriormente", sostuvo.

Otro intendente del PJ ve "una situación enrarecida", en la que se enmarca la protesta. "Hay una serie de acontecimientos que me hacen pensar que hay un grupo que intenta generar malestar en la sociedad. Existe oposición buena y mala", señaló.

Una protesta y un peligroso precedente, con la sindicalización como mar de fondo

"Están muy atrasados en sueldos, ganan menos de $40.000; las horas extras, que las había congelado [la exgobernadora, María Eugenia] Vidal, quedaron igual, en $40 o $50. Es inhumano el trabajo que hacen y están en la trinchera", aseguró, y se enfocó en el ánimo de los efectivos: "Es momento de cuidar a los policías. Sienten una presión tremenda por los reclamos de seguridad, que no son solo políticos, son reclamos directos hacia ellos también. Desde lo espiritual, están de brazos caídos. Reciben todos los palos y no llegan a fin de mes".

En otro de los distritos del Gran Buenos Aires gobernados por el justicialismo, el intendente contó que "un cuarto de la policía" se movilizó en el reclamo y que "la policía local debió cubrir las cuadrículas [de patrullaje]".

Si bien señaló que "en toda manifestación puede haber algo de política", resaltó que "el conflicto se solucionará, no pasará del fin de semana".

En La Matanza se concentró la mayor cantidad de policías
Fuente: LA NACION - Crédito: Ignacio Sánchez

Los uniformados protestaron en muchos distritos del conurban o, pero también extendieron el reclamo al interior bonaerense. La movida que el lunes comenzó en Adrogué, partido de Almirante Brown, y en La Plata se multiplicó ayer y las movilizaciones se mantuvieron en algunos municipios incluso horas después de que el gobierno bonaerense prometiera un inminente aumento salarial.

Los intendentes vieron con preocupación que en varios distritos los focos de las manifestaciones policiales se concretaron en las plazas centrales, donde generalmente se ubican sus propios despachos.

A pocos días del lanzamiento de un plan de seguridad focalizado en el conurbano, los jefes comunales esperan la resolución de este conflicto para que se pueda avanzar con las medidas anunciadas.ß