Prohibición de superyates: Nápoles prohíbe las embarcaciones de más de 75 metros

Prohibición de superyates: Nápoles prohíbe las embarcaciones de más de 75 metros

Nápoles prohíbe los superyates, lo que ha provocado la decepción de los multimillonarios.

El puerto de Nápoles ha restringido este verano la entrada a determinados barcos, prohibiendo las embarcaciones que superen los 75 metros de eslora.

Algunos administradores portuarios han expresado su frustración por la norma, introducida por motivos de seguridad.

"Hay normas y las respetamos, pero en este caso hay que señalar que las repercusiones de esta disposición son considerables", declaró a Italy24 Massimo Luise, uno de los administradores del muelle de Mergellina.

"Es una pena para Nápoles, que es una ciudad especial llena de cultura y tradición (...) que ya no pueda acoger a invitados de la talla de Leonardo DiCaprio, Johnny Depp, Jeff Bezos y Jennifer López".

Bernard Arnault -el segundo hombre más rico del mundo, con un patrimonio neto de 140 000 millones de euros- fue uno de los primeros en incumplir la nueva normativa.

El Symphony, de 101 metros de eslora y seis cubiertas, quedó varado en el mar Tirreno la semana pasada, después de que se comunicara a la tripulación que no se le permitiría atracar en la ciudad del sur de Italia.

El magnate de la moda -director general de la empresa de artículos de lujo LVMH y cofundador de Louis Vuitton- tendrá que entretenerse a bordo. Por suerte, no le faltarán opciones, como un cine al aire libre y una piscina con fondo de cristal.

Según el Corriere della Sera, el magnate de los medios de comunicación Barry Diller también ha renunciado a Nápoles como destino de vacaciones.

La nueva restricción se aplicará por primera vez esta temporada de verano.

Arnault también ha vendido su jet privado

No es la primera vez que Arnault se enfrenta a impedimentos para viajar a manos de los menos pudientes.

El año pasado, el empresario francés vendió su jet privado tras ser perseguido por activistas del clima en Twitter.

"63 multimillonarios franceses emiten tanto CO2 como el 50% de la población", escribió la cuenta 'I Fly Bernard' responsable del seguimiento.