Profesionales que no pueden ejercer en EEUU recibirán ayuda de programa coordinado en Miami

Los médicos extranjeros que no pueden ejercer en Estados Unidos porque no han podido completar el proceso de reválida tienen ahora la oportunidad de sumarse a un proyecto que los llevaría a Latinoamérica a trabajar en comunidades necesitadas, al mismo tiempo que cumplen los requisitos para recuperar su profesión en la Florida.

“El programa tiene varios objetivos: ofrecer una respuesta al sistema de esclavitud establecido por el gobierno cubano de usar a sus médicos, enfermeros y profesionales de la salud para generar dinero, y al mismo tiempo ayudar a los médicos y a las comunidades”, dijo a el Nuevo Herald el médico cubano Julio César Alfonso, fundador y presidente de Solidaridad sin Fronteras (SSF), una organización sin fines de lucro que impulsa la reinserción laboral de inmigrantes profesionales de la salud en el sistema médico de Estados Unidos.

La iniciativa, impulsada además por Green Cross Team, una organización sin fines de lucro que brinda asistencia médica en lugares desfavorecidos, se propone ayudar tanto a los médicos cubanos que han llegado recientemente a Estados Unidos como a los que se beneficiaron del Cuban Medical Professional Parole (CMPP), establecido en el 2006 para los médicos que escapaban de las misiones cubanas durante la administración de George Bush y eliminado por el gobierno de Obama en el 2017.

“Se estima que entraron más de 21,000 profesionales con el parole, y hay más médicos en esta situación porque siguen entrando”, dijo Alfonso, explicando que uno de los retos de los médicos para completar el proceso de reválida, incluso aunque hayan pasado los difíciles exámenes en Estados Unidos, es encontrar un lugar donde hacer su residencia.

El anuncio del programa, que podría beneficiar a 33,000 médicos a reinsertarse en Estados Unidos, se hizo el 6 de marzo, en una conferencia de prensa en Miami, en la que profesionales afectados por las misiones cubanas ofrecieron sus testimonios.

“Vamos a hacer convenios con países de Latinoamérica para enviar a esos profesionales, que están preparados para hacer misiones internacionales y que están subutilizados”, dijo Alfonso a el Nuevo Herald explicando que los médicos no tienen que tener la reválida, sino que pueden empezar en el programa con el título y la transcripción de sus notas académicas.

Programa para ayudar a médicos extranjeros a revalidar

El programa para enviar médicos desde la Florida a Latinoamérica puede beneficiar a galenos venezolanos, nicaragüenses, colombianos y de otros países que se encuentren en una situación similar.

El Senado de la Florida aprobó en enero la ampliación de una ley sanitaria para paliar la escasez de profesionales de la salud. El proyecto de ley incluye la posibilidad de que los médicos titulados en el extranjero no tengan que hacer residencia si han estado practicando la medicina durante cuatro años antes de su presentación para una licencia de la Florida.

“Este programa de mandar médicos facilita uno de los requisitos que pide el Senado, el de haber estado por los menos cuatro años antes ejerciendo su profesión, algo que es imposible para una persona que vive en Estados Unidos, sin hacer la reválida”, puntualizó Alfonso, indicando que conoce por lo menos a 100 profesionales que han pasado la reválida pero no los aceptan en programas de residencia.

“Eso ha tronchado a muchos que han hecho el examen y están sin trabajar”, dijo Alfonso, que se graduó de Medicina en 1992 pero el gobierno cubano no lo dejó ejercer por cuestiones políticas.

En el 1999 llegó a Estados Unidos después de cumplir condena como preso político y en el 2004 fundó Solidaridad sin Fronteras.

“Cuba me niega el título y las notas”, dice Alfonso, que no puede ni siquiera revalidar y se ha dedicado a negocios relacionados con la medicina como las clínicas.

Programa ayudaría a médicos ‘esclavizados’ por Cuba

El programa no solo va dirigido a los médicos de la Florida con título del extranjero, también podría servir a los médicos que el gobierno cubano manda a misiones en el exterior, dijo Alfonso, indicando que las misiones médicas son un negocio lucrativo para el gobierno cubano y en la actualidad el principal renglón de exportación del país.

Según cifras oficiales del gobierno cubano, la exportación de profesionales a diversos países durante 2022 rindió ganancias a La Habana por $4,882 millones, superior a 2020 y 2021. La cifra representa más de lo recaudado por la pesca, la minería, el azúcar y el tabaco juntos.

Los médicos de las misiones tienen que entregar entre el 75% y el 90% de lo que ganan al gobierno cubano, que les congela además una parte de su salario hasta el regreso, según han denunciado a organizaciones internacionales como la ONG Prisoners Defenders. Human Rights Watch los considera “esclavos modernos” y la ONU califica las misiones médicas en el exterior como “trabajo forzoso”.

Solidaridad sin Fronteras lleva años condenando estas condiciones de esclavitud, pero no quieren que las comunidades y países que reciben a los médicos enviados por el gobierno cubano enfrenten un vacío que afecte la atención sanitaria, dijo Alfonso.

“Los que van a ir son los médicos que mandó Cuba en otro momento, los mismos que han estado trabajando en esos países de Latinoamérica, pero sin ser esclavos, cumpliendo las leyes laborales internacionales que regulan este trabajo”, precisó Alfonso, indicando que esperan que muchos médicos que están en las misiones de Cuba se unan al programa, como ha ocurrido en ocasiones anteriores cuando han prestado servicios en países afectados por desastres naturales.

El programa comenzaría en los próximos meses enviando un grupo de evaluación compuesto por cinco a 12 médicos, que analizarían las necesidades del lugar para saber qué especialistas y profesionales se necesitan. En un principio, esperan llegar a El Salvador, Honduras, República Dominicana, Colombia y Haití.

“Los gobiernos pagarían los contratos, los mismos contratos que hacen con Cuba, pero entonces sería a través de este programa”, dijo Alfonso.

Los médicos trabajarían en grupos rotativos durante 21 días a tres meses, después regresarían al sur de la Florida para más adelante servir en otros lugares hasta que cumplan el tiempo para obtener su licencia.

Alfonso dijo que el programa también cumpliría el objetivo de frenar el “proselitismo político” que ejercen las misiones enviadas por el gobierno cubano, que “infiltra agentes de inteligencia disfrazados de médicos”.

Esteban Lazo, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, reconoció en una comparecencia en la isla: “Hemos cumplido misiones en 154 países con más de 600,000 médicos”. Lazo viajó a Kenia en febrero para indagar sobre la muerte en Somalia de dos médicos cubanos, que estaban secuestrados por terroristas desde el 2019.

Para información sobre el programa: www.gcteam.org y www.ssfhelp.org