La medalla que condenará a la monarquía británica

WINDSOR, ENGLAND - APRIL 17: Peter Phillips and Prince Andrew, Duke of York during the funeral of Prince Philip, Duke of Edinburgh at Windsor Castle on April 17, 2021 in Windsor, England. Prince Philip of Greece and Denmark was born 10 June 1921, in Greece. He served in the British Royal Navy and fought in WWII. He married the then Princess Elizabeth on 20 November 1947 and was created Duke of Edinburgh, Earl of Merioneth, and Baron Greenwich by King VI. He served as Prince Consort to Queen Elizabeth II until his death on April 9 2021, months short of his 100th birthday. His funeral takes place today at Windsor Castle with only 30 guests invited due to Coronavirus pandemic restrictions. (Photo by Chris Jackson/WPA Pool/Getty Images)
Andrés recibirá una medalla de honor de Isabel II en pleno escándalo de abusos sexuales (Photo by Chris Jackson/WPA Pool/Getty Images)

Mientras el mundo sigue consternado con el escándalo de la red de pederastia organizada por Jeffrey Epstein, parece que la institución monárquica de Reino Unido continúa haciendo oídos sordos ante una polémica que les está estallando en la cara.

Hace pocos días informamos de que los abogados de la presunta víctima del príncipe Andrés le habían entregado la notificación legal pertinente a la denuncia que ella interpuso recientemente contra él.

Mediante un guardia de Windsor Andrés recibió dicha notificación de Virginia Giuffre que le acusa directamente de abuso sexual cuando ella era menor de edad y en más de una ocasión. Andrés ya negó la mayor y fue apartado de la vida pública pero, inexplicablemente, la casa real británica le sigue apoyando.

Hace ya meses que Isabel II debería haber emitido un comunicado de rechazo hacia las actitudes de las cuales acusan a su hijo. No digo que le tenga que inculpar porque se debe guardar su presunción de inocencia pero de ahí a quedarse callada, hay un trecho.

Por si esto fuera poco, la monarca no le ha despojado de su título de duque de York y lo más fuerte del asunto llega ahora, con la celebración de sus 70 años de reinado. Dichos festejos se celebrarán el 2 de junio de 2022 si todo va bien pero ahora, el uno de octubre, Isabel II repartirá una serie de medallas al Honor.

¿Sabes quién recibirá una de esas medallas? ¡Pues el príncipe Andrés! Desde luego, cuesta comprender en qué está pensando la reina o su equipo de asesores para entregarle justo ahora, en plena polémica por un tema tan serio como el abuso sexual, una medalla honorífica.

Estas medallas son entregadas a miembros de la Casa Real y también a parte del personal de Palacio pero, en esta ocasión, el príncipe Andrés no debería figurar en la lista, por lo menos, hasta que no se esclarezca el escándalo con Virginia que se tratará en las próximas semanas en la corte de Nueva York.

Parece que es cierto eso de que Andrés es el ojito derecho de Isabel II que, a toda costa, quiere demostrar la valía de su hijo aún cuando el pueblo está receloso por las acusaciones que pesan sobre él.

Abusar de una menor es un delito muy grave y, con una denuncia interpuesta, dudo mucho que a la monarquía le favorezca en absoluto “premiar” a Andrés con una medalla honorífica aunque sea un acto puramente conmemorativo.

No es el mejor momento ni el más adecuado para que el príncipe Andrés reciba dicha mención dado que es, a mi modo de ver, un gesto claro de la reina diciendo sin decirlo que le apoya pase lo que pase y digan lo que digan.

Por el momento solo hay una cosa clara, Virginia cuenta con una fotografía junto a Andrés y la socia de Epstein por aquel entonces que también está imputada en la red de corrupción de menores. Giuffre además cuenta con un testimonio desgarrador y un testigo, empleado de la mansión de Epstein en aquel momento, que asegura haberles visto muy juntos.

Tras las declaraciones de Harry y Meghan sobre el racismo y la exclusión sufridas por ellos y por Archie en el seno de la familia Real británica, tanto Carlos como Guillermo salieron en defensa de la institución asegurando que no existe racismo alguno. Entonces, ¿por qué nadie es igual de contundente a nivel público a la hora de negar los presuntos abusos de Andrés a Virginia?

O, a muy malas, si han optado por el silencio hasta que se resuelva el proceso legal, al menos tener la decencia de no darle ninguna medalla honorífica a Andrés, ya por empatía con la posible víctima y por la ofensa que esto puede suponer y supone de cara al pueblo.