Por qué las enfermeras que luchan contra el coronavirus en Wuhan se están rapando la cabeza

Un número cada vez mayor de enfermeras desplegadas por las autoridades chinas en la ciudad de Wuhan, epicentro de la epidemia del coronavirus, están tomando la decisión de raparse la cabeza para reducir el riesgo de propagación de la enfermedad.

Captura de pantalla de video de Xinhua China
Captura de pantalla de video de Xinhua ChinaXinhua China

Afeitarse la cabeza es uno de los sacrificios que el personal médico de China hace mientras se dirige a la primera línea de combate contra el virus que ya ha infectado a miles de personas en todo el mundo.

Según la cobertura especial de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad ya ha causado más de mil muertes, mientras que el resto se registró en China continental. Ha sido bautizada oficialmente como Covid-19.

El 99% del total de casos confirmados a nivel mundial se encuentran en China. La provincia de Hubei, donde se encuentra la ciudad de Wuhan, reportó el 74% de las personas infectadas, así como el 96% de las muertes en el país.

En medio de las alarmantes cifras, un video publicado en Twitter por el diario estatal People's Daily, el periódico más grande de China, muestra a las enfermeras de la provincia de Shaanxi afeitándose la cabeza antes de ser enviadas a Wuhan.

“¡Respeto! Un equipo de enfermeras al noroeste de China, Shaanxi, se afeitó el cabello antes de entrar en servicio en medio de un brote de coronavirus para evitar la infección cruzada”, reseñó el diario.

La infección cruzada se produce cuando se transmiten microorganismos infecciosos entre los pacientes y el personal médico en un entorno clínico. La transmisión puede ser el resultado del contacto directo, persona a persona, o indirecto mediante objetos contaminados.

Además de limitar las formas en que los agentes patógenos pueden propagarse, raparse el cabello también facilita a las enfermeras la acción de colocarse y quitarse los trajes protectores, así como las mascarillas, según informó un video publicado por la agencia oficial de noticias Xinhua de China.

En este último material, las enfermeras se quitan la capucha del abrigo para revelar la cabeza rapada, mientras sonríen a la cámara y muestran el dedo pulgar.

Las enfermeras y el resto del personal médico del hospital en Wuhan explicaron que deben hacer todo lo posible para ahorrar tiempo y tratar la mayor cantidad de pacientes. Algunos usan pañales para adultos, en lugar de tomar un descanso para ir al baño.

Además del cansancio, el estrés y el riesgo de exposición al contagio, el virus también afecta a doctores, enfermeras y técnicos incluso si no se contagian. Muchos terminan la jornada con profundas marcas en el rostro por las mascarillas, así como irritaciones en la piel provocadas por el uso constante de desinfectantes.

El costo emocional también es evidente. Otro video que se hizo viral en las redes sociales a principios de este mes muestra a una enfermera despidiéndose de su hija con un “abrazo en el aire”, ya que tienen recomendado no hacer contacto físico mientras tratan a pacientes en cuarentena.

En el emotivo material, la niña de nueve años llora porque no puede abrazar a su madre, que trabaja en un hospital de Fugou (Henan, China) y está en cuarentena. “Mamá, te extraño mucho”, dice la pequeña en el video.

La niña había ido con su padre a visitar a la enfermera Liu Haiyan después de más de una semana sin verla. Al no poder acercarse, ambas imitaron un abrazo a distancia, separadas por varios metros.

“Mamá está luchando contra monstruos”, dijo Liu en el video. “Y regresará cuando sean derrotados”, agregó mientras recogía el almuerzo que su hija le había llevado y que debió dejar en el piso.