Yahoo Noticias Pitón birmana capturada mientras devoraba un venado indica que buscan presas más grandes en los Everglades
Un equipo de científicos encontró a una pitón birmana de 15 pies tragándose un venado de “gran tamaño” en el suroeste de la Florida, lo que no hace sino demostrar que estos invasivos depredadores están emboscando y devorando a presas cada vez más grandes.
La pitón birmana pesaba 115 libras y el venado pesaba 77 libras, lo que equivale al 66.9 por ciento de la masa corporal de la serpiente, de acuerdo con el estudio recientemente publicado: “Grandes pitones, grandes bocas y grandes presas”.
“Este animal utilizó su cuerpo para agarrar las patas traseras del venado y meterlo a la fuerza en su cuerpo. Era como si la pitón estuviera metiendo el venado en su boca como si sacara el corcho de una botella” le dijo a McClatchy News, Ian Bartoszek, biólogo de la organización Conservancy of Southwest de la Florida y coautor del estudio.
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El extraordinario episodio se pudo observar en diciembre de 2022 entre Naples y la Reserva Nacional Big Cypress, y salió a la luz cuando los coautores del estudio Bartoszek, Ian Easterling y el Dr. Bruce Jayne publicaron sus trabajos en la revista científica Reptiles & Amphibians.
Tres pitones birmanas, con tamaños de entre 15 y 19 pies, se incluyeron en la investigación y las tres tenían una apertura —el tamaño máximo que la boca se puede abrir— de 10.2 pulgadas de diámetro, lo que equivale a una circunferencia de 32 pulgadas, reportó el estudio, es decir un 40% más grande que el diámetro que se midió previamente en pitones capturadas en la Florida. Ello significa que en el menú de las pitones hay fauna silvestre más grande de lo que se pensaba, concluyó el estudio.
“Es casi seguro que todavía no hemos capturado a la pitón más grande de la Florida”, según Jayne, que trabaja en el Departamento de Ciencias Biológicas de la Universidad de Cincinnati en Ohio.
“De modo que es perfectamente posible que una pitón, cuyo tamaño podría romper un récord, pueda abrir la boca hasta un diámetro de 30 centímetros y devorar a un venado de 120 libras”.
CAZADORA DE VENADOS
Una pitón macho a la que se le instaló un transmisor de radio condujo a Bartoszek y a su equipo del Conservancy of Southwest Florida hasta la hembra que se estaba dando un festín.
Marcas de perforación indican que la pitón emboscó al venado con una mordida en el cuello y luego se le enroscó alrededor del cuerpo hasta que no pudo luchar más y lo asfixió.
La serpiente empezó tragándose la cabeza y tenía medio cuerpo del venado en el estómago cuando llegaron los expertos, agregó Bartoszek. “Nos observó brevemente y tras darse cuenta de que no la íbamos a molestar, continuó tragándoselo”, agregó. “Posiblemente se demoró menos de una hora para capturar y devorar a este venado. En mi experiencia de biólogo, es el episodio más impresionante e intenso que he visto. No hizo sino recordarme el formidable depredador que estamos enfrentando”.
Fue también el último almuerzo de la pitón.
Después que la pitón terminó, el equipo la obligó a vomitar al venado, en tanto Bartoszek la exprimía como si fuera un tubo de pasta dental y Easterling halaba las patas del venado para sacarlo.
Esto se hizo para poder recoger información del venado y de la serpiente, y también para que resultara más fácil llevar al reptil al laboratorio.
“Si hubiéramos llegado cuando el venado estaba aún vivo, habríamos intervenido y salvado al venado”, dijo Bartoszek. “Pero estaba muerto y solo esperábamos a que lo vomitara”.
MUCHAS SORPRESAS
No fue solo el tamaño del venado lo que asombró a los científicos. El incidente ocurrió durante el invierno, cuando se supone que las pitones están “más tranquilas”, y eran las 10:30 a.m., lo que contradice la idea de que las pitones son cazadores nocturnos, según las autoridades.
“Me recuerda lo oportunistas que son estos reptiles. No podemos subestimar a las pitones birmanas. Matarán y comerán incluso a los animales que son difíciles de tragar”, agregó Bartoszek.
Las pitones pueden estirar las bocas porque sus mandíbulas inferiores no están fundidas en el frente y su piel es elástica, reportó el estudio. Esto les permite tragarse “y consumir una presa seis veces más grande que serpientes de tamaño similar de otras especies”, señaló el estudio.
“Este venado estaba cerca del tamaño de la presa que por lo general comen estas pitones”, dijo Jayne en un parte de prensa fechado el 24 de octubre.
La agencia de conservación ha instalado transmisores en 40 pitones machos y los usan para encontrar a las hembras antes de que depositen los huevos. Cuando las hembras se capturan y sacrifican humanamente, siguiendo las leyes estatales.
Hasta la fecha, Bartoszek y su equipo han eliminado más de 1,000 pitones. Si cada una hubiera comido un venado en su vida, ello equivaldría a más de 13,000 libras de venados, estimó Jayne.
Estas gigantescas serpientes invadieron el sur de la Florida mediante el comercio de mascotas exóticas, y descubrieron rápidamente que la fauna oriunda de la región estaba indefensa. Se sabe que las pitones comen todo lo que encuentren en su camino, desde pequeños caimanes hasta linces, y se cree que se están propagando en zonas más al norte del estado.
Las pitones comen también animales domésticos, como, gallinas cabras y pollos.
“Llevo siguiendo a estas serpientes desde hace 12 años y nunca me he sentido amenazado por ellas ni me ha parecido que una pitón se haya interesado en mí”, dijo Bartoszek.
“Más que nada les interesa nuestra fauna silvestre, que no tiene la menor idea de que esta enorme serpiente puede ser una amenaza. Estos animales son completamente vulnerables”.
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Traducción de Jorge Posada
