En la pista no hay género, sólo pilotos

CIUDAD DE MÉXICO, febrero 24 (EL UNIVERSAL).- Desde que era una niña, Regina Sirvent sabía que lo que quería hacer era dedicarse al automovilismo. Su abuelo, José Sirvent, fue ganador del Campeonato Mexicano de Rally en 1974 y, si bien ella aún no nacía, no cabe duda que la velocidad corre en la sangre de la familia.

Ahora, es trabajo de Regina mantener el apellido vivo en el mundo del automovilismo deportivo. Ha sido un camino retador para la piloto de 21 años, quien demuestra cada vuelta que no hay hombres ni mujeres, sino pilotos.

Actualmente, compite en el serial de NASCAR, Challenge México, y también forma parte del programa Drive for Diversity.

Un juego. "Yo tenía mi carrito de baterías y me encantaba ponerme lentes y manejar por todos lados", comenta Regina. A los nueve años le regalaron un kart. A partir de ahí se comenzó a escribir su carrera en el automovilismo.

A los 14 años se subió por primera vez a un coche del Trophy México Series. "Todo pasó tan rápido. Hice la prueba un mes antes de arrancar la temporada y, dos semanas después, ya estaba buscando patrocinadores para que me apoyaran a correr", y empezó su prometedora carrera que la tiene como la primera mujer mexicana en NASCAR Drive For Diversityu de Estados Unidos.