Roma y Bologna jugaban en la capital italiana un duelo clave por la fecha 33 de la Serie A. Los visitantes se quedaron con un triunfo importantísimo ante la Loba. Fue 3 a 1 y con tres golazos. El primero, con una pirueta de Oussama El Azzouzi, que tras la celebración de su tanto, el mediocampista tuvo un encontronazo con Paulo Dybala. El segundo, un tanto el que el equipo tuvo la pelota más de un minuto y medio de posesión. Y el último, de emboquillada. Bologna es la sorpresa de este campeonato y se estaría asegurando el ingreso a alguna de las competencias internacionales.

Se disputaban 14 minutos de la primera etapa y Bologna controlaba la posesión de la pelota. Tras una acción colectiva de muchos pases, el balón le quedó a Riccardo Calafiori, que estaba abierto por el sector izquierdo. El lateral envió el centro al área de zurda y de primera. Allí estaba El Azzouzi que entre tres futbolistas de Roma realizó una pirueta espectacular, colocándola contra un palo para establecer el 1 a 0 parcial.

Una verdadera joya del neerlandés que festejó el gol con todos sus compañeros, realizando algunas señas a la tribuna donde están los hinchas de Bologna. Sin embargo, los gestos parecieron no caerles bien a los jugadores del equipo local y uno de los primeros que fue a empujar a El Azzouzi fue Paulo Dybala. El argentino, primero le dio una cachetada y después lo siguió buscando mientras era separado. Luego se le sumaron otros futbolistas del equipo de la capital, pero el autor del gol fue defendido por sus compañeros. Finalmente, el árbitro Fabio Maresca separó el tumulto, pero sin amonestar a nadie.

Luego de un tiro libre en el palo a los 41, Bologna iba a comenzar a tejer el segundo tanto. Un lateral desde la derecha lo sacó Stefan Posch cuando el cronómetro marcaba 43.10. A partir de ahí los futbolistas visitantes dieron 35 pases en un minuto y 33 segundos de posesión del balón. Joshua Zirkzee la tomó en el área, enganchó y le pegó al arco. La pelota se metió despacio cuando el reloj marcaba a los 44.43 tras la tapada estéril del arquero local. Un verdadero golazo que significaba el 2 a 0.

Roma luchó desde el inicio de la segunda etapa. Daniele de Rossi decidió hacer tres cambios a los seis minutos y los 10, logró el descuento. Tras un gran centro de Lorenzo Pellegrini, Sardar Azmoun, uno de los que había ingresado, cabeceó al arco, pero tapó Lukasz Skorupski. El rebote volvió a quedarle al iraní y el arquero de Bologna volvió a atajar. La tercera fue la vencida. El delantero finalmente pudo empujarla para poner el descuento.

Sin embargo, los visitantes se recuperaron y volvieron a hacerlo con otro golazo. Cuando se disputaban 20, Paulo Dybala se tropezó y perdió el balón a la altura de la mitad de la cancha. Finalmente, el colombiano John Lucumí tocó de inmediato con El Azzouzi. Éste jugó con Zirkzee que de primera habilitó a Alexis Saelemaekers. El belga enfrentó a su compatriota Svilar y se la picó por encima. Era el 3 a 1, que iba a ser definitivo, con celebración de cara a su público. Una gran muestra de fútbol del equipo de Thiago Motta en el Olímpico de Roma.

Bologna se llevó una gran victoria en un partido en el que ambos equipos se jugaban puntos muy importante de cara al ingreso a las copas internacionales. Los visitantes, con la victoria, se ubicaron en el cuarto lugar de la tabla de posiciones con 62 unidades, obteniendo, por ahora, el último boleto a la próxima Champions League. Además, una campaña soñada con 17 triunfos, 11 empates y cinco derrotas.

Roma, por su parte, quedó quinto y con 55 puntos se está clasificando a la Europa League de la temporada que viene. Pero los de la capital volvieron a caer por la Serie A tras más de dos meses. Su última derrota había sido el 10 de febrero ante Inter. Luego cayó en el desquite de octavos de final de la Europa League ante Brighton, en Inglaterra. Sin embargo, desde que asumió Daniele de Rossi a fines de enero sólo cayó tres partidos, ganó 11 y empató cuatro. Ahora buscarán consagrarse campeones de la Europa League, competencia en la que están en semifinales y se medirán ante Bayer Leverkusen.

En el partido, además de Dybala, Leandro Paredes fue titular en el equipo de Daniele De Rossi. El volante central recibió la tarjeta amarilla a los cinco minutos del partido. En el visitante, Santiago Castro, exVélez Sarsfield, comenzó el duelo desde el banco de suplentes e ingresó por Zirkzee, tras el tercer gol. El joven de 19 anotó un gol, pero se lo anularon por la posición adelantada de un compañero.

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