El periodista José Rubén Zamora cumplió dos largos años habitando una celda de castigo en Guatemala

El guatemalteco José Rubén Zamora evoca el destino de Josef K. de la novela 'El Proceso' de Kafka, la historia de un hombre que es oprimido y anulado por el sistema. A Zamora lo capturaron la noche del 29 de julio de 2022, sin saber de qué lo acusaban como le ocurrió al personaje ficticio; dos años después, la ONU manifestó que la detención de Zamora fue arbitraria, pero el sistema judicial de Guatemala se resiste a liberarlo.

El hijo mayor de José Rubén Zamora, de tanto en tanto, contesta el teléfono y escucha una grabación que le hiela el pecho: “Usted está recibiendo una llamada de la cárcel Mariscal Zavala”. Del otro lado de la bocina está su padre, quien lo llama desde un teléfono público en la prisión militar de Ciudad de Guatemala, reservada para confinar reclusos de alto perfil.

Sin embargo, su gran reto sigue siendo un libro que no ha podido descifrar: 'Ulises', de James Joyce. Según le ha contado a su hijo, es la obra que nunca logra terminar, “es un texto imposible, ni en prisión se puede entender”.

Y si la literatura le afina el intelecto, el ejercicio lo desentumece del recogimiento en su celda de aislamiento. Camina a toda velocidad, una hora al día, en un pequeño patio conectado a su celda, dando unas mil vueltas para completar la marca de al menos 5 kilómetros.

Los perros husmeaban sus libros, así como una hielera donde conserva la comida que sus familiares le hacen llegar dos veces por semana. Según José Carlos Zamora:

Una tortura que su hijo José Carlos explica sencillamente: