Nueva perimetral para Fabián Tablado: ahora no se podrá acercar al padre de Carolina Aló

Tablado no podrá acercarse al padre de su víctima

La Justicia emitió hoy una nueva orden de restricción perimetral para que Fabián Tablado, el femicida que en 1996 asesinó de 113 puñaladas a su novia Carolina Aló, no pueda acercarse a menos de 500 metros del domicilio de Edgargo Aló, padre de la víctima, informaron fuentes judiciales.

La medida fue dictada por la jueza de Familia 2 de Tigre, Silvia Sendra, la misma que ya había impuesto para Tablado una perimetral para que no se acerque a su ex mujer ni a sus hijas y para monitorearlo le colocó una tobillera electrónica, quien además ordenó que el ex convicto realice un curso para "hombres que ejercen conductas violentas en la pareja".

En el primer punto dispositivo del fallo -al que tuvo acceso la agencia Télam-, la jueza ordena "imponer a Fabián Gerardo Tablado la prohibición de acercarse a menos de quinientos (500) metros del Sr. Edgardo Héctor Aló en cualquier lugar que éste se encontrase".

"Queda asimismo expresamente prohibido al denunciado, acercarse a menos de quinientos (500) metros del domicilio o lugar de trabajo del denunciante, aún en su ausencia, bajo apercibimiento de aplicarle las sanciones correspondientes", agrega.

Sendra también le ordena a Tablado "abstenerse de realizar actos de violencia, perturbación o intimidación, mediante cualquier modalidad (telefonía, Internet, valiéndose de terceras personas, etc.)".

La resolución también confirma que el femicida volvió a vivir en la casa donde hace casi 24 años asesinó a su novia, ya que el segundo punto ordena "notificar al accionado en su domicilio de la calle Albarellos 348 de Tigre", lugar donde siempre continuaron viviendo sus padres y donde el 27 de mayo de 1996 se cometió el femicidio.

La perimetral impuesta es por "180 días a partir de su notificación a ambas partes y será prorrogable en el supuesto de que perdure la situación denunciada".

Como medida extra, la jueza Sendra también ordenó que Tablado "deberá concurrir al Programa Psicoeducativo para Hombres que Ejercen Conductas Violentas en la Pareja" y "acreditar dentro de las 48 horas su concurrencia, solicitando a tal fin en el organismo un certificado de asistencia".

113 puñaladas en Tigre

El homicidio de Aló ocurrió el 27 de mayo de 1996 en la casa de la familia Tablado, situada en Albarellos 348, de Tigre. La víctima, de 17 años, estaba de novia con Tablado e iban juntos al turno noche de la Escuela N°1 Marcos Sastre, también en Tigre.

El día del crimen, alrededor de las 22, la pareja dio distintas excusas en la escuela para poder salir antes. Tablado y Aló fueron a la casa de Albarellos 348, donde no había nadie.

Allí, según declaró el condenado, tuvieron relaciones sexuales y luego se inició una discusión que culminó con el homicidio.

Según lo que se pudo reconstruir judicialmente, Tablado persiguió a Carolina por varios ambientes de la casa -escaleras, cocina y garaje- y la mató de 113 puñaladas aplicadas con cuatro armas blancas halladas en la escena: una cuchilla de cocina, dos cuchillos de mesa tipo Tramontana y un formón de carpintería.

Tablado se escapó, le confesó lo sucedido a un amigo y se fue a esconder debajo del puente de la calle Tedín, en Tigre, a unas 20 cuadras del lugar del crimen y a seis de la escuela, donde unas horas más tarde la policía lo detuvo.

El juicio se realizó en 1998 y la polémica giró en torno al planteo de la defensa, que sostenía la inimputabilidad de Tablado y solicitaba que, al menos, debía condenárselo a una pena reducida porque había actuado en "estado de emoción violenta".

Como en aquella época no existía la figura del femicidio, y para aplicar una pena de prisión perpetua en un crimen de pareja, la víctima y el victimario tenían que ser necesariamente cónyuges, la fiscalía y la querella acusaron por la figura del homicidio agravado por alevosía.

Los peritos concluyeron que Tablado tenía personalidad psicopática y que había comprendido la criminalidad de sus actos. En un fallo dividido, por dos votos a uno, la Sala III de la Cámara Penal de San Isidro condenó a Tablado a 24 años por homicidio simple y así evitó la prisión perpetua.

Tablado gozó de salidas transitorias en 2008 y 2011, pero por distintos motivos le fueron revocadas. A fines de 2012, la Cámara de Apelación y Garantías de San Isidro le negó la libertad condicional al tener en cuenta "su inestabilidad emocional".

El femicida tuvo varias novias estando preso e incluso en 2006 llegó a casarse en el penal de Florencio Varela con una de ellas, una docente llamada Roxana Villarejo, con quien tuvo mellizas, pero la relación no prosperó y se separaron.

Esa mujer lo denunció por maltrato psicológico y por amenazas telefónicas, tanto a ella como su madre y, en un juicio abreviado que terminó el 21 de noviembre de 2013 el juez en lo Correccional de San Isidro Facundo Ocampo condenó a Tablado a otros dos años y medio de prisión, lo declaró reincidente y le fijó una pena única de 26 años y 6 meses de prisión.

Pero el beneficio de la derogada Ley del "2x1" y los cursos que hizo en prisión como "estímulo educativo" hicieron que la pena del femicida se diera por concluida el 28 de febrero de 2020.