Yahoo Noticias ¿Perdió su bebida, sus dientes o su gorra de Trump en el aeropuerto de Miami? Hay una forma de encontrarlos
Es la pesadilla del viajero: usted llega tarde para tomar su vuelo, así que se apresura a documentar y a pasar el control de seguridad, corre hasta la puerta de embarque y apenas consigue entrar en el avión cuando se cierra la puerta. ¡Uf! Pero cuando el vuelo alcanza la altitud de crucero se mete la mano en los bolsillos y empieza a cundir el pánico.
¿Dónde está mi tarjeta de crédito? ¿Mi cartera? Dios mío, ¡mis dientes!
En el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA), Evelio Zuriarrain, supervisor de operaciones de la terminal, y su personal pueden ayudarle a superar ese calvario.
La oficina de Objetos Perdidos del aeropuerto de Miami está lejos de la vista, escondida en el cuarto piso del Vestíbulo D. Pero puede ser un salvavidas.
Entre y verá docenas de estanterías con miles de objetos personales olvidados: teléfonos móviles, bolsos y todo lo demás. Encontrará cosas comúnmente olvidadas, como mantas o paraguas. Pero también botellas de licor compradas en tiendas libres de impuestos en Haití y Nicaragua, un libro de oraciones en hebreo, incluso el andador de alguien. También hay cientos de gorras de béisbol, incluida una de MAGA, y un sorprendente número de maletas y computadoras portátiles.
Con las vacaciones de invierno en marcha, el aeropuerto de Miami espera un aumento de pasajeros. El MIA estima superar el récord del año pasado de 50.7 millones de pasajeros a finales de 2023.
Pero ese no es el único récord que espera empatar o batir antes de que acabe el año.
Hasta noviembre, Objetos Perdidos había catalogado 36,800 artículos. En comparación, en todo el año 2022, registró 41,800 objetos.
Zuriarrain, en una entrevista con el Miami Herald dijo: “Creo que vamos a llegar a ese número o superarlo este año.” El máximo del aeropuerto de Miami antes de la pandemia fue de 38,500 artículos.
Entre las funciones de Zuriarrain está la de supervisar los objetos perdidos del aeropuerto.
El año pasado, en Acción de Gracias, justo cuando Zuriarrain cerraba la oficina para comer con el personal, se presentó una mujer llorando. Tenía que hacer escala en un vuelo que la llevaría al funeral de su padre, donde iba a pronunciar el panegírico. Pero perdió su diario, donde había anotado sus pensamientos. Zuriarrain corrió a la terminal mientras ella esperaba afuera de la oficina de objetos perdidos. Un empleado de la limpieza había encontrado el diario en el baño cercano a la Puerta H-15.
También el año pasado, un concertista de violonchelo que llegó al MIA procedente de Montreal entró en pánico tras perder su laptop, que contenía grabaciones y videos de sus conciertos anteriores. Usando la opción Find Me, detectó que su computadora portátil estaba en algún lugar del Vestíbulo J. Los empleados del aeropuerto y la oficina de objetos perdidos lo localizaron y se lo devolvieron.
El Miami Herald visitó la oficina de Objetos Perdidos del aeropuerto la semana pasada, donde Zuriarrain habló de lo que usted debe hacer si pierde algo y de por qué conviene evitar a terceros para buscar los objetos perdidos.
A continuación, algunos fragmentos:
¿Hay alguna regla nueva este año en Objetos Perdidos?
No hay normas nuevas, pero con el aumento del uso de la tecnología, ahora hay muchos portales digitales que son legales y son sitios de terceros que se ofrecen a buscar sus objetos perdidos por una tarifa. Si usted entra en su portal, le costará unos $40. Es básicamente una tarifa por nada porque lo que hacen es darse la vuelta y presentar un reporte de reclamación de objeto perdido con nosotros.
Quiero dejar claro que el Aeropuerto Internacional de Miami no cobra nada por presentar una reclamación, ni por buscar artículos, encontrarlos o almacenarlos. El único caso en que el propietario [del artículo] paga es cuando hay que enviarlo a algún lugar.
Me gustaría que la gente supiera que puede ir directamente a nuestro portal digital. Incluso si viven fuera de Miami o la Florida, pueden presentar una reclamación allí sin costo alguno. En Passenger Info, hagan clic en Lost and Found. También pueden llamar al 1-888-335-0690, nuestro número, y denunciar un objeto a través de ahí.
La gente debe tener cuidado porque cuando buscan en sitios como Google, se dará prioridad a los sitios que generan dinero. Y no necesariamente aparecerá el MIA en los primeros puestos.
¿Cuál es el plazo de conservación de los artículos?
Conservamos los artículos durante 30 días. Eso es lo que permite el estado de la Florida para los aeropuertos. Guardamos las joyas durante 60 días. Después, enviamos los artículos no reclamados a Goodwill.
Recibimos muchas cosas y tenemos un espacio limitado.
¿De dónde reciben los objetos?
Todo lo que se deja dentro del aeropuerto en las terminales principales, en el servicio de transporte de empleados, el centro de alquiler de autos , los autobuses para pasajeros o los estacionamientos. Todo lo que se deja en el avión vuelve a la compañía aérea.
Los controles de la TSA son una gran fuente para nosotros. Recibimos objetos 24 horas después de haberlos dejado allí.
Así que recuerde recoger sus pertenencias.
¿Reciben más artículos de los que catalogan?
Recibimos muchos más objetos de los que podemos catalogar individualmente.
Hay objetos como llaves al azar, sombreros, gafas de sol, lentes, almohadas para el cuello y paraguas para los que es muy difícil localizar al propietario, a menos que tenga una característica distintiva.
Los tenemos todos en nuestra oficina. Así, si alguien dice que ha perdido las llaves, tenemos un contenedor de llaves en el que nuestro personal puede buscar. Lo mismo ocurre con los sombreros, las almohadas para el cuello, etc.
¿Qué objetos se pierden con más frecuencia?
Dispositivos electrónicos, teléfonos, iPads y computadoras portátiles. El artículo más común son los AirPods. Son los más difíciles de encontrar a menos que se pierdan con un estuche.
Nuestro equipo tiene un iPhone a mano y tratamos de sincronizar el dispositivo/estuche con el teléfono para intentar obtener algún tipo de información que podamos usar para intentar ponernos en contacto con el propietario. Pero la mayoría de las veces, los AirPods se pierden.
Si alguien acude y dice que perdió sus AirPods, ¿qué hacen?
Nuestro equipo identificará algunos AirPods en función de la ubicación y la fecha de pérdida e intentará que se sincronicen con el teléfono del propietario. Si hay coincidencia, genial. Si no la hay, lamentamos no haber encontrado el suyo por el momento.
¿Cómo se averigua a quién pertenece un objeto?
Cuando abrimos una maleta, buscamos los datos del propietario para poder ponernos en contacto con él. Si no encontramos la información del propietario, tenemos que buscar lo suficiente para encontrar al menos dos artículos distinguibles. Por tanto, la persona que venga o llame tendrá que describir un par de cosas de la maleta.
Solicitamos algún tipo de identificación, como una licencia de conducir o un documento de identidad . Puede enviárnoslo digitalmente. Puede tomar una foto de su pasaporte con su smartphone y enviarla por correo electrónico.
Normalmente nos aseguramos de que la descripción sea exacta y de que haya un objeto identificable.
Si se trata de un dispositivo electrónico, le pediremos el número de serie o la contraseña, e iniciaremos sesión con ellos. Si hay una imagen de fondo específica en su dispositivo, o el nombre de una empresa, eso ayuda.
¿Cuáles son los objetos más extraños que han dejado olvidados los viajeros?
Había un par de ojos humanos. Supongo que iban deprisa y de alguna manera los dejaron. Creo que los transportaban para un procedimiento quirúrgico, supongo que como un trasplante...”.
Este año, recibimos grillz –dientes de oro– dejados en un puesto de control de la TSA. Un viajero se los había quitado en el control de seguridad.
Un año, tenía una maleta enorme. Cuando la abrí, tenía un montón de diapositivas y un montón de notas, así que tuve que revisarla. Resultó ser la maleta de un científico del comportamiento para el FBI, y tenían un par de maletines allí. Tuve que hojearlo rápidamente para sacar la información de allí.
Era una conferencista o un profesor que enseñaba a otros científicos del comportamiento la metodología para capturar asesinos en serie. Eso fue bastante fascinante.
