Perú tilda de "injerencista" preocupación de EEUU y UE por plan para aumentar control sobre ONG

LIMA (AP) — Perú calificó el viernes de “injerencista” y pidió a representantes diplomáticos de Estados Unidos, la Unión Europea y otras 14 naciones que “sean mesurados” luego de que a inicios de semana expresaron su preocupación por una propuesta que circula en el Congreso para aumentar el control del financiamiento que reciben las organizaciones no gubernamentales.

El canciller Javier González-Olaechea dijo a la radio RPP que "la opinión que han adelantado algunas embajadas tiene un tono injerencista" porque cuando en “otro país se produce un cambio legislativo, el Perú no se pronuncia oficialmente donde está acreditado allí respecto a ese cambio legislativo”.

González-Olaechea dijo que tiene informes de que el proyecto legislativo “copia normas que existen en varios países para los mismos fines de registro y control porque claro, en cualquier país del mundo, las autoridades deben saber de dónde vienen los fondos extranjeros, quiénes lo reciben, con qué finalidad”. No dio detalles de qué países supuestamente se han copiado esas normas.

El canciller también pidió a los representantes extranjeros en Perú que “sean mesurados y que recuerden que el diálogo diplomático siempre está abierto, pero que tienen que conocer, saber y respetar cuáles son las facultades exclusivas y excluyentes de un país soberano”.

No es la primera vez que el canciller se pronuncia sobre las organizaciones no gubernamentales. El 19 de mayo dijo en la televisora local Willax “no me cabe duda de que algunas de ellas tienen agendas políticas desestabilizadoras” y un día después añadió en la televisora N que “parte” de estas organizaciones tuvieron un papel activo en las manifestaciones que exigían la renuncia de la presidenta Dina Boluarte a fines de 2022 e inicios de 2023 que dejaron 50 civiles muertos en medio de las confrontaciones con la fuerza pública.

“Muchas paralizaciones eran por tres o cuatro o cinco o seis días y esa gente recibía dinero importante, cada uno que era movilizado. La pregunta es ¿de dónde salían todos esos millones? ¿Acaso salían de los mismos manifestantes, gente humilde, que eran agricultores, comerciantes a pequeña escala? De ninguna manera”, indicó en aquella oportunidad el canciller a la televisora N.

El lunes en un comunicado conjunto las embajadas de Estados Unidos, la Unión Europea y otras 14 naciones indicaron que “las democracias son más inclusivas, equitativas, estables y prósperas cuando la sociedad civil está plenamente empoderada para proteger los derechos humanos y responder a las necesidades de los ciudadanos”. El comunicado añadió que los cambios propuestos “restringirían la capacidad de la sociedad civil para operar en un entorno propicio”.

El 5 de junio la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso aprobó un proyecto de ley para que la Agencia Peruana de Cooperación Internacional registre de forma obligatoria a las organizaciones no gubernamentales que realizan labores de “activismo político”, el cual se define en la propuesta como todo aquello que “busca modificar las políticas públicas nacionales o resultados electorales en favor de los intereses de entidades extranjeras privadas”.

La propuesta tipifica como infracción grave, punible con multas superiores a los 600.000 dólares o incluso la pérdida de registro, destinar recursos de la cooperación internacional a actividades declaradas como “actos que afectan el orden público, la propiedad pública o privada, la seguridad ciudadana, la defensa nacional y el orden interno”.

El abogado peruano José Ugaz, expresidente de Transparencia Internacional, dijo a inicios de junio a la radio RPP que la propuesta —aprobada en una comisión presidida por el partido Fuerza Popular de la derechista Keiko Fujimori— “tiene una motivación política clarísima”.

Recordó que el control de las organizaciones no gubernamentales “no es un invento peruano” porque ya ocurre “en Rusia, está ocurriendo en Georgia, ocurre en Venezuela, en Nicaragua y en otros lugares y en otros países donde se pretende controlar el trabajo de la sociedad civil”.

Ugaz indicó que a los legisladores conservadores les molestan las acciones de las organizaciones no gubernamentales, en particular aquellas dedicadas a movilizar a la sociedad en la lucha contra la corrupción y el fortalecimiento de la democracia.