Perú reconoce que los casos de dengue son un "grave problema" y evalúa la emergencia en 4 regiones

LIMA (AP) — Perú reconoció el viernes que las infecciones con dengue se convirtieron en un “grave problema” nacional que “se desborda de las manos”, luego de que los contagios subieran casi en 100% en comparación con 2023. Las autoridades evalúan declarar en emergencia cuatro regiones pegadas a la costa Pacífico.

El ministro de Salud peruano, César Vásquez, comentó durante una campaña sanitaria en la región Ica, afectada por la enfermedad, que se “ha tenido un pico de aumento de casos tremendo” y añadió que “hoy tenemos un grave problema, estamos prácticamente con un problema que se desborda de las manos”.

Perú suma 24.981 infectados por dengue desde inicios de año hasta el sábado 17 de febrero, fecha en la que concluye la semana epidemiológica número 7, lo cual implica un aumento del 97,8% de los casos respecto a 2023. Los muertos por dengue suman 28, según datos oficiales del Ministerio de Salud.

Vásquez comentó que el gobierno evalúa declarar en emergencia a las regiones La Libertad, Piura, Ica y Ancash, que poseen la mayoría de infectados. Todas son cercanas a la costa del Pacífico, donde ha aumentado la temperatura, así como las lluvias.

El ministro de salud indicó que los factores del aumento de casos están ligados al “calentamiento global”. “La ola de calor es cada vez más fuerte y permanente. ¿Se han dado cuenta que el ultimo año no hemos tenido ni invierno? Es decir, el dengue nunca se ha ido”, comentó.

En diciembre la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que los factores de aumento del dengue en 2023 fueron los cambios en las pautas de distribución de los mosquitos transmisores, junto al aumento de lluvias, humedad y calor, todos vinculados con el cambio climático. También incidió el debilitamiento de los sistemas de salud y la falta de vigilancia.

Según la OMS, la mayoría de los casos de dengue son asintomáticos o leves, aunque algunos pueden causar shock, hemorragias graves e insuficiencia de ciertos órganos, síntomas que suelen aparecer una vez que se ha disipado la fiebre.

Los signos previos incluyen dolor abdominal intenso, vómitos persistentes, sangrado de las encías, acumulación de fluidos, letargo o inquietud e inflamación del hígado. Las recaídas pueden provocar hemorragias y muerte.